Este fin de semana el Gobierno, los partidos de oficialismo y tres de la oposición concluyeron las conversaciones que venían dándose desde hace dos semanas en torno a un acuerdo prelegislativo para un plan de emergencia para la protección de las familias y con especial énfasis en la reactivación económica. Encabezados por el ministro de Hacienda, Ignacio Briones, los equipos de parlamentarios, economistas, dirigentes sociales y otros actores de la sociedad llegaron a un compromiso que permitirá la creación de un fondo de USD 12 mil millones para las medidas a implementar en los próximos 24 meses de combate contra la pandemia.
El Partido Socialista, el Partido Por la Democracia y la Democracia Cristiana fueron los únicos partidos de la oposición que terminaron sentados en una mesa que también contó con la participación del Partido Radical y Revolución Democrática, pero ambos se terminaron restando. Estos últimos, los únicos representantes del Frente Amplio que fueron convocados a los diálogos, se retiraron de las conversaciones por no llegar a su mínimo: un Ingreso Familiar de Emergencia que abarcara la línea de la pobreza. Una posición que se había conversado dentro del Frente Amplio con todos los partidos que lo conforman, y que se extendió al resto de la oposición logrando un pacto tácito para empujar ese planteamiento. Sin embargo, esto no se logró y las consecuencias fueron que Briones terminara sellando el compromiso con sólo tres partidos de oposición. Todos de la ex Nueva Mayoría y ninguno del Frente Amplio.
Desde la colectividad, la diputada y presidenta de Convergencia Social (CS) -segundo partido más grande del Frente Amplio-, Gael Yeomans, conversó con Diario y Radio Universidad de Chile sobre el devenir de las conversaciones que lideró Hacienda y a las que no fueron convocados como partido. “Me hubiera gustado que hubiese sido más amplio y con distintas miradas, pero esto va a ingresar al Congreso y éste no es un buzón del Gobierno. No es simplemente llegar, entregar los proyectos de ley y que éstos se aprueben. Por eso mismo vamos a revisarlos con exhaustividad y creo que eso se pide para todas las fuerzas políticas, sobre todo de la oposición”, sostuvo la parlamentaria y representante de CS.
Convergencia Social no participó de los diálogos previos, pero como parlamentaria y autoridad política, ¿cómo vio el desarrollo de las conversaciones y lo que finalmente se logró con este acuerdo?
“A nosotros no nos invitaron a ese acuerdo nacional. Yo creo que ahí el Gobierno más bien generó un espacio a la medida, un espacio más restringido, lo que impide igual el aporte de todos los sectores. No lo digo sólo por los sectores políticos que fuimos excluidos sino que también los sectores sociales. Más allá de eso, más allá de que se haya generado de esa manera, respecto del contenido que se ha ido conociendo de este acuerdo, me parece que tiene distintas dimensiones: en primer lugar hay una dimensión que tiene que ver con los aportes directos hacia las familias, en eso nosotros desde el Frente Amplio, y distintos actores del mundo gremial, sindical e incluso en materia sanitaria, han señalado la necesidad de aumentar los recursos económicos directos hacia la población. Creo que esa presión tiene incidencia tal que una de las consecuencias es que este acuerdo aumenta esos ingresos y aumenta la cobertura”.
Se pretendía llegar a la línea de la pobreza y no se pudo…
“Claro, a pesar de ser insuficiente, porque nosotros llegamos a un acuerdo con el resto de los partidos de la oposición que era un mínimo de superar la línea de la pobreza. Para poder tener recursos suficientes para sobrevivir, es una canasta básica, son los gastos básicos que tiene una familia y sin embargo no logramos llegar a esa cifra. Pero aún así creo que es un aumento que siempre va a ser bienvenido, sobre todo en las circunstancias que estamos viviendo. Sí lamento que el Gobierno llegue tarde a esto, porque las cuarentenas y la situación que estamos viviendo en materia de contagios es ya una situación bien crítica y podríamos haber tomado medidas con antelación en materia sanitaria y económica, por ejemplo ésta, que nos hubiera permitido enfrentar de mejor manera la pandemia. Sin embargo, se llega tarde”.
