Nuestro medio tuvo acceso al informe final de la delegación de observadores canadienses que visitó el país en enero. En el advierten “un contexto permanente de intimidación y criminalización de la protesta social”, acusando además “violencia político-sexual de carácter institucional” ejercida por Carabineros.
En conversación con nuestro medio, el presidente de la Fundación Nodo XXI afirmó que en esta pandemia se repite, por parte de las autoridades, lo mismo que sucedió con el estallido social de octubre, graficado en la frase “no lo vimos venir”.
La nueva autoridad se mostró abierta al diálogo con distintos actores, lo que marca un quiebre con su antecesor, Jaime Mañalich, criticado justamente por no poner en práctica recomendaciones emanadas desde distintas esferas.
La ex autoridad se refirió a su salida de la cartera, sin embargo no se refirió a las distintas cifras de fallecidos que el gobierno entregaba al país y a la OMS.
Era la cabeza más pedida del gabinete de Sebastián Piñera, Jaime Mañalich jugó un polémico rol durante la crisis sanitaria que afecta al país.
El tomar los registros de defunción del Registro Civil y cruzarlos con los exámenes PCR han dado cifras poco claras respecto de los fallecidos, por ejemplo, el martes se registraron 19 muertes, mientras que este miércoles 192. Las críticas han surgido desde diferentes sectores.
El Presidente se mostró confiado “en que la sociedad chilena y quienes tenemos cargos de elección popular sabremos estar a la altura”.
El académico se refirió a los constantes cambios en la metodología para contar los fallecidos por Covid-19. Al respecto, el experto sostuvo que, en otros países, dichas modificaciones serían un escándalo y cobrarían el puesto al ministro a cargo.
“Creo que hubo dos cegueras muy importantes para el gobierno que han afectado la marcha de los contagios por el coronavirus. Una primera ceguera del Gobierno es no haber previsto, y visto, la desigualdad brutal de nuestro país”, explica a la AFP, María Soledad Barría, exministra de Salud durante el primer gobierno de Michelle Bachelet (2006-2010) y directora de salud de la Universidad de Chile.
El presidente de la Falange reconoció que existen motivos fundados para desconfiar del llamado del Gobierno al acuerdo nacional, pero aseguró que como partido tienen la obligación de concurrir al diálogo de buena fe. “Necesitamos hacer un esfuerzo muy relevante ahora ya, porque de lo contrario la crisis sanitaria y humanitaria será mucho peor”, manifestó.
En conversación con nuestro medio, el exministro y presidente del Partido Radical explicó los motivos de la abrupta salida de su colectividad de la instancia de diálogos que encabezaba el titular de Hacienda, apuntando a su visión “muy de derecha” como gran responsable. “No ve el sistema tributario como una herramienta de redistribución de ingresos”, criticó Maldonado.
En conversación con Radio y Diario Universidad de Chile, el senador socialista sostuvo que esta ayuda debe ser para todos independiente del nivel socioeconómico del afectado.