Juan Carlos Said y debate sobre ISAPRES: "El sistema es estructuralmente inviable y está destinado a quebrar"

Más allá del fallo de la Suprema, el médico internista destacó los problemas estructurales que hacen inviable el sistema de salud privado actual y exhortó a hacer una reforma estructural que mancomune las cotizaciones hacia una red público-privada.

Más allá del fallo de la Suprema, el médico internista destacó los problemas estructurales que hacen inviable el sistema de salud privado actual y exhortó a hacer una reforma estructural que mancomune las cotizaciones hacia una red público-privada.

En conversación con Radioanálisis, el médico internista de la Universidad de Chile y magíster en Salud Pública, Juan Carlos Said, afirmó que más allá del debate político sobre un posible salvataje a las ISAPRES, el quiebre de las administradoras privadas es inminente. 

Ello porque el especialista aseguró que el sistema presenta mecanismos internos que lo hacen estéril. “Aunque a las ISAPRES  no les hicieran estos ajustes de los planes a la baja, se les diera todo el dinero necesario para superar esta crisis, el sistema es estructuralmente inviable y está destinado a quebrar“, afirmó.

“Entre ellos, es un sistema que no tiene ningún mecanismo de control de costos. Por ejemplo las Isapres carecen de un sistema de atención primaria, un sistema que por ejemplo permita hacer un uso racional de las consultas por sus subespecialistas. En el sistema de Isapre una persona puede ir 5 a 6 veces a un gastroenterólogo, 6 veces a un neurólogo aunque no haya ninguna indicación de eso, tampoco tienen mecanismos de pago que paguen por solución de problemas y no solo por las prestaciones, por ejemplo, una persona se puede hacer 5 escáner y todos se pagan, independientemente de que no necesariamente sea lo que esté indicado”, detalló.

En esa línea, apuntó que los mecanismos de las ISAPRES son aquellos que “en salud pública se llaman inflacionarios. Es decir que incentivan las prestaciones y no necesariamente mejoran la calidad de la atención”.

Por lo demás, Said indicó que las ISAPRES tienen mecanismos internos de pago que las hacen ineficientes. “Tienen un tema estructural con el tema de licencias, que es el otro tema, que producto de la crisis de salud mental, de la pandemia, las licencias aumentaron especialmente las de salud mental. Entonces, esos dos problemas son bastante estructurales de las Isapres y no se resuelven simplemente solucionando un tema del fallo”. 

En ese sentido, el médico consideró que el problema del debate público es que “todo el foco ha estado en ver cómo salimos de la coyuntura del fallo en vez de decir cómo hacemos para tener un sistema de salud que le sirva a todos los chilenos”.

Por lo demás, aseveró que la crisis actual es también una evidencia de los defectos del sistema político. “Propuestas para reformar el sistema hay varias, que vienen al menos desde el año 2010; han habido tres comisiones de reforma al sistema de salud. Este es un problema que desde el punto de vista de los especialistas en salud está diagnosticado hace rato y también tiene formas de ser tratado”.

“El tema es que ha habido una crisis del sistema político, Congreso, partidos de derecha e izquierda que no se han podido poner de acuerdo en hacer las reformas de fondo necesarias que son avanzar hacia un tipo de mancomunación de cotizaciones”, afirmó.

Y agregó que “cualquier solución de fondo del problema, ya sea transitar hacia un tipo de sistema de seguros sociales alemán o hacia un sistema tipo seguro único como el que se usa por ejemplo en Australia o en Corea del Sur, en ambos casos, lo que implica es juntar todas las cotizaciones, todos los 7% en un solo fondo común y que eso permita atención en una red integrada público privada”.

Por el contrario, Said reconoció que las propuestas relativas al cumplimiento del fallo son medidas parche. “Perdemos la perspectiva más grande que es cómo resolvemos el problema de nuestro sistema de salud”.

“Yo creo que efectivamente el Gobierno está atrapado en esto”, agregó, aduciendo que el Ejecutivo “está en una coyuntura en que por un lado no quiere salvar a las Isapres, pasarles dinero para que sobrevivan, pero por otro lado entiende que tampoco las puede dejar caer”.

En esa línea, aseguró que el colapso súbito del sistema de Isapres “no es algo que sea bueno para la salud de los chilenos en el sentido de que efectivamente se pueden producir quiebres en la continuidad del tratamiento, puede haber una quiebra de prestadores privados que hoy en día son prestadores que también le prestan servicios a Fonasa”. 

“Recordemos que 50% de las consultas de centros privados de salud son pacientes FONASA; 30% de los días cama de los pacientes hospitalizados en las clínicas son pacientes Fonasa, entonces efectivamente la solución hoy día es dificil”, señaló.

Y exhortó a que “tiene que hacerse todo lo posible por cumplir el fallo, evitar no hacer un rescate financiero a las Isapres pero también hay que entender que no es realista pensar que una quiebra súbita de varias aseguradoras privadas no va a tener ningún efecto en el sistema de salud”.

Asimismo, relevó que “en la medida que esta crisis no tenga un desenlace súbito, es decir, todo lo que sea hacer que la transición sea más lenta, va a permitir que los prestadores se adapten a esta nueva situación y se adapten a que Fonasa va a tener un rol más preponderante, que va a haber que trabajar con otras estructuras de costos y creo que en esa línea, lo que rescato del proyecto del Gobierno es la propuesta de crear seguros complementarios que funcionen con Fonasa”.

Revisa la entrevista completa aquí.





Presione Escape para Salir o haga clic en la X