Renuncia de José Antonio Kast remece a la UDI

El diputado por La Reina y Peñalolén anunció esta mañana su renuncia a la UDI luego de dos décadas de militancia. "Lo que se genera es un punto de inflexión", afirmó en entrevista con Radio y Diario Universidad de Chile el diputado Arturo Squella, quien ve en esta "triste pero esperada" desvinculación una oportunidad para encauzar el proyecto país de los gremialistas.

El diputado por La Reina y Peñalolén anunció esta mañana su renuncia a la UDI luego de dos décadas de militancia. "Lo que se genera es un punto de inflexión", afirmó en entrevista con Radio y Diario Universidad de Chile el diputado Arturo Squella, quien ve en esta "triste pero esperada" desvinculación una oportunidad para encauzar el proyecto país de los gremialistas.

“Hoy renuncio a la UDI, pero jamás renunciaré a los ideales y principios por los que he dedicado mi vida a la política, valores que estoy convencido que muchos compartimos y por los que hemos luchado juntos”, expresó esta mañana José Antonio Kast en una carta dirigida a los militantes del partido.

“No podía permanecer indiferente cuando sentí que la UDI a la que yo entré comenzó a alejarse de su proyecto fundador, de su base fundamental, y que lentamente se transformó en algo muy distinto, dominada por un afán de “ser el partido más grande” a cualquier costo”, agrega el diputado, advirtiendo que su renuncia se debe a una profunda reflexión que ya había planteado al interior de su ahora ex partido.

José Antonio Kast es abogado y conoció a Jaime Guzmán en la Escuela de Derecho de la Universidad Católica, quien lo motivó para integrarse a la UDI. Ingresó a la Cámara el año 2002 representando al distrito 30 de San Bernardo, en reemplazo del entonces diputado Pablo Longueira. Hoy representa al distrito 24 de la Región Metropolitana, que comprende las comunas de La Reina y Peñalolén.

En entrevista con Radio y Diario Universidad de Chile, el diputado por el distrito 12, Arturo Squella, reconoció que la renuncia de José Antonio Kast no fue una sorpresa para su círculo más cercano. “Él nos había dicho que durante el mes de mayo si es que no se hacía un Consejo General él iba a renunciar, y como buen alemán, efectivamente fue así”, señaló.

¿Es una buena o una mala noticia para la UDI?

Es una noticia triste para quienes compartimos en gran medida el diagnóstico que ha hecho José Antonio, triste porque existen varias maneras de aproximarse a ese diagnóstico desde el punto de vista de la solución. Diputados y dirigentes que nos hemos incorporado a las filas de la UDI en los últimos años creemos que está todo para poder hacer los cambios por dentro. Él tiene una visión distinta, muy respetada, para él esta es una manera de generar un remezón. Lo que se genera es un punto de inflexión, quienes nos quedamos dentro nos tomamos esto como un punto de partida para hacer todo lo que está a nuestro alcance para que José Antonio Kast y todo lo que representa vuelva a fijarse en la UDI como el proyecto para desarrollarse en política.

A su juicio, ¿el problema de la UDI es intergeneracional, de dirigentes que han estado desde siempre y que no dejan espacio a nuevos actores y a nuevas participaciones, o es también un problema de desperfilamiento ideológico?

Tiene un poco de todo. Creo que la principal razón es la pérdida de identidad, que yo creo que es reversible. En algún minuto se le metió en la cabeza a los dirigentes de la época que la UDI tenía que ser el partido más grande a toda costa. Yo creo que es un error, que los proyectos políticos tienen que responder principalmente a las ideas que hay detrás y es eso lo que nosotros creemos que tiene que cambiar, que están las condiciones para cambiar.

A la luz de los escritos de Jaime Guzmán, da la impresión de que nunca concibió a la UDI como un partido hegemónico, sino que se prefería que alcanzase no más de un 15 por ciento de las votaciones pero sin perder la solidez de sus principios. ¿Sería rescatable volver a esa manera de concebir el rol de la UDI en la política chilena?

Se da la paradoja de que la UDI cuando no necesariamente ha sido el partido con las bancadas más grandes o con la mayor cantidad de alcaldes, concejales, en fin, ha sido más influyente con sus ideas. No necesariamente tiene que ser así, es evidente que todo partido político pretende crecer en el número de sus representantes, pero ese crecimiento tiene que ser sostenido en función de la manera de hacer política que representa. Es eso donde a mi juicio ha estado la principal falla de la UDI, falla que afortunadamente desde mi perspectiva en exceso optimista, creo que es reversible. Lamentablemente hay que tocar fondo para que algunos se den cuenta, pero la crisis que está viviendo no solo la UDI, sino que en la política en general, hay que mirarla como una oportunidad para encauzar este proyecto que es tan importante para el país.

Analista política: “Esto va de la mano con una UDI desdibujada en el escenario político”

La analista política Francisca Quiroga aseguró que la renuncia de una figura histórica de la UDI como José Antonio Kast responde a la crisis de representación de la política y da cuenta de los problemas internos de democratización por los que atraviesan los partidos políticos.

“Esto va de la mano con una UDI desdibujada en el escenario político desde el punto de vista de sus agendas su vinculación con la ciudadanía, un alto descrédito vinculado al caso Penta y a un desfile de sus militantes ante tribunales: Jovino Novoa y Pablo Longueira, especialmente. Entonces, es una crisis política profunda que requiere una transformación desde el punto de vista interno que uno no ve”, aseguró.

Francisca Quiroga agregó que con esta decisión Kast busca salvarse de un partido donde no existe una propuesta programática y que la UDI requiere generar una apertura y una transformación rupturista. Sin embargo a juicio de la analista no existe esa voluntad política por parte de los directivos

En ese contexto, “la salida del diputado se erige como una decisión personal, en la misma línea de la salida de Pepe Auth del PPD”, también vinculado a casos de financiamiento irregular.

“Entonces no son actores que estén proponiendo nuevas acciones para democratizar los partidos ni haciendo nuevos referentes políticos”, lo cual a juicio de la analista “resulta preocupante para la calidad de la democracia”.

Finalmente Quiroga dijo que “una democracia requiere de partidos políticos que sean un vínculo entre la sociedad y el Estado y que tengan vocación de acceso al poder con un proyecto programático y principios que respondan a definiciones ideológicas y políticas”.

Sin embargo, señaló que esto no ocurre porque las elites dirigenciales están aferradas a mantenerse donde están. En ese escenario advirtió que es probable que se produzcan nuevas renuncias de militantes a estos partidos.





Presione Escape para Salir o haga clic en la X