Con 34 votos a favor se aprobó el proyecto de Educación Parvularia en el Senado. Esta medida posee dos aristas fundamentales. Primero, con esta iniciativa se creará una Subsecretaría específica para este nivel educativo, que estará encargada de diseñar las políticas públicas.
Asimismo, dentro de la Superintendencia se desarrollará una Intendencia, que estará encargada de fiscalizar y orientar a que los establecimientos cumplan con los requisitos mínimos.
De esta forma María Isabel Díaz, principal asesora del ministerio de Educación en esta materia, evaluó de forma positiva, la aprobación de esta política.
“Como Gobierno estamos muy contentos con la creación de la subsecretaría de educación parvularia y la Superintendencia, también, para este nivel. Con esto estamos dando cumplimiento a uno de los compromisos más importantes dentro de la Reforma Educacional. Necesitábamos darle la relevancia que este nivel tiene en el desarrollo de las personas. Con esto estamos dando un gran paso para romper con la desigualdad que comienzan desde la sala cuna.”, afirmó Díaz.
Este proyecto de ley, ya despachado por el Senado, también ordenará la institucionalidad y relevará a la JUNJI en su misión de brindar atención educativa a los niños de 0 a 4 años. En ese sentido, Desirée López de Maturana, la vicepresidenta Ejecutiva de la JUNJI, subraya que con esta política el Estado podrá distribuir, mejor sus tareas.
“Funciones que la JUNJI ha tenido desde su creación por ley y que evidentemente en la actualidad es necesario revisar y modernizar. Es necesario desarrollar una tarea por parte del Estado, bastante más fluida y expansiva.”, aseveró López de Maturana.
Marcela Pardo, experta en primera infancia del Centro de Investigación Avanzada en Educación (CIAE), reconoce la importancia de este proyecto de ley, al resolver uno de los problemas más característicos de la educación parvularia de nuestro país: la institucionalidad segmentada. No obstante, asume que quedan puntos por resolver en esta materia.
“Esta Subsecretaría no resuelve los problemas concretos derivados de esta institucionalidad fragmentada. Por lo tanto esto requiere nuevas modificaciones a la normativa legal para poder resolver los problemas concretos que en la actualidad nos afectan. También es importante avanzar hacia la definición de un esquema de financiamiento único para toda la educación parvularia. Hoy, los aportes que reciben los niños que asisten a este nivel educativo son muy dispares, existiendo grandes diferencias entre un centro y otro.”, explicó la investigadora.
Según cifras del Ministerio de Educación, en la actualidad el nivel parvulario alcanza una cobertura aproximada al 49,7 por ciento en niños menores de seis años. Con esta política este porcentaje no se verá directamente afectado. No obstante, los especialistas explican que para mejorar la cobertura, antes es necesario reconfigurar la institucionalidad.