Cerca de cien estudiantes de la Universidad Técnica Federico Santa María, sede Concepción, llegaron ayer a Valparaíso para solicitar la rebaja de las matrículas y el congelamiento de los aranceles.
Según Gonzalo Rojas, presidente de la Federación de Estudiantes de esta casa de estudios, varios puntos de un petitorio aprobado por la mayoría de los alumnos fueron solucionados en la ciudad penquista. Sin embargo, estas dos demandas sólo pueden ser tramitadas por las autoridades de la casa central de Valparaíso, razón por la cual Gonzalo Rojas pidió celeridad y adelantó que las protestas continuarán: “mientras no veamos avances concretos en aranceles y matrículas no nos movemos de Valparaíso”, recalcó.
En tanto, en la Región del Biobío, las autoridades de la Universidad de Concepción decidieron suspender las actividades académicas hasta el 5 de noviembre. Esto, debido a un “clima de violencia”, según expresaron mediante un comunicado, que dice relación con la toma de los campus Chillán, Los Ángeles y de tres edificios de la sede central.
La determinación fue criticada por Recaredo Gálvez, presidente de la Federación de Estudiantes, quien negó que las demandas de los alumnos, reducción de aranceles y eliminación de la cuota básica, sean “imposibles” de efectuar, tal y como lo afirmaron las autoridades.
Además, Gálvez criticó a estas mismas autoridades por “señalar que son ilegítimas la mayoría de las manifestaciones que han sido aprobadas por las grandes mayorías”, lo que estaría intentando “ir deslegitimando este órgano de participación y organización estudiantil. Eso es peligroso, pues se está sentando una imagen que está trasgrediendo la autonomía que hoy día deben tener las federaciones” recalcó.
Gálvez enfatizó en que el 75 por ciento de los alumnos participa del proceso de movilización, por lo que negó que sean los estudiantes quienes se oponen al diálogo. Incluso, el dirigente aseguró que habían claras intenciones de parte de los estudiantes de “presentar nuestras demandas y argumentos a ellos, así como también una serie de dudas que salen de los análisis de los estados financieros, plantearlo en una mesa de trabajo, pero ya que no se ha podido hacer vamos a tener que plantearlo jurídicamente”, anticipó.
Gabriel Boric, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, dijo que en la Confech están atentos al conflicto en ambas universidades de Concepción, ya que la disminución de aranceles es una demanda transversal de la educación superior. En esa línea, Boric asegura que “los nuevos recursos que se han ido logrando mediante aportes fiscales directos no son para hacer más competitiva a las universidades desde criterios de mercado, sino para avanzar a la gratuidad” y que por tanto, la situación de las universidades penquistas es “un tema que independiente de la región vamos a tener que abordar durante si no este, el próximo año”.
La Federación de Estudiantes de la Universidad de Concepción convocó, para este jueves 25, a marchas locales en la Región del Biobío, en coordinación con la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios, según precisó Recaredo Gálvez.