El Gobierno presentó un cronograma para analizar los cambios que busca hacer a la actual ley de pesca, cuestionada por sus alcances y por entregar la concesión del mar a siete familias.
El ministro de Economía, Luis Felipe Céspedes, se reunió con un grupo de parlamentarios a quienes afirmó que el Ejecutivo aún no decide si enviará uno o varios proyectos de ley para modificar la normativa.
Además, desechó la idea de respaldar la propuesta de los diputados Hugo Gutiérrez y Daniel Núñez del Partido Comunista, quienes impulsan la nulidad de la denominada “Ley Longueira”.
“Este es un planteamiento que los parlamentarios están discutiendo al interior de todas sus bancadas. Pero lo que obviamente, desde el punto de vista del Ejecutivo corresponde es que nosotros nos sentamos en esta mesa a discutir precisamente, porque esta es la mesa en la cual nosotros esperamos que se canalicen las distintas visiones, las distintas opiniones que existen respecto de esta materia. Ahora, eso implica que nosotros como Ejecutivo hemos dicho, esto ocurre en la medida en que este sea exclusivamente la vía para discutir esas modificaciones”, precisó Céspedes.
El titular de Economía reconoció además que buscarán respetar la actual institucionalidad, pero se revisará la extensión de las concesiones, que hoy están establecidas por 20 años, renovables de manera automática a las siete familias beneficiadas por la norma.
Mientras, Cosme Caracciolo, dirigente de los pescadores artesanales de San Antonio, sostuvo que la visión del Gobierno no resuelve el problema de fondo que es restituir los derechos sobre los recursos pesqueros a los chilenos.
“Nosotros insistimos en que la Ley de Pesca se debe anular. Más aún ahora que está probado que el señor Longueira por su gestión defendiendo a los grandes empresarios ha recibido dinero, por ejemplo de Soquimich y también estamos sumamente convencidos nosotros de que ha recibido dinero de las pesqueras, no solamente de la zona norte, sino que de las pesqueras en el sur”, comentó Caracciolo.
El dirigente cuestionó a quienes hablan de soberanía y patriotismo cuando entregaron la propiedad del mar a un pequeño grupo de empresas, las que según los estudios han perjudicado la biomasa marina con la depredación de las especies.