Después de días de discusión, el Ministerio de Hacienda ingresó al Congreso su propuesta de reajuste al salario mínimo.
Según lo expresado por la cartera que lidera Felipe Larraín, la proyección de La Moneda es elevar en un 2,7 por ciento el salario, situándolo en $283 mil 500, monto que sería reajustado en seis meses más.
El texto del gobierno plantea un reajuste plurianual por los próximos tres años. Tal como señala Pulso, la medida buscaría que el reajuste sea consecuente con las proyecciones de crecimiento estimado en el Informe de Política Monetaria del Banco Central (IPOM).
“Si la proyección del PIB es mayor que 4 por ciento, el salario mínimo aumentará en el mismo nivel, es decir, que si se espera un 4,5 por ciento de crecimiento, la remuneración subirá 5 por ciento”. En cambio, “si el pronóstico es peor y se prevé que la economía estará bajo 2 por ciento, el incremento del reajuste sólo será de 3,5 por ciento nominal”, dijo la autoridad a Pulso.
Desde la Democracia Cristiana (DC), el diputado Pablo Lorenzini adelantó que su partido no entregará los votos a la propuesta que consideran “muy baja”. Según dijo el parlamentario a Emol, la falange peleará por que el salario mínimo cierre en $300 mil.
El próximo martes el proyecto será presentado en el pleno del Hemiciclo, para iniciar la discusión en comisiones de Hacienda y Trabajo según dicten las urgencias indicadas desde el Ejecutivo.