Joe Biden aterriza en Israel este miércoles 13 de julio para encontrarse con el primer ministro Yair Lapid. El país hebreo el timón está en manos de un jefe de gobierno novicio y temporario y las elecciones generales que podrían volver a instalar a Benyamin Netanyahu en el poder se celebrarán el próximo mes de noviembre.
Después de ser recibido en el aeropuerto Ben Gurión, el presidente de Estados Unidos será transportado al Museo del Holocausto Yad Vashem en Jerusalén, donde depositará una corona de flores junto al fuego eterno acompañado por el presidente israelí Itzjak Herzog.
Los temas en su agenda israelí serán fundamentalmente la economía, la crisis energética y el acuerdo nuclear con Irán.
En su primera visita como presidente de Estados Unidos después de más de veinte visitas como senador, Biden visitará Jerusalén este y se reunirá con el presidente de la Autoridad Palestina Mahmud Abbas en Belén, a pesar de que no podrá proporcionarle siquiera un atisbo a una apertura diplomática que conduzca al fin del conflicto palestino-israelí.
“Estos reclamos requieren al menos cuatro o cinco días de conversaciones”
La Autoridad Palestina ha presentado cinco peticiones al presidente estadounidense: el restablecimiento de un horizonte político, la reapertura del consulado estadounidense en Jerusalén este, mayor presión sobre los israelíes, el restablecimiento de la ayuda financiera y la retirada de la Organización para la Liberación de Palestina de la lista de organizaciones terroristas. Pero en Cisjordania tienen pocas esperanzas de que prosperen.
“La visita de Biden no aporta realmente nada bueno. Estos reclamos requieren al menos cuatro o cinco días de conversaciones continuas para ser atendidos”, explica a RFI Dimitri Diliani, miembro del consejo revolucionario del oficialista partido Fatah.
“Su objetivo es claramente intentar crear una alianza militar y de inteligencia entre Israel y ciertos países árabes en detrimento de los palestinos”, afirma por su parte Mustafa Barghuti, secretario general y cofundador de la Iniciativa Nacional Palestina. Considera que solo reforzará el statu quo y el sistema de ocupación israelí.
El presidente de Estados Unidos partirá el viernes a Arabia Saudita, su principal destino en Oriente Medio. Israel espera que el vuelo directo entre ambos países sea también el anticipo de una apertura diplomática y una cooperación estratégica abierta entre Jerusalén y Riad.