A días de asumir el gobierno de la Nueva Mayoría, los estudiantes enviaron las primeras señales desde la Confech en su primera reunión del año en Temuco, donde se planteó la apertura al diálogo con el Gobierno y el debate interno en cada una de las 31 federaciones participantes.
No se definió el calendario de movilizaciones, dando libertad de acción a cada plantel universitario de plegarse a la próxima “Marcha de Todas las Marchas” del 22 de marzo.
La presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica, Nashla Aburman, señaló que la Confech se mantendrá en contacto con otros actores del mundo estudiantil y se refirió a la forma en que se llevarán a cabo las discusiones para futuras protestas: “Antes de fijar movilizaciones, creemos que por el contexto de que los estudiantes no han llegado a todas las universidades, no hemos tenido tiempo de tener asambleas y por lo tanto lo que generamos fue una pauta de discusión con temas particulares como financiamiento, acceso, democracia universitaria y busca tener conclusiones sobre las estrategias de los distintos temas por parte del movimiento estudiantil”, dijo Aburman.
En tanto desde los escolares, algunos estudiantes secundarios y universitarios en ocasión del cambio de mando se tomaron la sede de la Democracia Cristiana, donde afirmaron que se mantendrán las movilizaciones que han presionado la discusión por educación pública.
“Existe desconfianza hacia la Democracia Cristiana, que ha sido pilar en el modelo educativo que ha hecho crisis y que puede ser influencia dentro de la Nueva Mayoría”, según expresó el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago (FEUSACH), Takuri Tapia.
En línea con lo que ha sostenido también la Confech, Tapia añadió que la agenda de la Nueva Mayoría no es la misma que la del movimiento estudiantil y que de aquí en adelante verán qué plantea el gobierno entrante porque, a su juicio, solo se han visto declaraciones de buenas intenciones y acercamientos a los líderes del movimiento como jugada estratégica comunicacional.
Pero este año hay novedades: la formación de la llamada “bancada estudiantil” y su compromiso con las demandas que le valieron la elección popular. El diputado por Santiago Centro, Giorgio Jackson señaló que para todo el Congreso es un desafío cumplir con la expectativa emanada de la ciudadanía que es entregar a todos los niños y jóvenes educación gratuita y de calidad.
No obstante, recordemos que la bancada estudiantil está compuesta por dos diputadas comunistas, Karol Cariola y Camila Vallejo, el diputado de Izquierda Autónoma, Gabriel Boric y Giorgio Jackson del movimiento político Revolución Democrática.
Al respecto, Jackson indicó que a pesar de las diferencias políticas entre los ex estudiantes que ahora ocupan un escaño en el parlamento se trabajará en pos de un objetivo en común: “Creo que nos vamos a encontrar con varios puntos en los que no estamos cien por ciento de acuerdo, de partida pertenecemos a militancias o a coordinaciones de coalición de Gobierno distintas, pero lo importante es que tenemos en común nuestra historia y nuestra experiencia en el movimiento estudiantil, lo que nos pone un piso común de haber sido parte de esos procesos colectivos, de entender lo que se está demandando por parte de los movimiento y hoy tener algún grado de cercanía con lo que se está demandando. Me imagino que eso va a durar todo el tiempo que estemos legislando”, señaló el diputado.