El doctor Luis Ciocca, profesor normalista, odontólogo forense, académico y director del departamento de Medicina Legal de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, recordó este jueves su aporte en el reconocimiento de Marta Ugarte Román, desaparecida en 1976.

Marta Lidia Ugarte Román nació en Santiago el 29 de julio de 1934. Fue profesora, modista y miembro del Comité Central del Partido Comunista de Chile. El 9 de agosto de 1976 fue detenida por agentes de la DINA y, según testigos, permaneció recluida en el sector denominado La Torre, de Villa Grimaldi. El 16 de agosto de ese año se interpuso un recurso de amparo en su favor y se iniciaron numerosas gestiones destinadas a lograr el reconocimiento de su detención y lugar de reclusión.

Poco más tarde, el 12 de septiembre, las páginas de crónica roja de la prensa santiaguina daban cuenta del hallazgo de un cadáver de mujer, al norte de la playa de Los Molles.

Luis Ciocca había sido dentista de Marta Ugarte y sus hermanas y recordó que continuó atendiéndolas después del golpe de Estado: “En algún momento Marta me pidió que fuera muy cuidadoso con su ficha, porque estaba viviendo una situación muy particular, ya que mantenía un trabajo político como miembro del Comité Central del PC”, dijo al programa A Tu Salud de Radio Universidad de Chile.

Luego de la desaparición, según relató, un día viernes recibió un llamado teléfonico y le pidieron que fuera al Instituto Médico Legal para identificar a un cuerpo de mujer que no había sido reconocido, pero tenía rastros de tratamientos dentales recientes. El médico buscó su ficha, radiografías y modelos y se trasladó al lugar, donde confirmó que se trataba de Marta Ugarte.

En marzo de 1991, el Informe Rettig consignó el caso señalando que su cadáver “fue arrojado por sus captores al mar, pero no obstante las precauciones que éstos tomaron para evitarlo, fue encontrado semidesnudo dentro de un saco amarrado a su cuello con un alambre, el 9 de septiembre de ese mismo año en la playa La Ballena, ubicada en Los Molles”.

El profesional recordó que el caso le abrió las puertas de su actual desempeño como odontólogo forense: “Tenía la esperanza, la ilusión, de que estaban en una cárcel secreta y que en algún momento podían ser liberados, como ocurrió en España con Franco y en otras dictaduras. Pero el hallazgo de ese cuerpo y que sea identificado como Marta Ugarte hace que aparezca la primera detenida desaparecida, muerta y en las condiciones en que apareció. Yo vi el cadáver con fracturas, no solo por la caída desde el helicóptero al mar, sino que en la mandíbula por un golpe, probablemente un culatazo o un puntapié. Eso se ha sabido ahora”, relató.

Luis Ciocca agregó que este tipo de labor aporta a avanzar en la verdad: “Poco a poco han venido otras identificaciones. Los cadáveres aparecían luego de estar ocultos por largo tiempo, con osamentas molidas o fragmentadas, entonces conseguir la identificación odontológica eficaz, rigurosa y científica, es una forma de romper la impunidad. En cualquier proceso en que uno identifique, como que cierra el círculo. Mientras tengamos restos sin nombre, puede ser cualquier ciudadano del mundo”, afirmó.