Hasta el Palacio de La Moneda llegaron los integrantes de la mesa ejecutiva de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) para entregar una misiva al Presidente Sebastián Piñera en la que le exigen que responda a la brevedad sus demandas para poder iniciar un proceso de diálogo.
Esto, porque a juicio de los estudiantes, el ministro de Educación, Felipe Bulnes, hasta el momento sólo ha entregado modificaciones a la propuesta inicial del Ejecutivo – el acuerdo GANE – sin referirse a los cambios estructurales que el movimiento ha puesto sobre la mesa.
El presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (FEUC), Giorgio Jackson, aseguró que el único plazo que tiene el Presidente es un plazo moral, que está dado por los graves hechos que se viven en el país, como la huelga de hambre de estudiantes que están dispuestos a ofrendar sus vidas por reformas sustanciales al sistema educacional.
“Claramente no hay una preocupación por ver un tema de fondo, que tiene que ver con un derecho a la educación pública de calidad. Hoy no tenemos un pronunciamiento respecto de eso y es una causa absolutamente legítima, pero vemos que la desesperanza está abarcando a los jóvenes en Chile que están llegando a una decisión tan extrema como esa por lo cual el llamado no lo ponemos a través de ultimátum, ni por medio de distintos plazos, sino que es un plazo moral donde el gobierno de Chile debe hacerse cargo de esta demanda que no es de un grupo minoritario”, sostuvo el dirigente.
Jackson añadió que la Confech está muy preocupada por el clima de criminalización de los movimientos sociales, agudizado luego de la gran aceptación del llamado a Paro Nacional de este miércoles y jueves, que ya suma a más de 82 organizaciones sociales y sindicales.
El dirigente indicó que este ambiente favorece “a que haya un debate con temas tabú, que sean olvidados o que por una ideología que predomina no se quieren debatir” y agregó que el amedrentamiento policial no es sólo hacia los estudiantes, sino también a los trabajadores.
Por su parte, la presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH), Camila Vallejo, sostuvo que la misiva es “una interpelación al Presidente para transparentar el debate y saber si finalmente él va a tener la voluntad de entender la educación como un derecho social y universal y no como un bien de consumo”.
La representante de los universitarios sostuvo además que “debe haber una respuesta antes de sentarse a conversar, que sea positiva en el sentido que haya voluntad por hacer un cambio en el paradigma de la educación en Chile, es decir, entenderla no como un bien de consumo, como el privilegio de unos pocos y como un negocio, sino que hacia un derecho social universal que debería estar garantizado por el Estado”.
La Confech aprovechó la ocasión para reafirmar su pleno respaldo al Paro Nacional de esta semana. Para el próximo sábado esperan concluir con la redacción de un documento en el que explican la factibilidad y lo justo de la demanda de educación gratuita en Chile.