El Director del Servicio de Impuestos Internos, Julio Pereira, se refirió a los cuestionamientos sobre su gestión, luego del informe conocido este jueves, emanado por Contraloría, que evidencia una serie de errores y vicios en su administración y el cual dijo “está analizando”.

Al respecto Pereira señaló que “”en las conclusiones más relevantes se da un plazo de 60 días al SII para derogar antiguas instrucciones del servicio. Muchas de estas, en el hecho, ya han sido derogadas, por tanto hemos cumplido”.

Pereira agregó que “asimismo se ordena instruir un sumario en la dirección de grandes contribuyentes, relacionado con el timbraje a algunos contribuyentes que habrían solicitado el término de giro”.

En tanto en conversación con la primera edición de Radioanálisis, el diputado RN y ex miembro de la comisión investigador del “Caso Johnson’s”, José Manuel Edwards, acusó una “persecución política” en contra de Pereira e hizo un llamado a esperar el sumario administrativo que se está llevando a cabo al interior de la entidad.

Errores administrativos y faltas a la probidad

El informe detalla que ambos personeros no cumplieron con su deber de abstención al derivar antecedentes del caso a la División de Auditoría Administrativa, además de la autorización a firmar más de 500 facturas que cuando el SII ya estaba informado del estado financiero de la empresa.
Otro de los aspectos detectados es la autorización de condonaciones por parte de Pereira, a empresas en las que tenía participación accionaria, como Banco de Chile, Colbún, Corpbanca, Enersis, Comercial Eccsa, Cencosud, Banco Santander, AES Gener y LAN.

Por todo esto la CGR instruyó un proceso disciplinario en la Dirección de Grandes Contribuyentes, (DGC), con el fin de establecer las posibles responsabilidades administrativas.

El dirigente de la Asociación Nacional de Funcionarios de Impuestos de Chile, Carlos Insunza, destacó que finalmente el sumario administrativo instruido establece que el caso sigue en curso.

“En el caso Johnson’s no se han cumplido ni los procedimientos ni la legalidad vigente que abarca las condonaciones y que, en este caso, los altos ejecutivos del Servicio, Julio Pereira y Mario Vila, intervinieron dentro de la condonación, habiendo tenido la obligación de abstenerse. Por lo tanto, estamos ante un proceso que tiene múltiples irregularidades que deben seguir siendo investigadas y, de hecho, el sumario administrativo respecto a la materia sigue en curso”, manifestó.

Fuad Chahín, diputado de la DC quien presidió la comisión investigadora del caso (cuyo informe fue rechazado), afirmó que esto llama a la implementación de medidas urgentes, y que interpela al Gobierno por haber respaldado a Pereira.

“¿Por qué para mantener y ratificar en el cargo a Julio Pereira se inventó un informe que no existía y por qué hoy día la Contraloría ha ratificado lo que nosotros denunciamos desde un principio? A mí me parece que aquí hay que tomar medidas urgentes para que este servicio que, recordemos, fue el que más cayó desde el punto de vista de la visión de los chilenos en tanto la corrupción de acuerdo a las últimas encuestas, pueda en definitiva recuperar la legitimidad y, para eso, el gobierno no puede seguir dilatando este tema, no puede seguir respaldando a Julio Pereira. Hoy día el informe de Contraloría ratifica que actuó fuera de la ley”, acusó.

El legislador agregó que el proceso disciplinario obligará sanciones a Vila y al director del SII, al mismo que tiempo que obligará al Ejecutivo a “pedir disculpas”.

“El sumario en curso no tiene otra alternativa que sancionar a Julio Pereira y a Mario Vila. Y el gobierno no tiene otra alternativa que pedirle disculpas al país por haber mantenido a un director del Servicio de Impuestos Internos que ha incumplido la ley, que no ha actuado de manera recta y proba, al mando de un servicio tan importante”, expresó.

En el gobierno en tanto se habría instruido efectuar una completa revisión del informe de Contraloría antes de tomar una decisión definitiva sobre el futuro de Pereira.

Según se comenta en los pasillos del Palacio de La Moneda, la distancia que existe hoy entre el ejecutivo y Carlos Larraín, sumado al costo político que significaría su permanencia en época de campaña podrían derivar en la salida de Pereira del servicio.