El Gobierno llamó a la cautela frente a la baja en las cifras de desempleo entregadas por el Instituto Nacional de Estadísticas. En tanto, el decano de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile, Manuel Agosin, desmintió los datos entregados por el organismo público.
Entre noviembre y enero se registró un 5,8 por ciento en la tasa de desocupación, lo que significa cuatro puntos porcentuales menos en doce meses y una nula variación respecto al trimestre móvil anterior.
Al respecto, la Ministra del Trabajo Ximena Rincón señaló que “siempre va ser una buena noticia que el desempleo no aumente, pero hay que ser cautos, porque estamos en un contexto de desaceleración a nivel mundial”. Además planteó que seguirán con su conducción económica “para generar un marco de estabilidad para todos los actores”.
En entrevista con Radio Universidad de Chile, el economista Manuel Agosin, consideró poco creíbles las cifras.
“Yo no soy experto laboral, pero esperaría una tasa de desempleo bastante más alta y es muy sorprendente que la tasa sea tan baja. En otras oportunidades la tasa de desempleo se ha acercado o superado el 10 por ciento con las cifras de crecimiento que tenemos en estos momentos. No sé si cautela es la palabra, pero descartaría el uso de esas cifras para tomar decisiones”.
El aumento trimestral de los ocupados según el INE se explicaría a las alzas en Agricultura con un 4,4 por ciento, Actividades Inmobiliarias y de Alquiler con un 3 por ciento y Comercio con un 0,7 por ciento. No obstante, el experto indicó que el organismo público debiera revisar las fórmulas de cálculo, las muestras que utiliza, las preguntas que hace, entre otros.
“Hay otras variables a tomar en cuenta, Chile está con un déficit fiscal elevado, con necesidad de endeudarse, no queremos perder la calificación de riesgo que tenemos y tampoco hay grandes recursos disponibles en el Fondo de Estabilización Económica y Social. Por lo tanto, más que cautela, diría una política fiscal restrictiva”.
Agosin concluyó que si el 5,8 por ciento no debiera preocuparle al Ministro de Hacienda, quien en su opinión, al ser un buen economista tendría que poner en duda las cifras.