Sin cambios en el gabinete presidencial, el proceso constituyente en su etapa final y una agenda pública marcada principalmente por problemas en materia económica y de seguridad, este miércoles, el presidente Gabriel Boric realizará su primera rendición de cuentas en el pleno del Congreso.
A casi tres meses desde su llegada a La Moneda, este evento resulta de suma importancia para analizar los aciertos y desaciertos del Ejecutivo, en donde, para la magíster en Ciencias Política e integrante de la Red de Politólogas, Javiera Arce, no se puede obviar un importante déficit no solo a nivel político sino también a nivel técnico profesional.
En tal sentido, en conversación con nuestro medio, una correcta lectura de los problemas de la ciudadanía, así como la capacidad para ingresar proyectos al Congreso y alinear a la bancada oficialista en temáticas claves, han sido las principales falencias de la administración de Gabriel Boric.
“Creo que si no se toman en cuenta cuestiones más fuerte en términos de disciplina dentro del Congreso, la situación se va a volver un poco caótica en el futuro, porque significaría que la alianza, la coalición de Apruebo Dignidad, no apoya a su Presidente, y eso no se ve muy bien. Además, dentro del peso correlativo se nota mucho la debilidad política de Siches y de Jackson también por la ausencia de proyectos sectoriales”, detalló.
En un contexto inflacionario a nivel económico, si bien el Ejecutivo logró en las últimas semanas promulgar un aumento del salario mínimo, tras un acuerdo histórico con la Central Unitaria de Trabajadores, quedan pendientes otros puntos comprometidos de su agenda, como la Reforma Tributaria, además del enfrentamiento de la reciente crisis de seguridad pública y en la Macrozona Sur.
Al respecto, para Arce, la comparativa que debería hacerse de este Gobierno en cuanto a agenda de proyectos no es con la administración de Sebastián Piñera sino con gobiernos con “mayor musculatura política” como el de Michelle Bachelet, y allí, según dijo, Apruebo Dignidad va quedado al debe.
“Siempre hay períodos de luna de miel, pero acá no lo vi. Siempre hay períodos donde los presidentes meten proyectos de ley del Ejecutivo y hacen trabajar un montón al Congreso porque es como tu luna de miel, tus cien días. Después obviamente todos terminan odiándote, pero ahí creo que ha faltado decisión o en términos programáticos, un programa profundo de transformaciones o no, porque no veo posibilidades de que estén pensando reformas independiente de los temas de la Convención, que ese es otro carril”, explicó.
Y justamente sobre cómo se cruzará el final del proceso constituyente con la administración Boric, Arce llamó a tener “pertinencia y perspicacia política”, que no ha quedado de manifiesto, según dijo, en los pronunciamientos reiterados del Presidente sobre el plebiscito de salida o la aparición del ministro Jackson en la comisión de Normas Transitorias del órgano redactor.
“En caso de que el Gobierno siga con esta estrategia de sequía legislativa, esperando el plebiscito de septiembre y detenidos los proyectos sectoriales, van a llegar muy desgastados; y si tienen la tendencia a mezclarse con el apruebo propiamente tal, no sé como va ser el resultado. Hay que terminarlo ya porque todo lo malo que resulte del Gobierno de Boric podría impactar absolutamente de manera directa a la opción del apruebo o el rechazo”, señaló Arce.
“Va a marcar el rumbo hacia donde estamos yendo como Gobierno”, ha señalado Gabriel Boric en la antesala de su primera cuenta pública. La cita será a las 11 de la mañana de este miércoles en el Salón de Honor del Congreso Nacional y, según se sabe, el énfasis del discurso estará centrado en áreas claves como la reactivación económica y la seguridad.