La jornada de movilización convocada por la Agrupación de Empleados Fiscales (ANEF), en protesta por los más de dos mil quinientos despidos que han sacudido la administración pública desde la llegada de Sebastián Piñera a La Moneda, logró una de las convocatorias más amplias del último tiempo, con una adhesión de más del 90 por ciento, según sus dirigentes.

El paro de actividades por 24 horas comenzó temprano en todos los servicios públicos del país que son dependientes de la administración central, exceptuando los hospitales y la salud municipal.

La jornada comenzó con un balance realizado por el presidente de la ANEF, Raúl de la Puente, donde acusó graves presiones por parte de autoridades de gobierno a los empleados públicos.

“Hemos tenido algunas presiones fuertes en el Servicio Agrícola y Ganadero  (SAG) en Río Negro. Hemos tenido listas que el ministro está haciendo correr dentro de la administración pública en el ministerio de Justicia y en Chiledeportes un subsecretario, que acaba de vender unas acciones de Colo  Colo al consuegro del Presidente de Piñera, ha amenazado a los funcionarios públicos con las penas del infierno”, acusó de la Puente.

Junto con instaurar una mesa sectorial que aborde temas como la negociación colectiva, el derecho a huelga, la estabilidad laboral y el traspaso de la mayoría de los trabajadores a contrata y  honorarios a la planta, el dirigente pidió al mandatario cumplir con su promesa de que no habrían despidos injustificados y masivos en la sector fiscal.

“El mensaje al Gobierno es que dialogue y que las promesas que se empeñan se cumplan. Si el Presidente aseguró que no iban a haber despidos, no pueden haber dos mil 500, ni el peligro de que éstos continúen para los 100 mil trabajadores a contrata y honorarios que se desempeñan en la administración pública”, sostuvo el dirigente.

Por su parte la representante de la Asociación Nacional de Funcionarios de la Presidencia de la República (ANFUPRES), Rosa Matus,  denunció que además de los despidos existe un mal clima laboral. “Nosotros adherimos al paro por el ambiente que hay al interior de La Moneda. La gente está muy asustada y todos están pensando cuándo les va a tocar a ellos”, dijo y  aseguró que “nunca ha habido tantos despidos como con el nuevo gobierno”.

En La Moneda la movilización  se vivió “a brazos caídos” o “trabajando a media máquina” y según manifestó  el presidente de los trabajadores de la Secretaria General de Gobierno, Leonardo Aliaga, “adhirieron al paro pese al temor de las represarías”.

A esta jornada de protesta se plegaron los estudiantes secundarios y universitarios de diversos movimientos estudiantiles, como la Asamblea de Estudiantes Secundarios, la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios, la Confederación de Estudiantes de Chile y la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile.

Desde el gobierno, en tanto, la ministra portavoz del Ejecutivo, Ena Von Baer, tildó de “ilegal” la paralización de funciones de la ANEF, por lo que se descontarán las horas no trabajadas y aseguró que las desvinculaciones han sido acotadas.

La vocera indicó también que “tenemos abiertas las mesas de diálogo para conversar y avanzar en todos los temas que a ellos les interesan. Lo importante para el gobierno es que la mayoría de los empleados públicos con los que estamos trabajando hoy vienen de la administración anterior. Por otra parte, las desvinculaciones han sido absolutamente acotadas y si deben a evaluaciones, a programas que ya no se realizan y a duplicidad de funciones”.

La secretaria de Estado dijo desconocer el documento que habría enviado el ministerio de Hacienda a la ANEF, el que decía que continuarán los despidos hacia fin de año.