En entrevista con la primera edición de Radioanálisis, el presidente del Colegio de Periodistas de Chile, Danilo Ahumada, abordó la muerte de la reportera del Canal 3 de la Victoria, Francisca Sandoval, quien fue baleada mientras cubría una manifestación en el Barrio Meiggs durante el día del Trabajador.
Tras estar 11 días internada en la ex Posta Central, la joven de 29 años falleció producto de la gravedad de sus heridas, lo que generó conmoción en el país, al convertirse en la primera periodista asesinada en democracia.
Sobre este hecho, el dirigente del gremio afirmó que “hay una sensación de impunidad. Desde el 18 de octubre que la prensa, sobre todo independiente, fue víctima de una serie de vulneraciones, desde agresiones sexuales, detenciones ilegales, daños oculares. El Observatorio del Derecho a la Comunicación tienen en sus registros a más de 300 casos de periodistas y comunicadores (afectados). Entonces, creo que nos costó visibilizar lo que estaba sucediendo en el tema de la pandemia y no le pusimos acento ahí”.
Incluso, puntualizó que de todos estos hechos “muy pocos se judicializaron y solo dos de ellos llegaron a formalizaciones ¿Qué debería ser lo óptimo en una democracia, además donde hay estabilidad social? Debería haber garantías absolutas para el trabajo de la prensa y eso no lo hemos visto desde el 18 de octubre”.
“Ya no son agentes del Estado los que generan esta vulneración a la libertad de expresión, al ejercicio de la prensa libre y al derecho de la información. Cada vez que detienen, matan o vulneran a un trabajador de las comunicaciones contra ese derecho que tiene la ciudadanía. Hoy día se generaron esas condiciones lamentablemente por delincuentes y se incorporan otros elementos que no los teníamos en Chile, por ejemplo, el tema del uso de armas, el narcotráfico, bandas que dominan el territorio”, detalló.
Para Ahumada “aquí hay una responsabilidad de este Estado, que generó este clima de impunidad frente a las violaciones de los derechos humanos a periodistas y comunicadores durante el estallido social y eso es muy importante, porque hoy día se trata de un civil, pero de uno que actuó bajo la mirada e inacción Carabineros, por eso nuestra querella criminal no solamente va contra quienes resulten responsables por la muerte de Francisca, sino que también por la responsabilidad del alto mando de Carabineros que permitió que dispararan contra manifestantes y la prensa”.
En ese sentido, recordó que “aquí hubo cuatro víctimas el 1 de mayo, de las cuales tres son corresponsales, que trabajan en medios de comunicación alternativos. Por lo tanto, nos llama mucho la atención que la mayoría de las víctimas hayan sido comunicadores”, razón por la que a juicio del gremio existió indiferencia por parte de las policías “de evitar estar tragedia que nos tiene absolutamente conmovidos y que no habíamos vivido desde la dictadura con la muerte de Pepe Carrasco”.
Por lo mismo, planteó que este caso “tiene que ser tomado con la mayor seriedad del mundo, porque hoy día estamos con la pena, estuvimos en contacto con la familia, pero aquí hay muchas aristas. Los grandes medios de comunicación tuvieron un tratamiento horrible, antiético con la difusión de imágenes de Francisca”.
Junto con exigir a la justicia “condenas ejemplares”, Ahumada apuntó como necesaria la renuncia del general director de Carabineros, Ricardo Yáñez. “Le hemos señalado en numerosas veces tanto al gobierno anterior como a este que Carabineros es responsable de esas 300 lesiones a la prensa. Por lo tanto, tiene que haber un cambio de mirada, de protocolo. Creo que ese es un lugar donde el Ministerio del Interior tiene que actuar y lo otro que tiene que hacer es generar las condiciones no solo para que los periodistas y comunicadores hagan su pega, sino que para las personas puedan manifestarse tranquilamente y no se encuentre en riesgo su vida”.
De hecho, el periodista reconoció que tener este tipo de escenario “es tremendamente complejo porque genera, por ejemplo, un clima de autocensura. Tenemos uno de los otros dos colegas que está absolutamente dañada psicológicamente, porque cómo va a volver a cubrir una noticia sin que en algún minuto reciba un balazo. Tenemos que recuperar la confianza y eso le corresponde al gobierno”.