Jorge Burgos y gestión de Tohá en Interior: "Tengo una buena opinión del cómo lo ha hecho particularmente si uno lo compara con el desastroso inicio"

El exministro del Interior aseguró que ve a una secretaria de Estado "empoderada" que cuenta con el aval del Presidente de la República aún luego de una compleja semana por el veto a la Ley de Usurpaciones y cuestionamientos a la agenda de seguridad.

El exministro del Interior aseguró que ve a una secretaria de Estado "empoderada" que cuenta con el aval del Presidente de la República aún luego de una compleja semana por el veto a la Ley de Usurpaciones y cuestionamientos a la agenda de seguridad.

Como el rostro visible del veto a la Ley de Usurpaciones, la cartera de Interior y, en particular, la ministra Carolina Tohá, han enfrentado duros cuestionamientos a su gestión, con objeciones que se han sumado a la reiterativa demanda de la oposición por ejercer con mayor celeridad la agenda de seguridad. De ahí que esta semana, representantes de la Alianza de Gobierno llegaran hasta La Moneda para brindarle un “espaldarazo político” a la secretaria de Estado, que -por lo demás- es levantada como una potencial candidata presidencial.

A partir de ello y en conversación con Radio Universidad de Chile, el exministro del Interior y Defensa en el segundo gobierno de Michelle Bachelet, Jorge Burgos, realizó un análisis de lo que ha sido la gestión de Interior tras la administración Siches y luego de la compleja semana por el debate de Usurpaciones.

En ese sentido, el exsecretario de Estado sostuvo que la llegada de Tohá al Gobierno “le dio un peso específico bien importante, hay a mi juicio una ministra -más allá de los problemas que ha tenido su gestión- empoderada, que tiene el aval del Presidente de la República, que de alguna manera es jefe política del gabinete, no obstante que buena parte de su tiempo tiene que entregárselo al tema de la seguridad pública”.

En tanto, por materia de Usurpaciones, Burgos declaró valorar la propuesta del Congreso Nacional dado que “responde a una situación compleja en el país en que habían aumentado los intentos de tomar justicia por propia mano y tomar predios ajenos sin tener ningún fundamento para ello, eso se ha instalado en la Macrozona Sur mayormente, pero también en otras regiones del país”.

Pero, en relación al contenido del veto presidencial, el exministro abogó porque se apruebe la propuesta que elimina la legítima defensa privilegiada, ya que “no puede establecerse por ley que siempre concurrirá porque eso es un incentivo a la autotutela o a la justicia por mano propia que es una cosa que tenemos que atacar, no beneficiar”.

En cuánto a las sanciones de la usurpación “no violenta” que propone el Gobierno (presidio menor y multa), señaló que “suele ser bueno teóricamente que en delitos de baja intensidad pueda existir la posibilidad que el juez que lleva la causa en su sentencia definitiva distinga respecto a las circunstancias del delito y, si es primeriza una persona, pueda eventualmente existir una pena alternativa a la corporal. Es una cosa que yo reconozco que es más discutible porque también puede ser considerada como una señal de debilidad”.

Frente a ello y en relación a la decisión del Gobierno, Burgos declaró que “hay que tomar a veces decisiones que no son completas ni absolutas, pero hay que tomarlas”.

No obstante, la oposición no es la única con cuestionamientos al veto presidencial. Esta semana también el Partido Comunista hizo llegar sus observaciones cuestionando la mantención de penas de presidio en las observaciones del Ejecutivo y anunciando que votarán “diferente” en dichas propuestas.

Sobre esto último, Burgos declaró que “al Partido Comunista no le gusta el veto en general. No le gusta el proyecto y ha anunciado su voto en contra, no me llama mucho la atención, el Partido Comunista en materia de seguridad siempre ha tenido una posición bastante opinable, bastante discutible. Creo que no ayuda mucho a la ministra del Interior”.

Para el exjefe de la cartera de Interior, el PC se sentía más cómodo con la política pública en seguridad que lideraba este Gobierno al comienzo de su mandato, con la dirección de Izkia Siches, donde la agenda “era un problema político, no delictual, no jurídico. Se acuñó el término de Wallmapu y, paralelamente, se hablaba de la refundación de Carabineros. Eso es un pésimo comienzo del Gobierno a mi juicio que le quitó piso a Carabineros, se pagó caro eso”.

En ese sentido, el exministro valoró el cambio de énfasis que le otorgó Tohá a seguridad, considerando además el fast track legislativo: “Me parece que es bien importante el cambio estructural y copernicano que ha tenido el Gobierno en esas materias (…). Yo creo que ha mejorado el Gobierno, faltan cosas, la llegada de la Ministra del Interior fue una buena noticia. En general, yo tengo una buena opinión del cómo lo ha hecho particularmente si uno lo compara con el desastroso inicio”.

Respecto a la actual relación Alianza de Gobierno-Tohá, el exministro señaló que “las bancadas oficialistas lo que tienen que hacer es ayudar a la ministra en las votaciones, en los proyectos de ley, y eso a veces no lo hacen. El otro día se aprobó un proyecto que tipificaba el delito de portar combustible sin justificación y hubo muchos votos de las bancadas oficialistas en contra, eso no es ayudarla. Vale mucho más ayudarla en lo concreto que haciendo visitas a La Moneda para serle franco”.

A modo de análisis general, sobre la lectura de las críticas al rol del oficialismo en seguridad, el actual militante de Amarillos por Chile señaló que “las bancadas oficialistas y la coalición de gobierno está pagando lo mal que lo hizo cuando fue oposición en materia de seguridad, oponiéndose a todo tipo de proyectos de ley, estableciendo que todos los proyectos eran violaciones de derechos humanos, en fin, para darle algunos ejemplos, diciendo que a Carabineros había que terminarlo y refundarlo”.

Por otro lado y frente a comentarios en la interna del Socialismo Democrático, donde algunos parlamentarios tienen una mirada crítica sobre los riesgos que asume Tohá liderando la agenda de seguridad, en comparación a la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, a quién se le critica estar protegiendo su capital político de cara a una futura carrera presidencial, Burgos apuntó a que “las personas que tienen aspiraciones presidenciales lo que tienen que hacer es arriesgar los capitales políticos“.

“No sé si al interior del Gobierno ya están lanzadas las precandidaturas entre dos ministras. Bueno, eso suele ocurrir con los gobiernos que tienen dificultades en su gestión como es este y que empiezan a adelantarse los plazos destinados a buscar alternativas, pero vamos a ver”, aseguró el exministro.

Pese a que admitió que no tiene diálogo actual con la ministra Tohá, Burgos aprovechó para enviarle un mensaje: “Si quiere ser una alternativa en el futuro, más allá de que el cargo en que está es un cargo dificultoso, lo que tiene que hacer es más bien representar al mundo de la centroizquierda, no al mundo de la extrema izquierda. Para eso, para la extrema izquierda es mucho mejor candidata la ministra Vallejo”.

Imagen de Portada: Agencia ATON




Presione Escape para Salir o haga clic en la X