Este fin de semana se supieron detalles sobre qué fue lo que pasó con Nabila Rifo, la mujer aysenina brutalmente agredida por su pareja a mediados de mayo. El doloroso relato tuvo repercusión en los medios, que destacaron la presencia de alcohol en la escena del delito y difundieron versiones que directa o indirectamente culpabilizan a Nabila de su agresión.
Un grupo de diputados ingresó un proyecto de ley que pretende que el delito de femicidio contemple no sólo a la pareja de una mujer víctima de este tipo de agresión, así como eliminar la causal de los celos como atenuante.
Pareciera que para poder sentirnos en la piel de otra tenemos que imaginarnos que se trata de nuestra madre, nuestra hija o nuestra hermana. No basta con saber que a una desconocida le sucedió.
El ataque contra Nabila Rifo en Coyhaique reinstaló el debate por las reformas y políticas públicas necesarias para enfrentar la violencia contra las mujeres. “Estamos trabajando para evitar que sigan sucediendo hechos tan brutales”, señaló la ministra del Sernam.
Mauricio Ortega y un amigo fueron interrogados por Carabineros luego que Nabila Rifo fuera hallada con graves lesiones, en plena vía pública. “No hay nada que justifique este nivel de crueldad”, dijo la ministra Claudia Pascual.