La falta de un acuerdo político en materia previsional causó la reactivación de esta discusión. Mientras, economistas advierten que sacar los fondos de pensiones es una “pésima” idea, pero reconocen que podría ser un “alivio” para las familias.
Pese a que el Gobierno cuenta con sus votos en los cálculos para su aprobación, parlamentarios del centro político condicionan sus acciones al aumento del autopréstamo y a mayores certezas en el destino del 6% y la división de la industria.
Con algunos descuelgues del oficialismo, el proyecto de reforma constitucional cayó con 96 votos en contra y 39 votos favorables, de manera que no podrá presentarse una iniciativa similar hasta el próximo año.
Si bien el legislador indicó que el PC tiene en consideración las consecuencias macroeconómicas que ha alertado el Gobierno, acotó que el Ejecutivo puede profundizar en materia de ayudas adelantando el aumento del sueldo mínimo.
En conversación con Radio Universidad de Chile, el diputado socialista argumentó que, de aprobarse el proyecto, “el descalabro económico que podría implicar va a golpear no solamente a la economía, nos va a golpear a todos”.
El parlamentario señaló que la propuesta debe ser modificada sustantivamente ya que de lo contrario provocará serios problemas en el mercado nacional. “Economistas de las más diversas tendencias han señalado que sería tremendamente grave”, afirmó.
Desde la oposición y el oficialismo concordaron en que el anuncio del Ejecutivo no considera a la clase media. “Estas medidas no van a frenar el autopréstamo o cualquier retiro futuro de las AFP”, indicó el diputado socialista Jaime Naranjo.
La otrora ministra de Trabajo del Gobierno de Piñera consideró que las discusiones sobre retiros de fondos han minado el sistema de seguridad social, el que a su juicio se mejora ahorrando más y fortaleciendo la PGU.