Histeria por coronavirus: cuando la reacción es más grave que la enfermedad
La oleada de noticias relacionadas al Covid-19 ha dejado en segundo plano hechos tan importantes como que la mayoría de casos se mejoran y que los síntomas de la enfermedad son imperceptibles, leves o moderados en casi el 90 por ciento.
Diario UChile
Miércoles 4 de marzo 2020 18:45 hrs.
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La confirmación de tres casos del nuevo coronavirus ha encendido alarmas en todo Chile, en donde la noticia ha corrido con rapidez desatando la histeria colectiva a lo largo y ancho del territorio nacional. Pero según los expertos, este alarmismo está dado netamente por la desinformación y mitos que han surgido en torno a un nuevo brote viral del que ya se conoce bastante.
En este sentido la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha sido enfática y sumamente clara. Dentro de China, donde se originó el COVID-19, la tasa de mortalidad está entre el 2 y el 4 por ciento. No obstante, fuera del país asiático esta cifra se reduce notablemente, hasta un 0,7 por ciento.
Además, han aclarado que este porcentaje depende de distintos factores, como la edad, el sexo y las condiciones de salud en que se encuentra el paciente. Por ejemplo, sólo el 3 por ciento de los casos ocurre en menores de 20 años, y la mortalidad en menores de 40 años es solo del 0,2 por ciento.
“Está afectando muy poco a los niños y esa es una buena noticia para las mamás porque, en realidad, en los niños la tasa de contagio es muy baja y en el mundo la mayoría de los casos han sido muy leves”,explicó en conversación con Diario y Radio Universidad de Chile, el secretario nacional del Colegio Médico, José Miguel Bernucci.
Según los datos de la Comisión Nacional de Salud de China, la proporción de pacientes recuperados y dados de alta del nuevo coronavirus llegó en marzo a alcanzar un 52,1 por ciento. Aseguran que esta cifra sigue en aumento. Foto: News.cn.
Según la información epidemiológica de cientos de casos recabada por el Consejo Nacional de Investigación de Italia (CNR, por sus siglas en italiano), los síntomas causados por la enfermedad son imperceptibles, leves o moderados en el 80 al 90 por ciento de los casos. En el 14 por ciento puede causar neumonía grave y sólo en un cinco por ciento de los casos puede llegar a ser crítica o mortal.
“Lo que ha destacado es que los casos más graves, más complejos y de mayor mortalidad se han concentrado en los adultos mayores, en su mayoría mayores de 75 años, especialmente en mayores de 70 y con mucha agresividad en los mayores de 85 años”, añadió el médico.
El CNR ha estimado que en el 10 a 15 por ciento de los casos puede desarrollarse una neumonía, pero la evolución es positiva en la inmensa mayoría. Así también, la misma institución señaló que sólo el 4 por ciento de los pacientes deben ser hospitalizados en unidades de cuidados intensivos.
Una historia que se repite
Los médicos y científicos que han estudiado la enfermedad han sido enfáticos en que tiene que primar la calma, ya que ésta no es una situación muy distinta a las que se han vivido antes con otros brotes, como por ejemplo las que se vivieron a nivel mundial con la gripe H1N1, el Síndrome Respiratorio Agudo Grave (SARS) o incluso el virus Ébola.
Este último, por ejemplo, fue controlado a través de la respuesta más efectiva que ha logrado elaborar la humanidad para combatir este tipo de enfermedades infecciosas: las vacunas y medicamentos antivirales. Según el director general de la OMS, Tedros Adhanom, hoy en día se están desarrollando más de 20 vacunas contra el coronavirus y ya está en marcha el primer ensayo clínico de un medicamento antiviral.
