Los colores (y el cotidiano) de la Mujer Gallina

La Mujer Gallina es una especie de alter ego de la ilustradora nacional Sol Undurraga, quien recientemente fue premiada con uno de los reconocimientos más importantes otorgados en la Feria del Libro Infantil de Bolonia: el Ragazzi Award. En conversación con nuestro medio, la artista habló sobre su arribo a la ilustración, su obra y sus planes futuros.

La Mujer Gallina es una especie de alter ego de la ilustradora nacional Sol Undurraga, quien recientemente fue premiada con uno de los reconocimientos más importantes otorgados en la Feria del Libro Infantil de Bolonia: el Ragazzi Award. En conversación con nuestro medio, la artista habló sobre su arribo a la ilustración, su obra y sus planes futuros.

La Mujer Gallina y Sol Undurraga son y no son la misma persona. La Mujer Gallina se inclina más por el cómic, por la sátira; Sol, en cambio, por los temas más serios, por la búsqueda de contactos, por el trato con las editoriales. Sin embargo, ambas confluyen.

“Esta especie de alter ego de La Mujer Gallina partió hace mucho tiempo, cuando estudiaba arquitectura. En ese minuto, me sentía como esa mujer gallina que había sido encontrada. Nunca quise matar el nombre y fue perfecto, porque así podía hacer cómics, mientras que Sol Undurraga se ponía en contacto con la prensa”, explica la ilustradora, quien recientemente fue premiada con uno de los reconocimientos más importantes otorgados en el marco de la Feria del Libro Infantil de Bolonia: el Ragazzi Award.

Pero la travesía de la Mujer Gallina y Sol Undurraga no fue fácil. Luego pasar por Argentina, la ilustradora se mudó a México donde comenzó a incursionar en la ilustración. Esto, a la vez que trabajaba para una oficina de arquitectos.

“Siempre me interesó dibujar y cuando empecé a estudiar arquitectura, siempre fue lo que más me llamó la atención. En verdad, la arquitectura me empezó a aburrir un poco y en ese mismo minuto, comencé a colaborar con diarios. Para mí, era más interesante ver mi dibujo publicado a que se construyera un edificio que estábamos diseñando”, recuerda la dibujante.

Sin embargo, la decisión de abandonar la arquitectura vino una vez en Estados Unidos donde creó Los Beans, una serie de cómics dedicados a los inmigrantes que eran publicados en el diario La Jornada Latina. En estas viñetas, la ilustradora representaba a las autoridades estadounidenses como cerdos.

“La Jornada Latina era un diario que me dio el espacio sin ser yo alguien. Justo en ese minuto habían puesto una ley contra los inmigrantes latinos. Ese era un tema que me tocaba muchísimo y también era doloroso. Era injusto. Pero ese fue el principio. Puro amor al arte. Nada muy profesional”, añade.

Luego, la decisión fue profesionalizarse en el ámbito de la ilustración. Por ello, la artista viajó a España. Posteriormente, se asentaría en Alemania.

Bans. Cómic

Cómic Los Beans.

Lo cotidiano y el color        

Con los años, la obra de Sol Undurraga se encaminó y las influencias vinieron de uno y otro lado. En Chile, por ejemplo, cursó un taller con Maliki. En Europa, en tanto, conoció trabajos de artistas italianos y rusos.

Esta mezcla de referentes generó una apuesta colorida, donde el motivo siempre estuvo dado por las situaciones cotidianas.  “Mis referentes son siempre variados y también dependen de qué estoy haciendo”, explica Sol.

“Hay veces en que miro la fotografía, a otros ilustradores, a la pintura. Pero el color siempre me ha importado mucho. Aunque, generalmente, hay tres cosas que me interesan bastante: lo que quiero decir, el color y la composición. Además, las ilustraciones son bien cotidianas y tienen a gente un poco normal. En general cuando me han dado un encargo busco como dentro de mí las cosas más normales para poder encontrar la respuesta al encargo que me están dando”, dice.

El Ragazzi Award fue otorgado a la ilustradora por el libro La plage (L’Agrume, 2017), donde relata las aventuras de un grupo de animales en la playa. En ese proyecto, según comenta la autora aplicó la misma fórmula, es decir, colores llamativos y la cotidianidad. “Tomamos escenas divertidas de lo que pasa en las playas chilenas”, afirma.

acopia_v2

Ilustración para banda de música Lung face feet, Pittsburgh. USA

Ilustración para banda de música Lung face feet, Pittsburgh. USA

Luego de las torres gemelas.

Luego de las torres gemelas.

Teatro Callejero.

Teatro Callejero.

La ilustración chilena

Sol también es optimista respecto de cómo ha crecido el interés en Chile por la ilustración. En su opinión, durante los últimos diez años, el campo ha adquirido una fuerza inusual.

“Admiro mucho el trabajo que se hace en Chile a nivel de ilustración. Me gusta mucho la fuerza que ha agarrado en los últimos años. La gente se apoya bastante, es como una pequeña familia, son puros trabajos de una calidad muy grande y ojalá hayan nuevos trabajos que se puedan visualizar más, porque hay cosas muy buenas”, dice.

Happiness.

Happiness.

Proyectos en camino    

Actualmente, la ilustradora se encuentra trabajando en un proyecto con la editorial inglesa Nobrow. También colabora en El País semanal.

No obstante, la ilustradora afirma que para ella sería ideal poder generar nuevos lazos con medios de comunicación. “La ilustración de prensa me es más fácil. Como que puedo resolver mejor los temas. Creo que puedo  apoyar los textos, en cambio, el cómic me cuesta. Eso es algo que me encanta, pero siempre he tenido problemas para cerrar las historias.  También me gustaría hacer una ilustración mucho más política. Es súper importante y creo que me he alejado un poco de eso. Pero en general, admiro mucho a la gente que le interesa que sus dibujos haya algo más político”.

La Feria Internacional del Libro de Bolonia se realizará  entre el 26 y el 19 de marzo. En 2017, en el marco de la misma actividad, también fueron premiadas la escritora Sara Bertand y la ilustradora Alejandra Acosta. También hubo menciones honrosas para María José Ferrada y la Editorial Amanuta.





Presione Escape para Salir o haga clic en la X