Sigue la polémica entre la confederación de camioneros y el Gobierno, luego que ayer las partes no llegaran a acuerdo por el costo de los peajes de las rutas 68 y 78.
La molestia del gremio que representa a trabajadores de la región de Valparaíso radica en el alto valor de las plazas de cobros durante la época estival; también por el extendido uso del horario punta, que encarece más el tránsito por las carreteras.
Para contrarrestar la molestia, desde La Moneda les presentaron una propuesta que incluye reducir estos horarios de cobros elevados, además de garantizar que se estudiará una fórmula para aliviar el tránsito de vehículos pesados en fines de semana. Sin embargo, la CNTC rechazó la oferta y anunció manifestaciones que se podrían extender a todo el país.
En ese escenario, este sábado el ministro de Interior los llamó a deponer las acciones, de lo contrario advirtió que no seguirán negociando. Para Jorge Burgos aún hay tiempo para mantener “abiertas las puertas del diálogo”. A lo que agregó que “las puertas abiertas, sin presiones”.
Burgos también defendió el modelo de concesiones cuestionado por los camioneros. La autoridad validó la alianza público- empresarial que ha “logrado construcción de obras mayores de altísimo nivel”, pese a que los directores de la Confederación ayer criticaron duramente el modelo impulsado por Ricardo Lagos, por privilegiar intereses de las grandes empresas, incluso exigieron a las concesionarias viales reducir las tarifas de las plazas de peaje, por ser estas un desincentivo a la micro y mediana empresa.
Si bien hasta esta hora las movilizaciones no representan retrasos en las rutas 68 y 78, el subsecretario subrogante de Interior, Luis Correa, llamó a que quienes retornen a la capital planifiquen el viaje, considerando que pueden existir demoras.