Tras 10 años de una compleja tramitación, se espera que el próximo miércoles 18 de enero el Comité de Ministros defina el futuro del polémico proyecto minero-portuario Dominga, avaluado en 2 mil 500 millones de dólares y ubicado en la comuna de La Higuera, en la Región de Coquimbo.

Recordemos que la iniciativa, vinculada al empresario Carlos Alberto Délano, ya fue rechazada en una primera oportunidad en 2017 durante el segundo gobierno de la ex presidenta Michelle Bachelet, cuyo efecto provocó la salida de los entonces ministros de Economía, Luis Felipe Céspedes, y de Hacienda, Rodrigo Valdés.

Sin embargo, poco tiempo pasó para que esta decisión fuera revertida por el Tribunal Ambiental de Antofagasta y ratificada por la Corte Suprema en mayo de 2022, que rechazó una serie de recursos de casación interpuestos en contra del proyecto.

Sobre esta situación, la vocera del Movimiento de Defensa del Medio Ambiente (MODEMA), Carolina Bahamondes, expresó que “nosotros esperamos el rechazo definitivo de este proyecto, esperamos que el Gobierno cumpla con su campaña, que refleje que efectivamente es un gobierno ambientalista”.

“En caso contrario, nosotros estamos firmes en esta lucha, llevamos más de 10 años, así que vamos a seguir tanto en el ámbito jurídico como en el administrativo y también dentro de la ciudadanía, realizando acciones activas en contra de este proyecto. No vamos a descansar hasta que definitivamente termine este capítulo que ya lleva demasiados episodios”, agregó.

En ese sentido, Bahamondes destacó la importancia de proteger la rica biodiversidad que existe en la zona. Una solicitud que también han hecho llegar a través de una carta al Presidente Gabriel Boric comunidades del Archipiélago de Humboldt.

En la misiva, advirtieron que, de aprobarse el proyecto, “terminaría para siempre con las actividades sustentables como son: la pesca artesanal desde áreas de manejo, el turismo que se ha desarrollado durante décadas, la cosecha de aceitunas y producción de aceite de oliva, convirtiendo a nuestra comuna en una nueva zona de sacrificio”.

Por lo mismo, instaron al mandatario a que sea él el que “logre definir lo que ningún gobierno ha logrado: cerrar definitivamente las puertas a megaproyectos y salvaguardar una de las zonas más productivas y biodiversas de nuestro país”.

Mientras desde el Congreso, los diputados socialistas Daniel Manouchehri, Daniella Cicardini y Daniel Melo entregaron un documento firmado por más de 50 legisladores de distintas bancadas para solicitar el rechazo al proyecto Dominga.

El diputado Melo –quien también preside la comisión de Medio Ambiente- dijo que “existen antecedentes técnicos y ambientales suficientes para tomar esta determinación. El Estado de Chile debe tener un compromiso en la protección de este ecosistema único en el mundo, sobre todo pensando en las futuras generaciones en el contexto que estamos de crisis climática, de emergencia climática en nuestro país”.

Sin embargo, no todos los actores del sector están de acuerdo con rechazar la minera Dominga como, por ejemplo, el propio alcalde de La Higuera, Yerko Galleguillos, quien la semana pasada fue hasta dependencias del Ministerio de Hacienda a entregar una carta al titular de la cartera, Mario Marcel, para pedir que se avance en la iniciativa, puesto que a su juicio las críticas que levanta el proyecto obedecen más bien a conflictos políticos que medioambientales.

A esto se suma la presentación que realizaron esta jornada sindicatos de pescadores y asociaciones de pescadores artesanales de La Higuera, acompañados del abogado Marcelo Castillo, para solicitar la inhabilitación de la ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, del Comité de Ministros, debido a una supuesta falta de imparcialidad por sus declaraciones contra el proyecto y sus vínculos con el abogado que representa a la Fundación Oceana en el caso Dominga, Ezio Costa.

Según expresó Castillo “dadas sus declaraciones previas y su relación de amistad con el abogado de la ONG Oceana, sería inmoral y legalmente reprochable que la ministra Rojas participe en el Comité de Ministros respecto del proyecto Dominga”, y añadió que “este gobierno está aniquilando el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, actuando con frivolidad, con criterios meramente políticos y contra los intereses de los más pobres”.

Por su parte, el vocero de los pescadores de Totoralillo Norte, Jorge Cabrera, manifestó que “las cámaras de televisión siempre se van a grabar a Punta de Choros, donde hay un grupo minoritario de colegas que se oponen al proyecto. Ahí, sin embargo, no está el ni el puerto ni la mina, por lo que invito a las autoridades que vayan a conocer la zona y su gente antes de pronunciarse. La Higuera quiere Dominga y quienes hemos trabajados toda una vida en el mar sabemos que un barco a la semana que llegará a ese puerto no va a afectar en nada el medio ambiente, el cual nosotros también queremos proteger, porque vivimos del mar”.