Este lunes la Corte Suprema entregó la nómina final de los candidatos y candidatas a suceder a Jorge Abbott a la cabeza del Ministerio Público.
En entrevista con Diario y Radio Universidad de Chile, trabajadores de la institución comentaron cómo el caso del fiscal Arias desató una serie de conflictos al interior del Ministerio Público que han mellado su labor investigativa.
El jefe del Ministerio Público, Jorge Abbott, había solicitado la remoción del persecutor regional de O’Higgins por “mal comportamiento y negligencia manifiesta”.
El caso Arias partió en abril del 2019, luego de que el persecutor adjunto de Rancagua, Sergio Moya, lo acusara de una serie de irregularidades.
Además, se anunció que la sentencia se dará a conocer el 13 de febrero a las 13:30 horas.
La próxima semana será clave para el suspendido fiscal, toda vez que Jorge Abbott anunció el inicio del proceso de remoción en su contra ante la Corte Suprema.
Luego de su formalización, el fiscal suspendido cuestionó el proceso en su contra. “Ojalá no nos acostumbremos a formalizaciones tan equívocas”, dijo.
El jefe del Ministerio Público acogió la propuesta del fiscal regional de Antofagasta, Sergio Ayala y decidió la máxima sanción para el persecutor de O’Higgins: sus suspensión de hasta dos meses con goce de media remuneración hasta la activación de procedimiento ante la Corte Suprema para removerlo.
Esta situación se dio debido a que la fecha anunciada en un principio (6 de septiembre) topaba con una audiencia del fiscal Eugenio Campos por el caso de fraude de Carabineros.
Sergio Moya denunció a su superior por los delitos de tráfico de influencias y obstrucción a la justicia en diversas causas penales llevadas adelante por la fiscalía de O’Higgins. Arias asegura que Moya solo busca difamarlo.
Moya está siendo sujeto de un sumario administrativo luego que en su domicilio fueran encontrados diversos elementos probatorios relacionados con la investigación por tráfico de influencias, y otros delitos relacionados con corrupción, contra tres ministros de la Corte de Rancagua.
Tras un allanamiento, la PDI encontró carpetas investigativas y una serie de aparatos tecnológicos que estarían relacionados con el caso de los jueces de Rancagua vinculados a diversos delitos de corrupción. Luego del procedimiento el fiscal nacional, Jorge Abbott le quitó la causa al fiscal Sergio Moya.