Según estableció la jueza del segundo Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago, el medio de comunicación de la familia Mosciatti sustituyó a periodistas, varios de ellos con cargos claves en el funcionamiento de la radio, “logrando paliar el efecto de la huelga”. Desde el sindicato de trabajadores valoraron el fallo, destacando que “demuestra lo que denunciamos con fuerza durante la huelga: que la empresa incurrió en prácticas antisindicales y negoció de mala fe”.
Pese a estar prohibido por ley, dirigentes sindicales indicaron que la Inspección del Trabajo ha hecho caso omiso a las acusaciones sobre la contratación de personal no capacitado para operar en la loza del Aeropuerto de Santiago. Los funcionarios solicitan mejoras salariales y el cumplimiento de sus derechos laborales.
Con el proyecto siendo discutido en el Senado, desde la Cámara Baja y entre los dirigentes de la multisindical aseguran que la iniciativa no será aprobada tan fácilmente. Figura de las “adecuaciones necesarias” aparece como el principal obstáculo.
Anuncio de una nueva semana de plazo para enviar indicaciones al Congreso es recibido entre dirigentes sindicales y economistas como una señal de desorden en la discusión interna, además de posibles facciones de poder en la Nueva Mayoría que intentan morigerar el proyecto.
Desde la coalición gobernante consideran necesarios los plazos extra para definir criterios en el documento. Ante ello, el mundo laboral pide que el aplazo responda a mejoras y no a la intención de no tramitar el compromiso de campaña.
Según el presidente de la Unión Nacional de Trabajadores, Segundo Steilen, la reforma no puede aprobarse tal como está ya que, en su opinión, aún no existe consenso entre los trabajadores y el Ejecutivo.