Tensa es la discusión en torno al futuro del Congreso Nacional en el seno del órgano redactor. Este jueves en la Comisión de Sistema Político, la propuesta de norma constitucional llamada “Un poder legislativo en Chile de carácter bicameral” que llegó a la instancia desde el proceso de participación ciudadana a partir de la autoría del ingeniero Miguel Lorca, fue desestimada en una estrecha votación de 13 votos en contra y 12 a favor de los 25 constituyentes que integran la comisión coordinada por Rosa Catrileo (Escaño reservado- pueblo Mapuche) y Ricardo Montero (PS).
Pese a que la iniciativa concitó 27.441 firmas de la sociedad civil, la propuesta de mantener ambas Cámaras del parlamento no logró torcer la voluntad expresada por los y las convencionales de Pueblo Constituyente, la Coordinadora Plurinacional, el Frente Amplio, el Partido Comunista, Movimientos Sociales, el convencional Renato Garín (Ind) y Catrileo quien de todas formas ha dicho tener la apertura para considerar alternativas relativas al bicameralismo.
Cabe recordar que los y las convencionales de dichas fuerzas visaron el pasado 27 de enero la propuesta de un Congreso Unicameral y Plurinacional compuesto por un mínimo de 205 parlamentarios. En esa fecha se llegó a una votación similar a la de este jueves pero en el sentido inverso, en cuanto se aunaron las 13 afirmativas de las colectividades que impulsan la existencia de una sola Cámara, versus 10 sufragios en contra y 2 abstenciones.
¿Cuáles son las fuerzas políticas que buscan mantener las dos instancias? Los y las constituyentes de la articulación UDI, RN y Evópoli; los Independientes por una nueva Constitución; el Colectivo del Apruebo y el Colectivo Socialista quienes han adoptado un protagonismo en esta discusión asumiendo iniciativas que reformarían el carácter de lo que sería la próxima “Cámara Alta”. Al respecto, el convencional Pedro Muñoz conversó con Radio y Diario Universidad de Chile respecto a la fórmula que impulsan los socialistas para alcanzar el guarismo de los 2/3 en el pleno de la Convención.
Abordando la perspectiva del PS, el representante del distrito 24 sostuvo que el trabajo de los y las convencionales debe radicar en entregar una propuesta de texto constitucional a la ciudadanía cuyas instituciones aseguren la transformación social pero de forma responsable y asegurando la gobernabilidad. Esto considerando el contexto de crisis social, política, económica y ambiental por la que cruza el país y por cierto, el resto del mundo. En razón de eso aseveró que, de la Convención, deben emanar instancias del Estado sólidas que permitan resistir la agudización de los cismas que están en desarrollo.
En virtud de eso sostuvo que, pese a las legítimas posturas ideológicas que existen en esta materia, se debe desistir respecto a la idea de unicameralismo, primando el conocimiento técnico relativo al perjuicio y al grave retroceso que significaría para las regiones este esquema. Algo que le consta al abogado en cuanto los integrantes de su gabinete, Fabián Muñoz y Matías Cortés, ambos cientistas políticos de la Universidad Católica, realizaron una simulación electoral bajo el escenario de un congreso unicameral que da cuenta sobre las consecuencias en términos de la descentralización del país.
“Quienes venimos de regiones sabemos que las regiones pierden peso, que las regiones ya están en asimetría frente al centro del país por el carácter y la construcción histórica de este Estado súper unitario y centralizado, y las regiones en un unicameralismo quedan con menos poder para poder incidir en las decisiones nacionales y sobre todo para poder incidir en el proceso de descentralización que no se agota solamente en darle poder de autogobierno a las regiones, que es una discusión que también está en curso, sino que lo importante es que para que las regiones puedan continuar con ese proceso de descentralización tienen que tener un espacio de coordinación nacional, pero también de incidencia legislativa y presupuestaria”.
Y es que según el documento elaborado por el equipo de Muñoz, la diferencia en términos de representación que habría en el congreso unicameral respecto a las regiones de extremos en relación a la Metropolitana es abismante. Considerando a los 205 parlamentarios, en la capital se podrían levantar 67 escaños, seguido por Valparaíso con 19 y Biobío con 17, mientras que en Aysén los asientos se reducirían a 4, y en Magallanes, y Arica y Parinacota a 5. Así las cosas, de considerarse en la ecuación a los escaños reservados más paridad, es difícil cuadrar toda la Cámara sin que se provoquen distorsiones, señaló el constituyente.
“Tratando de poner todos los objetivos en una sola Cámara, y me refiero a la representación proporcional, la representación territorial y de las regiones, y los escaños reservados más la paridad hace que matemáticamente sea imposible cumplir todos estos objetivos dentro de una sola Cámara porque se desbalancea internamente. Por una parte Santiago tiene un peso preponderante sobre las regiones pero inferior a lo que le correspondería proporcionalmente de acuerdo a su población y por tanto se da un fenómeno que se llama malapportionment que es el fenómeno de distorsión de una persona un voto. Por otra parte las regiones quedan subrepresentadas”, indicó.
