En conversación con nuestro medio, el académico del Departamento de Ingeniería de Minas de la Universidad de Chile, Emilio Castillo, se refirió a los resultados del estudio “El mercado del litio: Desarrollo reciente y proyecciones al 2035”, presentado recientemente por la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco).
De acuerdo a Castillo, el objetivo del documento es “proveer de cierta información en una industria, que es bastante opaca, poco transparente. Es un mineral que a diferencia de otros no se tranza tan abiertamente, por lo tanto tenemos poca información para la gente que toma decisiones y hace análisis”, señaló.
Castillo además abordó el hecho de que, según las proyecciones de los expertos, para 2035, Australia y Argentina superarán a Chile como productores.
“Lo que ha ocurrido en torno al litio en los últimos 15, 20 años, es que Chile a pesar de tener esa posición muy grande y significativa, tiene unas características especiales, en términos jurídicos y políticos, que no las tienen los otros países”.
“Por ejemplo, Australia, que ha sido el primer productor, ha desarrollado los depósitos que tiene, que si bien no son de la misma calidad como los que tenemos en Chile, ellos los han aprovechado porque han tenido una estrategia que no ha limitado el desarrollo del litio”, afirmó.
En ese escenario, el académico propuso cambiar la manera en que nuestro país administra el mineral: “Si nosotros mantenemos las cosas, el status quo tal cómo está o como ha sido durante los últimos años, nosotros llegaríamos a aumentar un poco la producción. No estaríamos disminuyendo, pero el resto está aumentando mucho más”.
En esa misma línea, hizo un llamado a aprovechar el cambio tecnológico que se está dando en el mundo y que implica el tránsito desde sociedades que funcionan en base a carbón, a otras en base a energías renovables.
“Nosotros somos un país pequeño, pero en estas cosas podemos ser bien grandes. Esto no solo pasa por proveer el mineral, sino que también podemos transformarnos en un polo de desarrollo, de hacer minería de una manera distinta, de que sea un entorno más sostenible, de que sea un mineral que se produzca bajo estándares, que podemos proveer y que el resto del mundo diga ‘estamos comprando este mineral y estamos conscientes de que Chile está haciendo las cosas cómo corresponde’”, aseguró.
Asimismo, Castillo sugirió desarrollar valor agregado “hacia atrás”, más allá de productos como baterías.
“Toda la discusión en torno al aprovechamiento del uso de recursos minerales tiene esta figura dando vueltas que es el tema del valor agregado. Tendemos a pensar que el valor agregado está aguas abajo, es decir, producir la batería, producir el alambre, producir el componente, porque uno tiene esa mirada, porque somos usuarios, pero también hay valor agregado hacia atrás”.
“Hay valor agregado en que hay que hacer desarrollos tecnológicos, hay que hacer ingeniería, hay que hacer investigación, hay que generar proveedores de distintas tecnologías que resuelvan los distintos problemas que puede tener la minería”, planteó.