En otros casos, como el del SARS, sólo basta un cambio de hábitos en la ciudadanía. Este virus -otra cepa de coronavirus- llegó a su fin a mediados de 2003 y según expertos de la Universidad de Hong Kong se debió a las buenas prácticas de higiene, las que se sumaron a un cambio en la temperatura y humedad con la llegada de los meses de verano. Cabe destacar que, al igual que el SARS, este nuevo coronavirus puede ser inactivado de las superficies simplemente con alcohol gel. Es por esto que el lavado de manos frecuente con agua y jabón es la manera más eficaz de evitar el contagio.
También los virus pueden mutar a medida que cambia la temperatura y humedad del ambiente. Así sucedió en el caso de la gripe H1N1, que en 2009 fue declarada una pandemia y las alarmas se encendieron a nivel mundial. Finalmente, ésta terminó convirtiéndose en un virus “de estación” que aparece en el frío del invierno y apunta a las edades más vulnerables. En ese sentido, el secretario nacional del Colegio Médico, Dr. José Miguel Bernucci, explicó que la situación actual con este nuevo coronavirus se ve más auspiciosa.
“Tuvimos la experiencia el año 2009 con la H1N1, en donde hubo una explosión de casos en muy poco tiempo y con muchos pacientes graves. Yo creo que, afortunadamente, el Sistema de Salud aprendió, todavía tenemos memoria de lo que pasó ahí y por lo tanto, yo creo que estamos mejor preparados que en ese entonces”, tranquilizó el secretario nacional del Colegio Médico.
Y es que, hasta el momento, en el país se han dispuesto más de 50 centros de referencia o denominados ‘Centinela’ para atender eventuales pacientes, los que han sido reforzados y preparados durante las semanas previas para abordar la enfermedad. Además, se han dispuesto 12 laboratorios habilitados para identificar el COVID-19. Estas medidas, según los expertos, dejan a Chile mejor preparado que en cualquier otro momento.
Dentro de China, donde se originó el COVID-19, la tasa de mortalidad está entre el 2 y el 4 por ciento. No obstante, fuera del país asiático esta cifra se reduce notablemente, hasta un 0,7 por ciento. Fuente: BBC.
El rol de los medios de comunicación
Entre las noticias sobre nuevas mutaciones, nuevos casos confirmados, nuevos países afectados y nuevas muertes relacionadas al virus, poco aparecen las cifras que demuestran una realidad que ha sido desestimada: la mayoría de la gente se cura.
Según los datos de la Comisión Nacional de Salud de China, la proporción de pacientes recuperados y dados de alta del nuevo coronavirus llegó en marzo a un 52,1 por ciento y sigue en aumento.
Sin embargo, el miedo y la inquietud han permeado a la ciudadanía, dejando en evidencia el desconocimiento que existe sobre el panorama completo. Para la médica infectóloga del Hospital Clínico de la Universidad de Chile, Jeanette Dabanch, una de las razones de este alarmismo tiene que ver con la cobertura que han realizado los medios de comunicación.
“La preocupación de la ciudadanía está muy relacionada también a lo que hemos visto en las noticias. Lo que ha sucedido especialmente en China, en donde vimos estos cuarentenamientos (sic) importantes en las ciudades”, señaló la infectóloga de la Universidad de Chile.
“Eso probablemente ha preocupado a la comunidad, como probablemente es lo lógico, pero la situación en nuestro país es totalmente diferente porque hemos tenido estas semanas para preparar la respuesta, para ir conociendo y adquiriendo más información sobre este virus”, aseguró Dabanch.
Cabe destacar que, en términos de prevención, el consejo básico de la OMS es que uno puede protegerse de todos los virus respiratorios lavándose constantemente las manos con agua y jabón, evitando a las personas que tosen y estornudan; y al hacerlo, cubrirse la boca y nariz con pañuelos desechables, para luego eliminarlos.
En caso de presentar síntomas, dirigirse al Servicio de Urgencia más cercano y alertar sobre posibles viajes y su estado de salud. También está disponible durante las 24 horas del día el número de Salud Responde (600-360-7777).
*Foto en portada: AFP (referencial).