¿Es éste un buen acuerdo?
“Hay temas del acuerdo que para nosotros son de preocupación y que tienen que ver con esta agenda de reactivación económica. Ahí creemos que son dos ámbitos distintos: una agenda de reactivación económica que, además, genera compromisos a futuro, pero en donde cabe la duda de quién va a pagar la deuda. ¿La van a pagar las y los trabajadores? Como las medidas del Seguro de Cesantía o las medidas que se han planteado para los trabajadores a honorarios, en donde se entregan recursos económicos por parte del Estado, pero los trabajadores van a tener que devolverlo en un tiempo más ya sea mediante sus cotizaciones del Seguro de Cesantía o mediante esta suerte de préstamo que el está entregando el Estado a los trabajadores a honorarios, que es un proyecto que ya habían presentado en el Congreso y que se ve complementado con este acuerdo nacional?”
¿Pero hay disposición para aprobar algunos de los proyectos de ley que surjan de este acuerdo?
“Todos los proyectos que impliquen recursos económicos directos hacia las familias, obviamente que vamos a aprobarlos. Cuando se habla de la situación crítica que estamos viviendo es porque se requiere hoy día un apoyo económico más sustantivo y en eso obviamente vamos a apoyar. Vamos a impulsar porque sea más, nunca vamos a dejar de empujar por ello, pero sí vamos a apoyar como ya lo hemos hecho en otras ocasiones con los otros proyectos ingresados por el Gobierno en esta materia.
Yo creo que hay que revisar, y nosotros vamos a hacer eso, vamos revisar cada uno de los proyectos de ley que ingresen con detalle, pero todos los que generen un beneficio económico directo para las y los trabajadores obviamente que vamos a apoyarlos”.
¿Y en dónde están las mayores preocupaciones de su sector respecto de este acuerdo?
“Todos los que tienen que ver con la agenda de reactivación económica o la ampliación de este Seguro de Cesantía, por ejemplo se señala que se quiere entregar a madres o padres trabajadores de hijos preescolar, que la verdad no queda claro si con eso están respondiendo de alguna manera al proyecto de extensión del post-natal, a mi me parece que no se responde. Lo hemos dicho, no se debería utilizar la ampliación del Seguro de Cesantía para eso porque genera varios problemas.
Entonces, la verdad es que cabe esa pregunta y creo que es una inquietud bien importante, sobre todo cuando estas medidas de reactivación económica se basan en tener una visión ideológica que no cambia y que está detrás de esto. A mí me parece que es preocupante que mediante una lógica de subsidios a la contratación o mediante la lógica de créditos se piense que vamos a poder salir de los impactos económicos que va a generar esta crisis, cuando vemos que en otras partes del mundo son otras las lógicas en materia de reactivación económica que han primado, en donde el Estado asume un rol más preponderante en la economía porque, bueno, es su rol frente a una pandemia como la que estamos viviendo”.
¿Qué es lo que no convence o lo que más preocupa de esta agenda de reactivación?
“Nos genera harta preocupación esta agenda de reactivación económica, creemos que hay compromisos a futuro y que se generan en el marco de este modelo sin tener un rol más preponderante por parte del Estado. Se evalúan algunas formas de participación que creo que no son del todo claras, porque también se manejan otras y en donde lo más preponderante que uno ve con las medidas tiene que ver con el Estado apoyando créditos a las empresas y medidas similares que la verdad solamente profundizan un modelo existente y que, creemos, no es la forma de responder a esta crisis”.
¿Están dadas las condiciones para apoyar el acuerdo?
“En general, con la situación que estamos viviendo, tan crítica, hoy día no están las cosas para un apoyo a ciegas. Debemos revisar la letra chica del texto, porque ya nos han sorprendidos en otras ocasiones con proyectos de ley que en los titulares suenan muy bien, pero que en su desarrollo vienen con letra chica, con impacto para la gente al presente y al futuro, y en eso nos parece que, por responsabilidad con la ciudadanía, tenemos que tener un ojo bien exhaustivo en la mirada de los proyectos”.