El Gobierno concretó la firma del proyecto de ley que crea un nuevo Sistema de Educación Pública, la ansiada Desmunicipalización, que establece proyectos socioeducativos integrales, colaborativos, participativos, inclusivos, diversos, laicos y gratuitos. Apenas la Presidenta Michelle Bachelet puso su rúbrica sobre el documento surgió la primera duda: ¿cómo se establecerá el financiamiento?

El Gobierno destacó del proyecto que se genera una estructura colaborativa entre escuelas, liceos y jardines. Una red de 67 servicios locales distribuidos a lo largo del país que responden a una Dirección de Educación Pública dependiente del Ministerio de Educación (Mineduc).

Además refuerza el liderazgo de los equipos directivos de los establecimientos al mismo tiempo que integra a las familias y comunidades y autoridades locales a las decisiones estratégicas de las instituciones y los territorios.

Por otra parte, aumenta los recursos basales, inyectando nuevos y reorientando otros y se implementará de manera gradual, al igual que otros pasos de la Reforma Educacional.

Junto con celebrar el impulso que esto significa, para recuperar la baja matrícula pública en el sistema escolar, la ministra Adriana Delpiano dijo que esto apuntará a sanear los actuales problemas de estructura y financiamiento.

“Hoy día tenemos 36 por ciento de la matrícula en el sector público y para que realmente sea un sistema mixto tenemos que lograr no sólo retener esa matrícula, sino ampliarla y eso será parte del trabajo y el esfuerzo que va por el lado de la calidad. Y para la calidad estamos trabajando ya con los distintos municipios para que cuando vayan pasando los establecimientos, las escuelas, efectivamente se haga en condiciones saneadas del punto de vista financiero y académico”.

El presidente de la comisión de Educación de la Asociación Chilena de Municipalidades (AChM), Gonzalo Navarrete, dejó entrever que este proyecto abre un camino largo, en que los sistemas locales podrán recuperarse de la histórica deuda que los agobia.

“Se extingue la deuda con el Estado, entonces de allí tiene que venir un nuevo sistema de financiamiento para particulares subvencionados y para municipales, pero eso requiere este período de adaptación, de colocar a la educación pública a la misma altura que el resto de la educación en calidad. Nos vamos a demorar un par de años en pagar las deudas. El fondo de fortalecimiento de la educación pública va a permitir que de aquí a dos años no tengamos deudas, que los nuevos sistemas locales de educación no dejen botados a los municipios y allí vendrá un nuevo sistema de financiamiento”.

En ese punto, el edil deja ver la discusión inmediata generada por el anuncio, que es sobre el financiamiento. La duda en distintos sectores, como los diputados de Revolución Democrática Giorgio Jackson y del Partido Comunista Camila Vallejo es que todavía se mantiene, un porcentaje, el aporte por matrícula.

De todas formas el tema todavía queda por revisarse, en este u otro proyecto. La legisladora del PC y presidenta de la comisión de Educación, señaló en ese sentido, que la prioridad es sentar un criterio.

“Hay que ver cuál es el mejor mecanismo, lo importante es el criterio. Yo creo que el proyecto de ley tiene que establecer criterios a alcanzar. Se ha hablado por ejemplo de convenios de gestión, o proyectos estratégicos de desarrollo de las escuelas públicas a cargo de los directores ejecutivos de cada servicio, y esos planes estratégicos, esos proyectos de mejoramiento tienen que apuntar a ciertos objetivos, y esos objetivos tienen que ser financiado, porque si no están financiados no vamos a lograr dar el salto cualitativo que queremos para la educación pública”.

El vocero de la Cones, Ricardo Paredes, presente en la ceremonia planteó que el proyecto es importante porque defiende ideas matrices, pero también apuntó a un eventual proyecto de ley aparte para abordar el financiamiento de todo el sistema.

Mientras, en las afueras del Palacio de La Moneda, los trabajadores del Mineduc reiteraron su exigencia: que los establecimientos educacionales regresen a la tutela directa del Ministerio, rechazando la creación de los “Servicios Locales”.