Hasta el momento, se han dispuesto más de 50 centros de referencia para atender eventuales pacientes, los que han sido reforzados y preparados para abordar la enfermedad. Además, se han dispuesto 12 laboratorios habilitados para identificar el COVID-19. Foto: Seremi RM.
La confirmación de tres casos del nuevo coronavirus ha encendido alarmas en todo Chile, en donde la noticia ha corrido con rapidez desatando la histeria colectiva a lo largo y ancho del territorio nacional. Pero según los expertos, este alarmismo está dado netamente por la desinformación y mitos que han surgido en torno a un nuevo brote viral del que ya se conoce bastante.
En este sentido la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha sido enfática y sumamente clara. Dentro de China, donde se originó el COVID-19, la tasa de mortalidad está entre el 2 y el 4 por ciento. No obstante, fuera del país asiático esta cifra se reduce notablemente, hasta un 0,7 por ciento.
Además, han aclarado que este porcentaje depende de distintos factores, como la edad, el sexo y las condiciones de salud en que se encuentra el paciente. Por ejemplo, sólo el 3 por ciento de los casos ocurre en menores de 20 años, y la mortalidad en menores de 40 años es solo del 0,2 por ciento.
“Está afectando muy poco a los niños y esa es una buena noticia para las mamás porque, en realidad, en los niños la tasa de contagio es muy baja y en el mundo la mayoría de los casos han sido muy leves”,explicó en conversación con Diario y Radio Universidad de Chile, el secretario nacional del Colegio Médico, José Miguel Bernucci.
Según los datos de la Comisión Nacional de Salud de China, la proporción de pacientes recuperados y dados de alta del nuevo coronavirus llegó en marzo a alcanzar un 52,1 por ciento. Aseguran que esta cifra sigue en aumento. Foto: News.cn.
Según la información epidemiológica de cientos de casos recabada por el Consejo Nacional de Investigación de Italia (CNR, por sus siglas en italiano), los síntomas causados por la enfermedad son imperceptibles, leves o moderados en el 80 al 90 por ciento de los casos. En el 14 por ciento puede causar neumonía grave y sólo en un cinco por ciento de los casos puede llegar a ser crítica o mortal.
“Lo que ha destacado es que los casos más graves, más complejos y de mayor mortalidad se han concentrado en los adultos mayores, en su mayoría mayores de 75 años, especialmente en mayores de 70 y con mucha agresividad en los mayores de 85 años”, añadió el médico.
El CNR ha estimado que en el 10 a 15 por ciento de los casos puede desarrollarse una neumonía, pero la evolución es positiva en la inmensa mayoría. Así también, la misma institución señaló que sólo el 4 por ciento de los pacientes deben ser hospitalizados en unidades de cuidados intensivos.
Una historia que se repite
Los médicos y científicos que han estudiado la enfermedad han sido enfáticos en que tiene que primar la calma, ya que ésta no es una situación muy distinta a las que se han vivido antes con otros brotes, como por ejemplo las que se vivieron a nivel mundial con la gripe H1N1, el Síndrome Respiratorio Agudo Grave (SARS) o incluso el virus Ébola.
Este último, por ejemplo, fue controlado a través de la respuesta más efectiva que ha logrado elaborar la humanidad para combatir este tipo de enfermedades infecciosas: las vacunas y medicamentos antivirales. Según el director general de la OMS, Tedros Adhanom, hoy en día se están desarrollando más de 20 vacunas contra el coronavirus y ya está en marcha el primer ensayo clínico de un medicamento antiviral.
En otros casos, como el del SARS, sólo basta un cambio de hábitos en la ciudadanía. Este virus -otra cepa de coronavirus- llegó a su fin a mediados de 2003 y según expertos de la Universidad de Hong Kong se debió a las buenas prácticas de higiene, las que se sumaron a un cambio en la temperatura y humedad con la llegada de los meses de verano. Cabe destacar que, al igual que el SARS, este nuevo coronavirus puede ser inactivado de las superficies simplemente con alcohol gel. Es por esto que el lavado de manos frecuente con agua y jabón es la manera más eficaz de evitar el contagio.
