Por estos días se discute la Reforma Laboral que el gobierno enviará al Parlamento para su tramitación. Diversas impresiones llegan desde el mundo sindical, quienes durante los últimos días han planteados sus molestias por la “letra chica” que contendría esta ley.
En conversación con Radio Universidad de Chile, Manuel Ahumada, presidente de la Confederación de Trabajadores del Cobre se refirió a las diferencias que tienen con la propuesta y puso en énfasis en la necesidad de cumplir con los tratados internacionales, sin ningún tipo de relativización.
¿Cuál es tu opinión del rayado de cancha de la reforma y el rol que le ha correspondido a la contraparte negociadora de los trabajadores?
Como Confederación en particular y al mundo de los trabajadores en general, nos tiene bastante preocupados el tema de la Reforma. Hay contradicciones serias. Tenemos entendido que la CUT está solicitando una reunión con los ministros, porque parece que fueran dos reformas distintas o al menos contradictorias.
Si analizamos el mensaje en su presentación, se dice una cosa, pero en el articulado las cosas se diluyen como, por ejemplo, la titularidad sindical, que se presenta bien, pero adentro se cambia con la penalización de la huelga, el excesivo control y se contradice, incluso, con los convenios con la OIT.
Se tiene que instalar esta discusión. Es necesario que se debatan estas contradicciones, pero nosotros como trabajadores estamos preocupados porque no se respetan los acuerdos internacionales en materia de libertades sindicales, porque las podemos ejercer, pero se restringen a la hora de las negociaciones.
¿Cuáles son los puntos de la actual Reforma que valoran como claves?, esos que no deberían dejar de discutirse con la actual ley.
Principalmente es necesario dar cumplimiento a los convenios internacionales como el 87 y 98 y sus recomendaciones. Dentro de éstas se plantea que debe haber una ampliación al derecho de negociación colectiva en Chile, lo que no se cumple con rigurosidad. En lo internacional se pide ejecutar el artículo 1 del Código del Trabajo, esto no se cumple, no se avanza.
Además, cuando se criminaliza una huelga las cosas se complican. Esto no es una herramienta, es una manifestación por parte de los trabajadores de un conflicto laboral, entonces vemos que hay errores conceptuales graves, que hay que discutir y mejorar. Tampoco se aborda la posibilidad de negociación ramal, por último que exista una supra empresa.
Si miramos la forma de defensa que tienen las asociaciones gremiales de los empresarios esta es la presión económica y ellos no lo tienen limitado, entonces por qué nos penalizan las nuestras. Se le ponen apellidos y se la criminaliza. Así, hay muchas otras cosas, como que los trabajadores por obra faena pueden negociar, pero no tienen derecho a huelga y yo no sé qué trabajador puede negociar sin tener la posibilidad de manifestar su descontento.
Finalmente, lo que ustedes plantean es que internacionalmente hay una serie de derechos que están consagrados y que en el caso de esta Reforma hay mucho límite y letra chica en cosas que deberían estar garantizados sin más…
Así es. Recordemos que la misma Corte y el derecho internacional reconocen la huelga como un derecho absoluto, eso no se lo puede relativizar. Por parte del mismo Ejecutivo se ha planteado como binarios, sin blanco y negro, tenemos derecho a huelga o no, y eso en el articulado del proyecto no se refleja.
¿Específicamente en lo que los involucra a ustedes como trabajadores del cobre crees que puede o no afectarles esta reforma?
Afecta mucho más, porque aunque traten de poner algunas regulaciones (recordemos que nosotros tenemos distinto tipo de trabajadores, contratados, a contrata…) no se afecta a lo internacional.
¿Si esta ley asegurara los tratados y los derechos que están contenidos en ella, eso mejoraría la situación de aquellos que no están de planta en el mundo del cobre?
Sí, pero sin relativización. Porque, por ejemplo, se elimina el reemplazo en huelga, pero se instalan los turnos de emergencia o éticos, de forma muy general. Le tiran la pelota al sindicato, sin especificar que es emergencia o éticos, pero nos exigen que no exista afectación económica, pero si la huelga no es para eso, para qué es.
¿Cómo se evita que se realice una cocina en la tramitación de este proyecto de ley?
Es bastante complejo. No quiero sacar conclusiones, pero al final, en el articulado, una de las cuestiones positivas es que se pone en el debate el tema de los trabajadores, que desde hace cuarenta años no se revisa. Hasta ahora, se le tira la pelota al Parlamento. El tema es que nosotros vamos a tener que generar estas claridades. Instalar la discusión en la práctica de qué es lo que pasa con la negociación colectiva, el derecho a huelga y los derechos de los trabajadores. Nosotros esperamos que se abran los espacios, pero no podemos permitir que se cierren, usaremos todos nuestros medios para lograr que nos escuchen.
Hay que reconocer que en esta reforma incluso se podrían formalizar cosas que hoy se dan por debajo de la mesa, como son las listas negras al movimiento sindical. Hay temas bastante graves, entonces va a servir para saber qué pasa en la práctica.
Hay quienes han dicho que el énfasis que ha tenido la CUT y el movimiento de trabajadores es más bien sindical y que no está preocupada de la creación y calidad del empleo, ¿qué crees tú de eso?
La única herramienta que tienen los trabajadores para mantener y mejorar el empleo es a través de la organización sindical. Entonces tratan de instalar un discurso falso, que con toda la pirotecnia que se ha levantado, han tratado de instalar este tema. Pero los que entendemos de los derechos laborales, somos nosotros, por ello estamos proponiendo y conversando con los empleadores, como mientras las empresas se siguen sosteniendo generamos trabajos sin abusos.
Los sindicatos y la negociación colectiva son las mejores herramientas para distribuir las riquezas en un país, entonces todo esto que plantean es mitología.
Hago un llamado al movimiento sindical a articularnos, a no caer en la crítica entre nosotros. El mundo empresarial es hábil en tratar de dividirnos para que no consigamos mejores negociaciones, entonces nosotros tenemos que dar la pelea juntos.