Los diputados oficialistas que integran la segunda comisión investigadora por el terremoto del 27 de febrero de 2010 votaron las conclusiones de la instancia, señalando responsabilidades “gravísimas” de la ex Presidenta Michelle Bachelet, a quien acusan de asumir un rol de mando que no le correspondía, ocultar información y no resguardar el orden público.

El presidente de la comisión que terminó sesionando sin participación de la Concertación, el diputado UDI Cristián Letelier, dijo que “cuando una persona tiene un rango tal alto, el más alto de la República, creemos que ir a la Onemi a dar las instrucciones inhibe de actuar a las personas técnicas o que tienen la responsabilidad conforme a la ley, y que era en este caso doña Carmen Fernández, ex jefa de la Onemi”.

Asimismo, los parlamentarios concluyeron responsabilidades gravísimas del ex ministro del Interior, Edmundo Pérez Yoma; del Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA); y de la Oficina Nacional de Emergencias (Onemi).

Las conclusiones sentencian que Pérez Yoma demostró desconocimiento de los protocolos de emergencia e incumplió su rol por estar de vacaciones. Además, se plantea que ocultó información, que hubo una deficiente actuación de sus subordinados y un mal funcionamiento de los sistemas de comunicación.

Al SHOA, se le acusa de haber hecho caso omiso de información oficial internacional que alertaba de un maremoto y de no informar a la comunidad.

En tanto, a la Onemi se le culpa de descoordinación y desconocimiento de la conformación del Comité Nacional de Operaciones de Emergencia, además de responder con tardanza y adoptar decisiones erróneas.

En el informe final, que deberá ser votado en la sala de la Cámara, se establecen también responsabilidades “graves” del ex subsecretario del Interior, Patricio Rosende, por ocultar información a la ex Presidenta Bachelet y por mentir a la opinión pública. Igual nivel de responsabilidad se le atribuyó a la ex asesora de Bachelet,  María Angélica Álvarez.