También los virus pueden mutar a medida que cambia la temperatura y humedad del ambiente. Así sucedió en el caso de la gripe H1N1, que en 2009 fue declarada una pandemia y las alarmas se encendieron a nivel mundial. Finalmente, ésta terminó convirtiéndose en un virus “de estación” que aparece en el frío del invierno y apunta a las edades más vulnerables. En ese sentido, el secretario nacional del Colegio Médico, Dr. José Miguel Bernucci, explicó que la situación actual con este nuevo coronavirus se ve más auspiciosa.
“Tuvimos la experiencia el año 2009 con la H1N1, en donde hubo una explosión de casos en muy poco tiempo y con muchos pacientes graves. Yo creo que, afortunadamente, el Sistema de Salud aprendió, todavía tenemos memoria de lo que pasó ahí y por lo tanto, yo creo que estamos mejor preparados que en ese entonces”, tranquilizó el secretario nacional del Colegio Médico.
Y es que, hasta el momento, en el país se han dispuesto más de 50 centros de referencia o denominados ‘Centinela’ para atender eventuales pacientes, los que han sido reforzados y preparados durante las semanas previas para abordar la enfermedad. Además, se han dispuesto 12 laboratorios habilitados para identificar el COVID-19. Estas medidas, según los expertos, dejan a Chile mejor preparado que en cualquier otro momento.
Dentro de China, donde se originó el COVID-19, la tasa de mortalidad está entre el 2 y el 4 por ciento. No obstante, fuera del país asiático esta cifra se reduce notablemente, hasta un 0,7 por ciento. Fuente: BBC.
El rol de los medios de comunicación
Entre las noticias sobre nuevas mutaciones, nuevos casos confirmados, nuevos países afectados y nuevas muertes relacionadas al virus, poco aparecen las cifras que demuestran una realidad que ha sido desestimada: la mayoría de la gente se cura.
Según los datos de la Comisión Nacional de Salud de China, la proporción de pacientes recuperados y dados de alta del nuevo coronavirus llegó en marzo a un 52,1 por ciento y sigue en aumento.
Sin embargo, el miedo y la inquietud han permeado a la ciudadanía, dejando en evidencia el desconocimiento que existe sobre el panorama completo. Para la médica infectóloga del Hospital Clínico de la Universidad de Chile, Jeanette Dabanch, una de las razones de este alarmismo tiene que ver con la cobertura que han realizado los medios de comunicación.
“La preocupación de la ciudadanía está muy relacionada también a lo que hemos visto en las noticias. Lo que ha sucedido especialmente en China, en donde vimos estos cuarentenamientos (sic) importantes en las ciudades”, señaló la infectóloga de la Universidad de Chile.
“Eso probablemente ha preocupado a la comunidad, como probablemente es lo lógico, pero la situación en nuestro país es totalmente diferente porque hemos tenido estas semanas para preparar la respuesta, para ir conociendo y adquiriendo más información sobre este virus”, aseguró Dabanch.
Cabe destacar que, en términos de prevención, el consejo básico de la OMS es que uno puede protegerse de todos los virus respiratorios lavándose constantemente las manos con agua y jabón, evitando a las personas que tosen y estornudan; y al hacerlo, cubrirse la boca y nariz con pañuelos desechables, para luego eliminarlos.
En caso de presentar síntomas, dirigirse al Servicio de Urgencia más cercano y alertar sobre posibles viajes y su estado de salud. También está disponible durante las 24 horas del día el número de Salud Responde (600-360-7777).
*Foto en portada: AFP (referencial).
Hasta el momento, se han dispuesto más de 50 centros de referencia para atender eventuales pacientes, los que han sido reforzados y preparados para abordar la enfermedad. Además, se han dispuesto 12 laboratorios habilitados para identificar el COVID-19. Foto: Seremi RM.
