El domingo recién pasado, el seremi de Salud de Valparaíso, Georg Hübner, confirmó el tercer caso de variante Delta en el país. En ese contexto, el doctor en biología molecular y académico de la Universidad de Chile, Miguel Allende, conversó con el programa Radioanálisis para analizar el caso.
En entrevista con Patricio López, director de Radio Universidad de Chile, el profesional señaló que lo único que el virus está tratando de hacer es “subsistir”. Por ello, afirmó que es relevante monitorear los cambios del virus para “anticiparse” a futuras transmisiones y “controlar” las variantes genéticas.
“Es de mucha preocupación cuando, además de todas esas cosas, vemos que los cambios genéticos en el virus empiezan a burlar o vencer la capacidad que nosotros tenemos naturalmente de resistir estos virus”, dijo el profesional.
“Ahí sí que nos preocupamos, porque si los virus que cambiaron empiezan a burlar la vacuna que estamos usando para tratar de defendernos, entonces, obviamente, tenemos que cambiar las vacunas o mejorar aún más nuestra capacidad de contenerlo para que no se transmita esa variante”, apuntó el especialista.
En esa línea, el académico sostuvo que “la vigilancia genómica es un primer paso” y que no sirve de mucho si en otros países no se toman las mismas medidas de control. “Tampoco sirve tener vacunas en un país o solo en unos pocos países, es decir, esta es una pandemia global y tenemos que enfrentarla desde el punto de vista planetario”.
“No tiene mucho sentido que cerremos las fronteras a menos que las cerremos para siempre, porque si en otros países no están conteniendo la aparición de nuevas variantes, eventualmente, va a terminar llegando de nuevo. Entonces, es muy importante que si cerramos las fronteras, esto sea en coordinación con los países vecinos y con quienes tenemos el mayor intercambio. De manera que allá también haya preocupación por la vigilancia y vacunación”, agregó.
El profesional también indicó que es importante tener una buena comunicación de riesgo y que es fundamental mantener a la población en alerta “para poder convencer a todos de que en realidad tenemos que usar todo lo que tenemos a nuestro alcance para impedir que siga propagándose el virus”.
Para Allende la diplomacia y las relaciones internacionales son claves en esa estrategia. “No sacamos nada con hacer un magnífico trabajo en un lugar, si en el resto del mundo la infección está corriendo”, expresó.
Finalmente, el académico llamó a la población a vacunarse y manifestó: “Hay que tomar la que uno tiene a mano. Aunque tenga un efecto parcial, siempre es beneficioso”.
“No me cabe duda que la vacuna Coronavac ha salvado muchas vidas”
La aparición de nuevas variantes del Sars Cov-2 ha obligado a los países a extremar, no solo las medidas de seguridad, sino que también el trabajo a nivel científico para determinar y conocer de mejor manera el comportamiento de este virus.
Dentro de ese trabajo destaca la labor que se realiza en materia científica en la llamada “vigilancia genómica”, un trabajo considerado como fundamental para determinar el desarrollo de un virus que tiene en su naturaleza la capacidad de adaptarse al entorno.
En esa línea, el académico señaló que “la vigilancia genómica es una estrategia para observar el comportamiento genético de los organismos. Ya sabemos que el Sars Cov-2 muta y eso es natural. El virus lo único que trata de hacer es subsistir, entonces la vigilancia genómica observa esos cambios y se puede adelantar a las ventajas que tiene el virus”.
El doctor Allende recordó que “lo que se ha visto es que donde hay mucha prevalencia del virus eso lleva a más probabilidades que el virus mute (…) Hablamos de una variante de mucha preocupación cuando esas variantes empiezan a superar la inmunidad y ahí sí que nos preocupamos porque si estos virus mutan puede bajar nuestra capacidad de contener la enfermedad”.
Respecto del proceso de vacunación y las dudas en torno a la efectividad de algunas de las fórmulas como la elaborada por el laboratorio Sinovac, el académico sostuvo que “si bien uno puede tener una visión de que las vacunas tienen diferente eficacia, la Coronavac está demostrada que tiene una eficacia que merece la pena su uso. Sobre todo si pensamos que no hay mucha disponibilidad de vacunas. Estoy seguro que sin la vacuna Sinovac hubiésemos tenido mucha más gente muerta de la que tenemos, no me cabe duda que ha salvado muchas vidas”.
Finalmente, el doctor Miguel Allende señaló que “esperamos que esta experiencia haya servido para que la gente se dé cuenta que un país que invierte en ciencia y tecnología, invierte en su seguridad y autonomía” y añadió que “la ciencia cuando tiene un buen apoyo puede enfrentar cualquier desafío de este tipo y necesitamos estar preparados. Si el mundo cae en una nueva pandemia es mucho más eficiente tener las cosas hechas en casa”, recalcó.