A través de una declaración pública, el Consorcio de Universidades del Estado de Chile, CUECH, se refirió a la situación de Marcela Cubillos y el alto sueldo que recibía por parte de la Universidad San Sebastián.
En el comunicado, la entidad señala que “manifestamos nuestra preocupación por la ausencia de transparencia y control financiero respecto del uso de los cuantiosos recursos públicos que el Estado entrega directamente vía becas y gratuidad, o que avala -con un alto gasto fiscal anual- mediante el CAE, a universidades privadas del país”.
En esa línea agregan que “esta situación revela las deficiencias que existen en la regulación de la educación superior en Chile, que demanda un cambio urgente en favor de la transparencia del sistema. Solo así se podrá garantizar un buen uso de los recursos públicos, sin privilegios para algunas instituciones que amparadas en su carácter privado no rinden cuentas por el financiamiento fiscal que reciben directa e indirectamente”.
El CUECH agrega que “junto con la necesidad de mejorar la regulación y corregir los vacíos que facilitan la opacidad en el uso de los recursos públicos en universidades privadas, es indispensable que la actual institucionalidad haga uso de sus atribuciones y fiscalice el adecuado cumplimiento de la ley vigente que regula el lucro en la educación superior y prohíbe el uso de recursos en fines distintos a los estrictamente académicos”.
En ese sentido, valoran “que la Superintendencia de Educación Superior tome acciones concretas para investigar qué ha pasado en el caso de la Universidad San Sebastián, y esperamos que se esclarezcan, a la brevedad, todas las aristas y alcances de este caso”.
Al mismo tiempo recalcan que “a diferencia de las universidades privadas que reciben dineros fiscales, las Universidades Estatales nos encontramos sujetas a un amplio conjunto de regulaciones, precisamente porque manejamos dinero público”.
El comunicado cierra señalando que “los recientes sucesos han demostrado que los resguardos actuales son insuficientes para evitar abusos y eventuales vulneraciones a la ley, amparados en una interpretación equivocada de los alcances de la libertad de enseñanza o de la autonomía universitaria”.
Finalmente, el CUECH hace un llamado “a las autoridades del Estado a tomar las medidas urgentes y necesarias, administrativas, legislativas o judiciales, que permitan garantizar a la sociedad chilena la transparencia total en el uso de recursos públicos en universidades privadas, especialmente ahora que se inicia la discusión del Presupuesto General de la Nación para el año 2025, y nuevamente se contemplan recursos relevantes para la educación superior privada, que superan con creces la inversión del Estado en sus propias universidades públicas”.