Después de un estancamiento en la Comisión Especial Mixta, el proyecto de Ley de Presupuesto 2011 seguirá en discusión este lunes hasta quedar completamente zanjado, con lo que podría ingresar este martes a la Cámara de Diputados y posteriormente al Senado.
Un trabajo extenso, donde se han revisado cerca de 400 indicaciones al proyecto originalmente presentado y donde se han escuchado a distintos actores sociales, alcanzando también acuerdos verbales con la oposición. Un proceso de negociación que se ha plasmado en un protocolo de acuerdo que se presentará de forma paralela a la ley.
El jefe de la bancada de diputados de la Democracia Cristiana, Patricio Vallespín, fue parte de la comisión negociadora y se mostró optimista frente a los resultados de la discusión del día de hoy.
Vallespín destacó los acuerdos logrados y “el aumento de partidas presupuestarias que el Gobierno no tenía consideradas, como los recursos para continuar la construcción de jardines infantiles y sala cunas, la definición de información permanente al Congreso para aumentar la transparencia, reducir los niveles de asignación a dedo de recursos y también explicitar mucho más claramente los temas de reconstrucción”.
“Yo estoy razonablemente optimista, porque creo que el Gobierno entendió que lo que estábamos planteando no eran actitudes obstruccionistas, sino que eran propuestas de mejoramiento para el bien de las personas”, dijo Vallespín.
El parlamentario también valoró el aumento del per cápita para salud primaria en 4 mil 500 millones de pesos y el acuerdo de destinar los nuevos recursos del royalty minero, 1000 millones de dólares en 3 años, para áreas como Educación, Salud, Vivienda y Obras Públicas.
Sin embargo, no tiene la misma percepción el diputado socialista Carlos Montes, para quien “el presupuesto no venía bien y necesitaba varias mejorías” y quien afirmó que el Gobierno estuvo “muy poco abierto a recoger algunas propuestas”.
Un ejemplo de ello fue el costo de reponer recursos para viviendas y subsidios en las regiones afectadas por el terremoto o los recursos para mantener bienes patrimoniales como Villa Grimaldi o Londres 38, además de mantener beneficios que ya existían como en educación.
Por su parte, el jefe de la bancada de diputados de Renovación Nacional, Nicolás Monckeberg, afirmó que se ha hecho un buen trabajo y que, pese a que aún quedan algunas indicaciones por resolver, espera su pronta aprobación.
“Creo que se ha hecho un muy buen trabajo con los parlamentarios de la Coalición por el Cambio, los ministros de Gobierno y los parlamentarios de la Concertación. Estamos llegando a un acuerdo importante, que mantiene lo central del presupuesto del Presidente Piñera. Es un presupuesto que incentiva el crecimiento económico, la generación de empleo, que va en ayuda de los sectores más vulnerables de la población, que innova en muchas cosas en relación a años anteriores. Creo que, de no mediar ningún problema, este presupuesto va a ser ampliamente apoyado por el Parlamento, tanto en el Senado como en la Cámara”, afirmó.
Para el diputado RN lo más destacable es el acuerdo respecto al primer piloto en que se va a implementar el salario ético familiar, donde se garantizará a las familias más vulnerables un piso para salir de la indigencia.
Una discusión que hoy se traslada a Santiago, donde se espera precisar las partidas presupuestarias pendientes y destrabar los aspectos que han mantenido esta discusión por más de un mes.