La confirmación de tres casos del nuevo coronavirus ha encendido alarmas en todo Chile, en donde la noticia ha corrido con rapidez desatando la histeria colectiva a lo largo y ancho del territorio nacional. Pero según los expertos, este alarmismo está dado netamente por la desinformación y mitos que han surgido en torno a un nuevo brote viral del que ya se conoce bastante.
En este sentido la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha sido enfática y sumamente clara. Dentro de China, donde se originó el COVID-19, la tasa de mortalidad está entre el 2 y el 4 por ciento. No obstante, fuera del país asiático esta cifra se reduce notablemente, hasta un 0,7 por ciento.
Además, han aclarado que este porcentaje depende de distintos factores, como la edad, el sexo y las condiciones de salud en que se encuentra el paciente. Por ejemplo, sólo el 3 por ciento de los casos ocurre en menores de 20 años, y la mortalidad en menores de 40 años es solo del 0,2 por ciento.
“Está afectando muy poco a los niños y esa es una buena noticia para las mamás porque, en realidad, en los niños la tasa de contagio es muy baja y en el mundo la mayoría de los casos han sido muy leves”,explicó en conversación con Diario y Radio Universidad de Chile, el secretario nacional del Colegio Médico, José Miguel Bernucci.
Según los datos de la Comisión Nacional de Salud de China, la proporción de pacientes recuperados y dados de alta del nuevo coronavirus llegó en marzo a alcanzar un 52,1 por ciento. Aseguran que esta cifra sigue en aumento. Foto: News.cn.
Según la información epidemiológica de cientos de casos recabada por el Consejo Nacional de Investigación de Italia (CNR, por sus siglas en italiano), los síntomas causados por la enfermedad son imperceptibles, leves o moderados en el 80 al 90 por ciento de los casos. En el 14 por ciento puede causar neumonía grave y sólo en un cinco por ciento de los casos puede llegar a ser crítica o mortal.
“Lo que ha destacado es que los casos más graves, más complejos y de mayor mortalidad se han concentrado en los adultos mayores, en su mayoría mayores de 75 años, especialmente en mayores de 70 y con mucha agresividad en los mayores de 85 años”, añadió el médico.
El CNR ha estimado que en el 10 a 15 por ciento de los casos puede desarrollarse una neumonía, pero la evolución es positiva en la inmensa mayoría. Así también, la misma institución señaló que sólo el 4 por ciento de los pacientes deben ser hospitalizados en unidades de cuidados intensivos.
Una historia que se repite
Los médicos y científicos que han estudiado la enfermedad han sido enfáticos en que tiene que primar la calma, ya que ésta no es una situación muy distinta a las que se han vivido antes con otros brotes, como por ejemplo las que se vivieron a nivel mundial con la gripe H1N1, el Síndrome Respiratorio Agudo Grave (SARS) o incluso el virus Ébola.
Este último, por ejemplo, fue controlado a través de la respuesta más efectiva que ha logrado elaborar la humanidad para combatir este tipo de enfermedades infecciosas: las vacunas y medicamentos antivirales. Según el director general de la OMS, Tedros Adhanom, hoy en día se están desarrollando más de 20 vacunas contra el coronavirus y ya está en marcha el primer ensayo clínico de un medicamento antiviral.
En otros casos, como el del SARS, sólo basta un cambio de hábitos en la ciudadanía. Este virus -otra cepa de coronavirus- llegó a su fin a mediados de 2003 y según expertos de la Universidad de Hong Kong se debió a las buenas prácticas de higiene, las que se sumaron a un cambio en la temperatura y humedad con la llegada de los meses de verano. Cabe destacar que, al igual que el SARS, este nuevo coronavirus puede ser inactivado de las superficies simplemente con alcohol gel. Es por esto que el lavado de manos frecuente con agua y jabón es la manera más eficaz de evitar el contagio.
