Parlamentarización y reacomodo de las fuerzas políticas: los factores detrás de la coordinación de centroizquierda en la Cámara

Expertos apuntaron al plebiscito del pasado 4 de septiembre como uno de los factores principales y destacaron la importancia de este hecho para la reconstrucción de espacios más moderados.

Expertos apuntaron al plebiscito del pasado 4 de septiembre como uno de los factores principales y destacaron la importancia de este hecho para la reconstrucción de espacios más moderados.

Con el objeto de reivindicar los idearios de la centroizquierda fue que un grupo de diputados  anunció este miércoles la conformación de una coordinadora político-legislativa, de manera de enfrentar las diversas problemáticas coyunturales que atraviesa el país.

Sin embargo, descartaron que la instancia implique una alteración para las coaliciones de Gobierno, especialmente para Socialismo Democrático, el cual contempla la presencia del Partido Socialista, pero que- a diferencia de sus pares- de momento no forma parte de esta nueva agrupación.

Al respecto, el analista y director de estudios sociales y política de Azerta, Camilo Feres, afirmó que este hecho supone una “reparlamentarización de la política”, que tiene que ver con “los esfuerzos que los grupos y partidos hacen para ser considerados e incidentes”.

“Hay algunos que van a tratar de ser incidentes por la vía de generar bloques, que es lo que estamos viendo acá, y otros que intentarán ser incidentes por la vía de tener capacidad de veto”, explicó, aludiendo a la mesa de trabajo paralela anunciada ayer por parlamentarios del PDG, Republicanos, independientes y un sector de la DC, encabezado este último por los senadores Ximena Rincón y Matías Walker.

Sin embargo, respecto del papel de la Falange en esta coordinación de centroizquierda, Feres señaló que responde más bien a una fórmula en que la DC “se integra sin tener que integrarse” al oficialismo, dado a partir del resultado del plebiscito del 4 de septiembre.

“Viene un segundo momento que es el momento constituyente, donde la Democracia Cristiana, más allá de las figuras que se fueron, institucionalmente estuvo con el Apruebo, por lo tanto, tienes un corte que se corre otro lugar más del casillero y eso hoy día no tiene expresión dentro del Gobierno, pero va a tener que tener una cierta expresión dentro del oficialismo, yo creo que esto es parte de ese proceso”, afirmó.

Por lo que para el analista “estos son avances y retrocesos de un esfuerzo por establecer un límite que alcance parlamentariamente para administrar el Gobierno. El Gobierno hoy día es minoría si se toman los partidos que pertenecen a su coalición, es minoría en el Parlamento, y si se toma la última votación que la del plebiscito constituyente es más minoría aún, por lo tanto, requiere una reformulación de esa estructura”.

Una opinión similar manifestó el académico de la Escuela de Gobierno de la Universidad Central, Luis Jiménez, quien señaló que “los acontecimientos del último período, que abarcan desde el estallido social, sobre todo con el resultado del 4 de septiembre, tienden a generar un reacomodo de las fuerzas políticas, pero habría que decir también que ese no es un llamado de los partidos como instituciones de la República, es decir, como entes formales que acuerdan ciertas coaliciones para avanzar en búsqueda de objetivos políticos. Este es un llamado de diputados y de no todos los diputados de esos partidos (pertenecientes a la ex Concertación)”.

Asimismo, planteó que “el Partido Socialista pudiese estar más ordenado institucionalmente y por eso no concurren sus diputados o algunos de esos diputados a esa coordinación de centroizquierda”.

Por lo que consideró importante que los partidos que integran esta nueva coordinación político-legislativa transparenten su postura institucional “en torno a cómo se sale en términos de la salida institucional en la constitución y en los esquemas de Gobierno”.

“Estamos en un momento de definiciones bien importantes para lo que es el futuro del país en términos de su ordenamiento político. Entonces, uno podría esperar que fuesen los partidos que tuviesen definiciones más institucionales y luego sus mandatarios a operar. Por lo tanto, si hay grupos intermedios en las estructuras de poder como son en este caso diputados y diputadas que forman coaliciones, que eso es natural y se dan también en una época también de definiciones pos plebiscitarias, es inevitable, pero desordena”, añadió Jiménez.

En tanto, en conversación con la primera edición de Radioanálisis, el doctor en Ciencia Política y académico del Departamento de Sociología de la Universidad de Chile, Octavio Avendaño, aseguró que “es normal que se produzcan estos reacomodos de las fuerzas políticas sobre todo cuando existe la oportunidad de llenar algunos espacios, como lo es el centro político. En ese momento nuestro espectro político, que es bastante diverso, se caracteriza porque el centro propiamente tal está o ha estado en los últimos años un tanto huérfano, entre otras cosas, por el debilitamiento de la Democracia Cristiana o por el debilitamiento que experimentaron otras fuerzas políticas que en el pasado tuvieron un rol más o menos protagónico y tuvieron una representación más contundente en el Congreso Nacional”.

Asimismo, sostuvo que el plebiscito constitucional “refleja o significa esa oportunidad. Muchos lo ven como una oportunidad para las fuerzas más moderadas, la posibilidad de reconstruir un centro debilitado y, en ese sentido, personalmente no me haría mayor problema respecto de esta nueva fuerza porque en el fondo están llenando un espacio que es necesario llenar, de lo contrario siempre se corre el riesgo de que estos espacios sean llenados por otras fuerzas políticas de la centroderecha o simplemente de la derecha”. 





Presione Escape para Salir o haga clic en la X