Bajo esa consideración, Muñoz explicó que la fórmula que impulsa el Colectivo Socialista pretende convertir al Senado en una “Cámara territorial” o “de las regiones autónomas” que tendrá atribuciones, un peso y un objetivo a la “Cámara Política” que sería lo equivalente al actual hemiciclo de los y las diputadas. En ese sentido explicó que lo que se busca instalar es un bicameralismo incongruente y asimétrico, al contrario del actual régimen en el que a su juicio “tenemos dos Cámaras espejo que realizan, con algunas variaciones, lo mismo y ahí radica uno de los problemas de la deficiencia o la lentitud del proceso de tramitación de las leyes que es algo que yo creo que la ciudadanía ve y la interesa”.
“Nuestra propuesta es generar una Cámara política, de diputados y diputadas que se elija de forma proporcional a la población para poder respetar el principio fundamental de la democracia de una persona y un voto, y una Cámara territorial que tenga la misma cantidad de representantes por regiones. Estas Cámaras obedecen entonces a principios distintos, son incongruentes, tienen una base de generación distinta”.
“La asimetría, que es la segunda patita de lo que estamos planteando se refiere a las facultades, de las atribuciones y de las materias que cada una de estas Cámaras tendrá a cargo. La Cámara territorial va a tener preponderancia en materias de división político y administrativa, en materias regionales en sentido amplio, en materias presupuestarias por supuesto. Ahí es fundamental que haya un espacio nacional donde las regiones puedan poner su voz y tener una capacidad de negociación no sólo frente a la Cámara política, donde sabemos que Santiago, Valparaíso y Concepción van a tener un peso mayor sino también para generar un poder de negociación frente al Ejecutivo”, agregó.
Pero una de las problemáticas que arguyen los constituyentes promotores del unicameralismo respecto a la existencia de las dos Cámaras es la dilación que existe en el proceso legislativo para promulgar una ley. Al respecto, Muñoz dijo ver más de una solución para dinamizar ese trámite entre lo que mencionó el fin de los quórum supra mayoritarios, del control preventivo del Tribunal Constitucional y de las potestades del Presidente de la República para ingresar urgencias o vetar un proyecto de ley.
“Había muchas leyes que, o no veían la luz o se quedaban por años durmiendo en el Congreso porque su quórum de aprobación eran supra mayoritarios, antidemocráticos y no van a existir ley orgánicas constitucionales por ejemplo, existe acuerdo para eso. Eso permitirá que el flujo de la tramitación legislativa vaya mucho más rápido porque las mayorías son más bajas, son más democráticas, 50 por ciento más uno que es lo que corresponde en el principio básico de la democracia”.
Con esta fórmula insistirá el Colectivo Socialista en formato de indicaciones que presentarán una vez que la Comisión emane hoy el informe sistematizado hacia el pleno, tarea para lo cual tienen un plazo hasta el próximo miércoles 15 de febrero. Sin embargo el trabajo más arduo está en la búsqueda de acuerdos y es que hasta el momento, asegura, “no hay una mayoría que se aproxime a los dos tercios dentro de la Comisión y eso hace presagiar que tampoco hay una mayoría dentro del pleno en favor de bicameralismo o unicameralismo“. En razón de eso apuntarán a concitar los respaldos mediante el diálogo basado en fundamentos y no preconcepciones.
“Nosotros creemos que la Convención está en un momento donde es urgente y necesario, no se va a poder lograr de otra manera, si no es conversando con todas las personas en base a argumentos. Nosotros tenemos la intención y la disposición para poder explicar nuestra propuesta a todos los y las constituyentes que quieran construir una institucionalidad que apunte a la equidad territorial y a generar equilibrio democrático a través de la institucionalidad central, por lo tanto no sólo estamos abiertos a dialogar con las fuerzas de la centro izquierda sino también con aquel sector de la derecha democrática que se quiera sumar en base a buenos argumentos a la propuesta de bicameralismo y también más allá, estamos dispuestos a hablar con Pueblo Constituyente, con la Coordinadora Plurinacional, con Movimientos Sociales para dialogar políticamente de forma amplia en base a razones”, sostuvo.
La apuesta de Muñoz es dirigir esas conversaciones hacia el insumo que levantaron los integrantes de su gabinete, en la medida que “nadie que defienda el unicameralismo ha presentado un modelamiento electoral que desmienta lo que nosotros hemos estado planteando”, afirmó. De tal forma, espera que sus pares sean capaces de moverse de sus posiciones ideológicas -legítimas, reparó- priorizando las aristas técnicas que “tienen que ver con la pura democracia”.