Pese a que la votación resultó con 23 fotos a favor, 13 en contra y 2 abstenciones, no se alcanzaron los 25 votos necesarios para alcanzar el quórum que permita discusión del proyecto de reforma constitucional que establece un principio proporcional y representativo en el sistema electoral.

El proyecto fue presentado en 2005 por el entonces presidente Ricardo Lagos, y luego de ser aprobado en la Comisión de Constitución del Senado, este no alcanzó los votos suficientes en Sala, postergando nuevamente una eventual reforma al sistema binominal.

La sesión duró más de cinco horas, con intervención de 26 senadores, quienes emplazaron sus cuestionamientos al proyecto. El independiente Carlos Bianchi, emplazó a muchos parlamentarios que salieron terceros en la votación, pero que hoy ocupan un escaño en el Congreso, y rechazó la propuesta de mejorar la representatividad con aumento de cupos.

“Ha pasado por todo un proceso para hacerle ver al país que hay un ánimo, justo el año de elecciones. Esto ocurre cada cuatro años, y siento que hay hastío y cansancio, agotamiento del país ante la clase política, que por un lado tenemos un discurso de hacer estos cambios, pero por otro, por debajo, estamos haciendo lo que acabo de decir. ¿Qué trae este proyecto de ley? El aumento de parlamentarios, y lo rechazo absolutamente, no estoy dispuesto a eso”, declaró.

La Concertación mantuvo esperanza en alcanzar el quórum, apoyado por miembros de Renovación Nacional que comprometieron su apoyo, votos que no fueron suficientes. El senador y presidente de la Democracia Cristiana, Ignacio Walker, apuntó al origen del binominal, que surgió luego del Plebiscito para beneficiar a la derecha en las urnas.

Walker apuntó que este sistema es “una anomalía que hay que explicar en su origen. Se trató el año 1989 de establecer un sistema electoral binominal para subsidiar a la derecha, punto. Se hizo con los distritos en la mano, el resultado del ’88, se dibujaron los distritos sobre la base del plebiscito. Eso se llama un traje a la medida, con el objeto de establecer que la mayoría vale lo mismo que la minoría”.

Desde el oficialismo se mantuvo un rechazo, principalmente desde la UDI, quienes se oponen a un sistema representativo. A juicio de Juan Antonio Coloma, esto va en contra de las políticas de regionalización y descentralización que hoy urgen en materia política.

“Este proyecto es profundamente equivocado, es el proyecto que más mal le haría a Chile en materia electoral. Imposible más mal que esto, inimaginable, donde comete todos los errores respecto a un sistema bueno para Chile. Y tiene una explicación, que mientras Coyhaique va a elegir 1 parlamentario, la región metropolitana elegirá 57, Valparaíso tendrá 16 y el Biobío también 16. Eso genera, este proyecto genera concentración del poder en Chile, concentración de la representatividad”, apuntó Coloma.

Luego de la insistencia presentada por el Ejecutivo, el futuro del cambio al binominal quedó en manos del Senado, y con esta votación, se posterga nuevamente un cambio al sistema eleccionario, sin opciones de romper el alto quórum requerido para legislar.