El Colegio de Profesores está próximo a vivir una nueva contienda electoral, en la cual renovará su directorio. La lucha por la dirección nacional estará marcada por la lista de continuidad, liderada por el actual presidente Jaime Gajardo, y un conglomerado de movimientos disidentes que se articularon para competir, y que dentro de sus integrantes se encuentra Darío Vásquez, actual secretario general del colegio.
Dentro de las motivaciones que llevaron a la lista “Disidentes Unidos: Somos fuerza, seremos Cambio” a presentarse, se encuentra la profunda crítica a la conducción de Jaime Gajardo, militante del Partido Comunista.
Darío Vásquez plantea que el apego de la gestión del actual presidente a las políticas de Gobierno ha entorpecido la lucha por las demandas reales de los profesores, en particular, la que tiene relación con la carrera docente discutida en 2015, que no consideran satisfactoria.
“Nosotros queremos canalizar el descontento que hay en el magisterio a nivel nacional, que es mayoritario, con respecto a cómo se ha conducido el gremio en los últimos años. Que se expresa en la reunión de las bases del 2014, y en la tremenda lucha que dimos el año pasado con mucha división interna en que un sector que conduce está a favor de la carrera (docente) y avalaba todo lo que plantea el Gobierno. Y nosotros que nos levantamos en contra de la carrera y que está expresada por la voluntad mayoritaria de los profesores en una consulta donde la mayoría del magisterio rechaza esta carrera”.
El candidato disidente manifiesta que su opción se opone a la concepción que plantea el Gobierno sobre cómo ejercer la profesión, dadas las características de las diferentes realidades del país. Apunta a que la estandarización de los procesos de evaluación docente no consideran dimensiones afectivas o de relación con el estudiantado, y que la estandarización no contribuye a mejorar las condiciones educativas para los estudiantes, ni la calidad del trabajo de los profesores. “Esta concepción de que el profesor es único, y que todos deben rendir igual y que todos tienen que dar pruebas para ser mejores profesores, no se condice con la realidad docente”, expresó Darío Vásquez.
Por su parte, el Tesorero Nacional del Colegio de Profesores e integrante de la lista de continuidad “Un solo magisterio, vamos por más”, Juan Soto, declaró que “se han hecho los mejores esfuerzos” para llevar adelante las demandas del organismo. Reconoce que no todo se ha podido lograr con las reformas del Gobierno, pero que el trabajo que planean realizar en el nuevo período apunta a profundizar dicha labor.
“Durante este período de conducción hemos hecho los mejores esfuerzos por ir avanzando. No siempre logramos lo que quisiéramos por diferentes razones. Pero hemos sido siempre resueltos a una cosa. Hemos siempre dicho nosotros conversamos, dialogamos y cuando hay que movilizarse, nos movilizamos. Creo yo que la evaluación que hacemos es positiva. Podría ser que hoy todavía tengan la duda los profesores, porque hemos avanzado en términos, por ejemplo, del sistema de lo que llamamos carrera docente, es un tema que los resultados se van a ver en el próximo año. Entonces puede ser que haya una clara incertidumbre”.
Aspectos programáticos
Dentro del área programática, la lista opositora se plantea realizar una transformación a la forma de hacer docencia mediante un congreso de educación que apunte a una formación de pedagogía crítica, hacer frente al agobio laboral y la deuda histórica, hacerse parte de las demandas ciudadanas como por ejemplo, el fin del sistema privado de pensiones; y además, plantean una reforma a los estatutos de la agrupación, algo que Dario Vásquez detalló.
“Tiene que ver con los cambios internos de la organización para ponerse al servicio de los profesores. Que esta organización trabaje con mucha transparencia, que trabaje con mucha participación del profesorado y para eso entonces vamos a hacer un congreso estatutario, que cambie los estatutos de la organización y le de una nueva vida”.
Vásquez expresó que la promesa del cambio de estatutos viene de mucho tiempo por parte de la actual conducción, y que tal propuesta no se ha llevado a cabo. Si bien, la lista oficialista la incorpora también en su programa, dice no entender por qué después de nueve años recién ahora se abren a esta posibilidad pudiéndolo hacer antes.
En la misma línea, agregó que la idea matriz de su programa es combatir el modelo de educación basado en los intereses mercantiles y el lucro. También señaló que es importante atender los problemas sectoriales de la educación chilena, las condiciones de trabajo de los educadores diferenciales, cómo se encasilló a los profesores en la carrera docente y los problemas de la educación media técnico-profesional.
“Ninguna de estas cosas están siendo asumidas por la actual conducción y no las van a asumir nunca (…) Porque hay una razón que nos diferencia profundamente de la conducción de Gajardo, que nosotros queremos una organización que tiene que ser independiente de los partidos y de los gobiernos de turno “, manifestó Vásquez.
Por parte de la lista de continuidad, Juan Soto expresó que apoyados en lo logrado en materia de carrera docente y continuidad laboral, pretenden cambiar la forma de la evaluación a los profesores de manera que no sea “punitiva” sino “formativa” y la reparación de la deuda histórica. Pero también apunta a enfrentar las próximas reformas con unidad.
“Por supuesto que todavía nos queda mucho por hacer, quisiéramos que el Estado que se haga cargo, tenemos la desmunicipalización donde de verdad creer que hay una serie de falencias y que en donde tenemos que profundizar el trabajo. Pero eso se va a hacer en la medida que tengamos un colegio unido. Aquí no sobra nadie”
Además, sostuvo que planean continuar con una mesa técnica para mejorar la estructura de la evaluación docente, y además, que el sistema de la carrera docente sea universal para todos los profesores.
En este sentido, precisó que las dificultades que se viven en las reformas educacionales tienen que ver con los conflictos de intereses de los mismos políticos. “La resistencia es cruzada. No sólo en los sectores de derecha, incluso dentro de la Nueva Mayoría, porque estamos tocando intereses económicos y luego lo que es más profundo, que es un tema ideológico. Porque aquí sí que se están cruzando, quienes estamos por crear un sistema un educación que se saca del mercado y que el Estado asume su rol de garante de derecho social”, señaló Soto.
Juan Soto concluyó afirmando que si existe la desconfianza dentro del gremio, no será posible llevar adelante las transformaciones. Invitó a los grupos disidentes a plantear cuáles son las alternativas, ya que algunos integrantes también son parte del directorio.
En términos de representatividad de los docentes, Soto manifestó que en la medida que el colegio vaya generando logros y terminar con las rencillas internas, podrán reencantar a quienes no se suman al Colegio. Por su parte, David Vásquez, apeló a que es necesario configurar una nueva institucionalidad que abogue por la probidad en el trabajo de la organización.
Se trata de una contienda con marcadas tendencias, que medirán sus fuerzas el próximo 23 de noviembre, donde además participan otras tres listas: Movimiento Izquierda Revolucionaria más Movimiento Docente Autónomo, Nueva Alternativa Gremial, ligada a Renovación Nacional y la UDI; y Recuperemos el Colegio de Profesores desde las bases, que cuenta sólo con un candidato.