El movimiento Revolución Democrática presentó una propuesta técnica que hace viable un camino institucional para la Asamblea Constituyente.

La propuesta consiste en modificar los artículos 15 y 32 de la Constitución y con ello entregar las facultades a la Presidenta, para que esta llame a un plebiscito nacional y que sean los propios chilenos los que definan el mecanismo con el que se modifique la carta política del país.

Para cambiar los artículos, la iniciativa requiere un quórum de tres quintos en cada una de las cámaras, es decir que 72 diputados y 23 senadores voten a favor.

La propuesta técnica es viable, pero esto debe ser acompañado de un respaldo político en el Congreso y un acuerdo con parlamentarios de la Alianza, quienes tradicionalmente se han opuesto al mecanismo de consulta popular.

Para Pablo Paredes, coordinador nacional de Revolución Democrática, si hay posibilidades de conseguir adhesión a la iniciativa legislativa, por lo que iniciarán un proceso de diálogo con aquellos parlamentarios que estarían dispuestos a cambiar su opinión: “Hay gente que ha descartado la Asamblea Constituyente, porque no quieren ningún tipo de nueva Constitución en primer lugar, entonces ahí el diálogo es poco posible. Sin embargo, hay sectores que no veían viabilidad institucional para la Asamblea Constituyente, por lo tanto hay muchos sectores políticos que han dicho que no y con quienes nos gustaría volver a conversarlo a partir de esa propuesta en donde ofrecemos una salida institucional”, señaló.

La coordinadora de redes del movimiento, Javiera Parada, fue más allá y, sin querer dar nombres, aseguró que hay parlamentarios de la Alianza que ya les manifestaron su apoyo a la reforma. “En general hemos tenido bastante buena recepción, más allá de la Nueva Mayoría”, dijo.

“Al respecto, nosotros nos preguntado cuál es la mejor manera de hacer una constitución”, dijo la Coordinadora de Redes Ciudadanas, Javiera Parada, en la tercera edición de Radioanálisis. Y continuó: “Como no hay discusión que una asamblea es democrática y participativa, pero sí que es inconstitucional, entonces nos reunimos con abogados para dotarlo de institucionalidad”.

La propuesta consiste en habilitar a la Presidenta para llamar a plebiscito y preguntar a la ciudadanía cómo quiere la nueva Constitución.

“La que hoy nos rige no contiene mecanismo para hacer una nueva, sino para reformarla, pero eso no queremos que todos nos sintamos parte de ella”, insistió Parada.

Una de las coordinadoras de “Marca tu voto AC” explicó que “es una reforma que no pretende imponer la Asamblea Constituyente, sino preguntar, y a partir de eso hemos tenido buena acogida, incluso en los parlamentarios de la Alianza”.

Pese a que el Gobierno postergó esa discusión para el segundo semestre, el movimiento fundado por el diputado Giorgio Jackson presiona la agenda y pondrá a prueba su capacidad de lobby en el Congreso.