También los virus pueden mutar a medida que cambia la temperatura y humedad del ambiente. Así sucedió en el caso de la gripe H1N1, que en 2009 fue declarada una pandemia y las alarmas se encendieron a nivel mundial. Finalmente, ésta terminó convirtiéndose en un virus “de estación” que aparece en el frío del invierno y apunta a las edades más vulnerables. En ese sentido, el secretario nacional del Colegio Médico, Dr. José Miguel Bernucci, explicó que la situación actual con este nuevo coronavirus se ve más auspiciosa.
“Tuvimos la experiencia el año 2009 con la H1N1, en donde hubo una explosión de casos en muy poco tiempo y con muchos pacientes graves. Yo creo que, afortunadamente, el Sistema de Salud aprendió, todavía tenemos memoria de lo que pasó ahí y por lo tanto, yo creo que estamos mejor preparados que en ese entonces”, tranquilizó el secretario nacional del Colegio Médico.
Y es que, hasta el momento, en el país se han dispuesto más de 50 centros de referencia o denominados ‘Centinela’ para atender eventuales pacientes, los que han sido reforzados y preparados durante las semanas previas para abordar la enfermedad. Además, se han dispuesto 12 laboratorios habilitados para identificar el COVID-19. Estas medidas, según los expertos, dejan a Chile mejor preparado que en cualquier otro momento.
Dentro de China, donde se originó el COVID-19, la tasa de mortalidad está entre el 2 y el 4 por ciento. No obstante, fuera del país asiático esta cifra se reduce notablemente, hasta un 0,7 por ciento. Fuente: BBC.
El rol de los medios de comunicación
Entre las noticias sobre nuevas mutaciones, nuevos casos confirmados, nuevos países afectados y nuevas muertes relacionadas al virus, poco aparecen las cifras que demuestran una realidad que ha sido desestimada: la mayoría de la gente se cura.
Según los datos de la Comisión Nacional de Salud de China, la proporción de pacientes recuperados y dados de alta del nuevo coronavirus llegó en marzo a un 52,1 por ciento y sigue en aumento.
Sin embargo, el miedo y la inquietud han permeado a la ciudadanía, dejando en evidencia el desconocimiento que existe sobre el panorama completo. Para la médica infectóloga del Hospital Clínico de la Universidad de Chile, Jeanette Dabanch, una de las razones de este alarmismo tiene que ver con la cobertura que han realizado los medios de comunicación.
“La preocupación de la ciudadanía está muy relacionada también a lo que hemos visto en las noticias. Lo que ha sucedido especialmente en China, en donde vimos estos cuarentenamientos (sic) importantes en las ciudades”, señaló la infectóloga de la Universidad de Chile.
“Eso probablemente ha preocupado a la comunidad, como probablemente es lo lógico, pero la situación en nuestro país es totalmente diferente porque hemos tenido estas semanas para preparar la respuesta, para ir conociendo y adquiriendo más información sobre este virus”, aseguró Dabanch.
Cabe destacar que, en términos de prevención, el consejo básico de la OMS es que uno puede protegerse de todos los virus respiratorios lavándose constantemente las manos con agua y jabón, evitando a las personas que tosen y estornudan; y al hacerlo, cubrirse la boca y nariz con pañuelos desechables, para luego eliminarlos.
En caso de presentar síntomas, dirigirse al Servicio de Urgencia más cercano y alertar sobre posibles viajes y su estado de salud. También está disponible durante las 24 horas del día el número de Salud Responde (600-360-7777).
*Foto en portada: AFP (referencial).
Hasta el momento, se han dispuesto más de 50 centros de referencia para atender eventuales pacientes, los que han sido reforzados y preparados para abordar la enfermedad. Además, se han dispuesto 12 laboratorios habilitados para identificar el COVID-19. Foto: Seremi RM.
