A cinco días del ingreso al Congreso del proyecto de Reforma Laboral, persisten las inquietudes de los empresarios y de los trabajadores sobre el fin del reemplazo en huelga y la tan ansiada titularidad sindical. En ese marco el gobierno ha sostenido las últimas reuniones con diversos actores políticos y sociales antes de enviar el proyecto. Radio Universidad de Chile conversó con el presidente de la Confederación de los Trabajadores del Cobre, Manuel Ahumada, sobre esas inquietudes que persisten en el ambiente previo a la discusión laboral.
En medio de la discusión por la Agenda Laboral que el Ejecutivo ingresará a discusión en el Parlamento el próximo 29 de diciembre, la Alianza anunció una propuesta de Reforma Laboral que, hasta el momento, aborda puntos que no han sido mencionados en la iniciativa del Gobierno: Sala cuna universal, Estatuto laboral para jóvenes estudiantes que trabajan y Estatuto laboral agrícola. El diputado (PS) Osvaldo Andrade criticó esta iniciativa calificándola como improvisada
El presidente de la Sofofa señaló que está de acuerdo con el fortalecimiento sindical, siempre y cuando no se obligue a los trabajadores a formar parte de un sindicato. Por su parte, Organizaciones sindicales y Fundación Sol rechazaron las afirmaciones de la Asociación de Industrias Metalúrgicas y Metalmecánicas (Asimet), en el sentido que una reforma laboral centrada en el fortalecimiento de los derechos colectivos tendría un impacto negativo en la calidad de los empleos.
En conversación exclusiva con Radio Universidad de Chile, el candidato a la presidencia del Partido Socialista compartió una reflexión sobre la gestión de la Nueva Mayoría en su primer año de gobierno: “Nadie habla de volver a los consensos. Lo que pasa es que la mayoría de Gobierno es heterogénea y tiene opiniones distintas. Me llama la atención que una izquierda que se reconstituyó después del golpe y la dictadura, sobre la base de la diversidad tenga dificultades para enfrentar divergencias. Y lo que ocurre hoy es que en el ámbito de la Educación la Nueva Mayoría tiene distintas opiniones. Tiene una dificultad y es que se demora en resolver las diferencias. Por eso había que partir por la Educación Pública, porque es más nítida y genera más acuerdo”.
Luego de meses de negociaciones entre el Gobierno y las organizaciones de trabajadores y empresarios el lunes 29 de diciembre el proyecto de Reforma Laboral hará su ingreso al Congreso para comenzar el debate parlamentario. No obstante, distintos actores sociales y académicos ya deslizan críticas a la iniciativa la cual, coinciden, no resuelve los problemas de fondo como son la negociación colectiva, la titularidad sindical y el despido por necesidades de la empresas. Lo que se agudiza al comparar la situación de Chile con respecto de sus vecinos.
Siguen las negociaciones por Reforma Laboral. La Central Unitaria de Trabajadores indicó que han avanzado en las conversaciones con el Gobierno donde no transarán ni la titularidad sindical, tampoco la idea de impedir que las empresas puedan desvincular a sus funcionarios aduciendo necesidades de la entidad.
Palabras de buena crianza y reconocimiento a las demandas de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) fue el balance luego de las tres reuniones que sostuvo la Ministra de Trabajo Javiera Blanco en el transcurso de este jueves. Primero la ministra sostuvo una cita por tres horas con la CUT en el Ministerio de Hacienda, junto con el ministro Alberto Arenas, luego con parlamentarios del área de Trabajo de la Nueva Mayoría, y finalmente con la UDI que le presentó su propia iniciativa en esta materia.
A partir de la encuesta a mujeres chilenas que realizó el Centro Regional de Derechos Humanos y Justicia de Género, Humanas, organizaciones sociales llamaron al Ejecutivo a poner atención a la diferencia de género que contienen dos de sus “grandes reformas”, educacional y laboral, y los a temas históricamente en deuda, como son los derechos indígenas, sexuales y reproductivos.
El futuro de la Reforma Laboral sigue generando preocupación en diversos sectores, sobre todo por las contradicciones en las que han caído sus ministros responsables de Hacienda y Trabajo. Mientras el primero asegura que las reformas se presentarán de manera gradual, la segunda lo descarta e insiste en que el proyecto no ha sufrido modificaciones.
La Democracia Cristiana sugirió incluir al sector público en la Reforma Laboral, en especial para efectos de regular la negociación colectiva. Si bien las autoridades no se han pronunciado sobre la propuesta, la idea abrió el debate sobre la forma en la que está operando el sector público y si es conveniente mantener su estatuto separado o unificar la legislación que regula al sector privado y el fiscal.
El Gobierno reiteró el llamado a la tranquilidad a los pequeños y medianos empresarios por la discusión de la agenda laboral y se reunió con diputados y senadores de la DC y el PPD para consensuar los puntos a trabajar. Mientras que la ministra del Trabajo, Javiera Blanco, salió al paso de las críticas por la Agenda Laboral y sostuvo que su ministerio está abierto para que todos los actores expongan sus posiciones.
La fuente originaria de redistribución de la riqueza es el trabajo, pero los cuatro gobiernos de la Concertación negaron eso, tratando de crear una sociedad más igualitaria vía políticas sociales, Auge, pilar solidario, etcétera, sin tocar el mundo del trabajo. El resultado está a la vista: tenemos la misma desigualdad que el 90. Los países más igualitarios son donde la negociación colectiva es del 90 por ciento.
La primera mujer presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Bárbara Figueroa, no está pasando por un buen momento. Esto debido a las críticas que ha recibido por parte del manejo que ha tenido la multisindical en diversos conflictos que se han suscitado en los últimos días. El retraso de la Reforma Laboral, el rol que jugó en la movilización de los profesores, su ausencia en algunas reuniones de la Mesa del Sector Público y la pasada negociación por el Salario Mínimo, asoman entre las críticas.
El llamado Cuarto Pilar de las reformas del gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, cuyo objetivo según sus palabras es “emparejar la cancha” en las condiciones institucionales de la relación laboral, considera ampliar la sindicalización y la negociación colectiva. Según organizaciones sindicales y analistas, se dará un debate donde los derechos de los trabajadores serán relativizados.
Como error político calificó el diputado Tucapel Jiménez la demora en el envió del proyecto de Reforma Laboral. El diputado se unió al llamado para que el proyecto contenga los lineamientos que fueron consensuados con los trabajadores, y que no sea atenuado ni moderado debido a las presiones del empresariado
Luego de que la ministra del Trabajo, Javiera Blanco, realizara una relativización de los derechos de los trabajadores de acuerdo a la cantidad de empleados en una empresa, la presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa, llamó al Ejecutivo “clarificar el tenor con que enfrentará este debate que ya dejó de ser técnico”.
En un seminario universitario la titular del Trabajo, Javiera Blanco, matizó algunos de los ejes de la Reforma Laboral. Esto molestó a la presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores y a los gremios que la conforman donde, nuevamente, se levanta la crítica a la conducción de la CUT y su vínculo al gobierno.