Este lunes en la sede de Gobierno el Presidente de la República, Gabriel Boric, encabezó la ceremonia de promulgación de la ley que reajusta el salario mínimo a 380 mil pesos desde el 1 de mayo, a 400 mil pesos a partir del 1 de agosto y a 410 mil pesos en enero del 2023 en el caso que la inflación acumulada en doce meses supere el 7 por ciento.

La ley que radica en el reajuste nominal más alto de los últimos 29 años, nace del acuerdo entre los ministerios de Hacienda, Economía y Trabajo con la Central Unitaria de Trabajadores y entrega una subvención de 22 mil pesos por trabajador/a a pequeñas y medianas empresas para el pago de nuevos sueldos y de 26 mil pesos en el segundo tramo. Además incrementa y subsidia el Aporte Familiar, el Subsidio Único Familiar y los subsistemas “Seguridades y Oportunidades” y “Chile Solidario”. 

En la instancia, el mandatario agradeció a los gremios, a las empresas y al parlamento -que despachó la ley el pasado 18 de mayo- su voluntad de viabilizar el reajuste, señalando que si bien “siempre se dice que podemos discrepar en algunas formas, podremos tener debates complejos, pero cuando nos ponemos de acuerdo sacamos lo mejor de nosotros mismos”. 

“Lo que estamos impulsando son acuerdos que vayan en beneficio de todos los ciudadanos de nuestro país y para eso requerimos el concurso de las grandes empresas, la participación y que no se queden atrás las pymes, requerimos la voluntad y el compromiso de todos los integrantes de nuestro gobierno y la posición transversal del Parlamento”, sostuvo en su alocución.

Por otro lado, el Presidente reconoció que el reajuste del salario mínimo no hubiese sido posible sin el aporte de las administraciones anteriores. “Acá como Gobierno, como Presidente no podemos solazarnos de esto como si fuera un logro sólo nuestro porque esto se hizo sobre la base de lo que en su momento construyeron Aylwin, Frei, Lagos, Bachelet, Piñera y los diferentes Gobiernos con los esfuerzos que pudieron hacer en su momento”. 

Por su parte, la presidenta de Unapyme, Giagina Figueroa, valoró que por primera vez se incluyera a las pequeñas y medianas empresas en la construcción de políticas públicas y en ese sentido relevó la necesidad de continuar el trabajo mancomunado considerando que “ni más ni menos que más de 6 millones de personas se relacionan con las empresas de menor tamaño”.

“Históricamente a lo largo de la democracia hemos ido perdiendo sistemáticamente mercado y eso le hace pésimo al país porque finalmente la riqueza está en muy pocas manos y hoy día enfrentamos distintos conflictos y estamos muy lejos de alcanzar la paz social si efectivamente no repartimos de mejor manera. Por lo tanto este diálogo que hemos logrado construir no exento de diferencias pero con mucha colaboración, creo que tiene que ser un ejemplo para lo que vayamos a poder dialogar en el futuro”, señaló.

A su vez, el presidente de la Central Unitaria de Trabajadores, David Acuña, consideró este como un día histórico y en eso valoró la oportunidad que concedió a la CUT el Gobierno de manifestar la disposición dialogante de los y las trabajadoras.

“Nosotros como dirigentes sindicales somos entes dialogantes, pero también creemos en la movilización, esperamos hasta el último, siempre conversando, siempre entendiendo, siempre tratando de avanzar, si uno da un paso avanza y lo peor que nos puede pasar es quedar estancados. Nosotros creemos que hoy día hemos avanzado y avanzado bastante”, relevó.

(Fotografía de @totiorellanag).