Al mediodía comenzó la elección del nuevo presidente de la ANFP, proceso para el cual habían dos listas en disputa, lideradas por Pablo Milad, presidente de Curicó Unido, y Arturo Salah, ex futbolista, entrenador y dirigente deportivo, respectivamente.
Finalmente, y tal como se había pronosticado, fue el ex presidente de Blanco y Negro quien se alzó con la victoria, merced a los 28 votos a favor que recibió su postulación -11 clubes de Primera División, que valen por dos, y 6 de la B-, versus los 16 que obtuvo Milad -3 de la A y 10 de la B- con lo que ahora le corresponde a Salah sacar a la ANFP de la crisis en que fue puesta por la anterior directiva, encabezada por Sergio Jadue.
“Es un tremendo desafío que nos compromete a enfrentarlo y a asesorarnos con los mejores hombres en distintas materia, especialmente en lo relativo a materias legales, para devolver la credibilidad de la actividad, que tiene una influencia social inconmensurable”, señaló el flamante presidente del organismo rector del fútbol chileno, luego de conocer los resultados de la votación.
Sin embargo, Salah prefirió la cautela y el realismo a la hora de expresar sus emociones luego de conseguir el triunfo en las urnas: “No es un momento de alegría, de celebración. Es un momento de pena. No es el momento de celebrar. Es el momento de desafiarnos a hacer un nuevo fútbol profesional (…) Llegó el momento y nos declaramos en reunión permanente para iniciar el traspaso de información obligatoria con el nuevo directorio. Es un desafío muy difícil, muy complejo y espero que todos estemos muy involucrados”.
Ahora, una de las tareas prioritarias para la nueva directiva es reunirse con el seleccionador nacional, Jorge Sampaoli, para determinar el futuro del estratega al mando de la Roja.
No obstante estos resultados, la lista liderada por Pablo Milad aseguró que impugnará esta elección ante el Tricel.