Con la participación de las principales autoridades y ejecutivos de las AFP, la tarde de este martes la comisión de Trabajo de la Cámara de Diputadas y Diputados continuó con la discusión de la reforma previsional que impulsa el Gobierno.
A la instancia concurrió en representación del Ejecutivo el subsecretario de Previsión Social, Claudio Reyes, además de los representantes de la industria, Alejandro Bezanilla, gerente general de AFP Habitat; Pedro Atria, presidente de AFP Cuprum; Martín Mujica, gerente general de AFP Cuprum; Juan Carlos Chomalí; pesidente de AFP Capital, y Paulina Yazigi, presidenta de la Asociación de AFP.
Todo esto, en una sesión marcada por el retiro de la urgencia al proyecto por parte de La Moneda, tras presiones de la oposición.
En su presentación, Yazigi manifestó el compromiso por mejorar el sistema de una manera “sostenible” y a través del fortalecimiento “de aspectos claves del mercado laboral y respetando los derechos que las y los trabajadores valoran, que son la propiedad sobre sus ahorros, la libertad de elección y la heredabilidad”, añadiendo que “la PGU es una buena demostración de que podemos mejorar significativamente las pensiones, mediante un componente solidario muy potente y que se integre con el Pilar Contributivo de manera virtuosa”.
Además, apuntó que la informalidad laboral y lagunas previsionales son unos de los principales factores que han incidido en las bajas pensiones, destacando que, si se eliminaran la mitad de los períodos no cotizados por los trabajadores, las pensiones aumentarían en 40%; mientras que si “se elevara la tasa de cotización en 6% a cuentas individuales, esto implicaría en el largo plazo un aumento de la pensión de 60%”.
En cuanto al análisis del proyecto del Ejecutivo, Alejandro Benzanilla, dio cuenta sobre “tres alertas” con los reparos de la industria sobre la iniciativa, los cuales dicen relación con un rechazo a la instalación de un sistema de reparto intergeneracional y a la reorganización de las funciones de las AFP. Esto, junto con advertir que la reforma podría implicar un eventual perjuicio al mercado de capitales, debido al rol que podría desempeñar el Estado en las inversiones.
Por su parte, Pedro Atria entregó los alcances de la propuesta del sector, denominada “Hoja de Ruta 555”, que recoge “cinco recomendaciones de la experiencia internacional y cinco mejoras concretas que proponemos al sistema actual”.
Así, sobre lo primero se planteó la necesidad de asegurar la sustentabilidad del sistema; que el sistema de pensiones debe estar aislado de los ciclos políticos, que las reformas, actualizaciones y mejoras deben ser graduales y continuas; que no respondan a problemas o crisis puntuales; y que el foco de una reforma debe estar puesto en mejorar las pensiones.
Mientras que sobre lo segundo se propuso como espacios de mejora: Resolver la falta de cotización y las lagunas previsionales; elevar la tasa de cotización y generar los medios para incentivar la postergación de la edad de jubilación; perfeccionar la regulación existente del régimen de inversiones; seguir fortaleciendo y adaptando el Pilar Solidario; y generar mayor conocimiento y cercanía con el sistema.
Una vez finalizada las exposiciones, diputados procedieron a tomar la palabra, quienes desde distintos sectores acusaron una falta de autocrítica por parte de la industria de las AFP.
El diputado Luis Cuello (PC) sostuvo que “cuando uno ve la realidad de las personas en los territorios, los jubilados, las jubiladas, yo realmente discrepo con la opinión de los invitados en el sentido de que la gente no quiere propiedad y libertad, más bien la gente quiere alimento y medicinas (…) Me sorprende un poco que de lo que se desprende es que todo funciona bastante bien, o sea, estamos frente a un sistema perfecto que no requiere de mucha reforma, salvo aumentar la PGU”.
El diputado Alberto Undurraga (DC) expresó que “hay varias críticas que se plantean en la exposición, que tienen que ver con el proyecto original no con el que se ha avanzado en la mesa técnica. Entonces, hay cosas que se han ido resolviendo. El desafío que tenemos es cómo mejorar no sólo las pensiones del futuro, también las pensiones del presente, por eso algunos creemos que la solidaridad para todos es con cargo a fondos generales; sin embargo, la solidaridad del sistema es sólo para quienes cotizan”.
Mientras el diputado Eduardo Durán (RN) manifestó “¿Cómo se justifica la gran oscilación de las comisiones entre AFPs? La más barata cobra el 0,49%, la más cara el 1,45% a tres veces más. Este es un tema de la sociedad en su conjunto, el Estado, los afiliados, los empleadores, los trabajadores, todos tienen que poner de su parte, pero las AFPs, la industria ¿Qué cosas tienen que mejorar? Porque no hay una buena percepción de la ciudadanía”.