Partidario de modificar el sistema de nombramiento de los fiscales nacionales y donde no participe en Senado, se mostró el legislador socialista, Juan Luis Castro, luego de la fallida designación de Marta Herrera para suceder a Jorge Abbott en la Fiscalía Nacional.

Tras una jornada marcada por el segundo fracaso en la designación de un fiscal para encabezar el Ministerio Público, el oficialismo criticó el papel de la derecha de desperfilar las competencias de Herrera antes de ser escuchada.

En opinión del senador Castro, “hay que modificar el sistema de nombramientos porque se ha politizado en exceso. No puede ser que haya partidos como la UDI que desacreditan antes siquiera de escuchar a la candidata. No es posible tampoco que haya senadores que presionan al Gobierno sólo por un candidato propio y la Corte Suprema deberá hacer un trabajo más fino al momento de seleccionar la esquina”.

El legislador indicó que todo esto  “podría hacerse incluso sin la participación del Senado que sería también razonable. En eso baso mi punto de vista para que esto se pueda regularizar y podamos tener, ojalá,  fiscales nombrados con mucha independencia y en orden al mérito y la carrera profesional”.

Sobre el mismo tema también se refirió la senadora, Alejandra Sepúlveda, quien lamentó que se haya caído la candidata, “una mujer con mucha experiencia que además, tuvo una respuesta brillante en la Sala del Senado y además, es una mujer que presentaba un liderazgo interesante para la fiscalía. Lo vimos venir, no existían los  votos y además, con un tremendo prejuicio porque los y las senadoras habían planteado antes de escuchar la propuesta, que se iba a rechazar su nombre”.

Sepúlveda indicó que el sistema de nombramiento entró en crisis “después de dos intentos fallidos y hay que transparentar cómo se hace en la Corte Suprema, cuáles son los factores que se determina y cómo se vota y los distintos argumentos que tienen los distintos jueces  y creo que es innecesario que se involucre al Senado en este proceso”.

Por su parte, el senador PPD, Jaime Quintana, afirmó que Herrera era la persona con menos redes políticas y “eso le pasó la cuenta y eso, que debiera ser una fortaleza en cualquier democracia, en cualquier institución seria, aquí fue un problema, porque probablemente algunos senadores querían un fiscal a la carta, un fiscal a quien tomar el teléfono para llamarlo. La pregunta es para qué un senador necesita tanta cercanía con un fiscal, cuando tenemos hoy día el crimen organizado desatado, cuando se formularon como nunca antes un conjunto de propuestas detalladas, concretas, con plazos determinados para hacernos cargo de la frontera norte, sin embargo, eso no fue suficiente incluso para parlamentarios de derecha de la zona norte”.

El legislador afirmó que con este fracaso, “no pierde el gobierno del Presidente Boric, tampoco el Senado, aunque tiene responsabilidad, pierde el país porque, como dijeron algunos expertos, esta es una situación de máxima urgencia, no resiste más tener a la Fiscalía descabezada como la tenemos hoy”.

En la jornada también el Presidente Gabriel Boric indicó que “hubo bancadas completas que anunciaron su voto en contra a la propuesta que hice como Presidente de la República antes de la presentación de la candidata a Fiscal Nacional”.

Por su parte, la ministra del Interior, Carolina Tohá, indicó que “cuando el crimen organizado ve debilidades en las instituciones del Estado -y permítanme decirles que creo que lo que ha hecho el Senado ayer es demostrar una debilidad en materia de la Fiscalía Nacional-, se termina facilitando la acción de los delincuentes. Y eso es algo que no podemos permitir“.

En esa línea, Tohá recalcó que “el Ejecutivo no va a apartarse ni un milímetro de lo que ha dicho el Presidente de la República, en el sentido de que el debate, o el proceso para la definición de quién va a encabezar el Ministerio Público hacia el futuro, está enfocado en un resultado exitoso y en tener una persona idónea para el cargo”.

“No vamos a ser parte de ninguna querella menor, no vamos a enganchar con ningún tipo de epíteto que pueda utilizarse. Pero al mismo tiempo, vamos a insistir y a ser muy rigurosos en que ese objetivo que nos hemos puesto no quede sacrificado por las dificultades que se están enfrentando”, agregó.

Además, la secretaria de Estado subrayó que “participan distintos poderes del Estado en este proceso. En primer lugar la Corte Suprema, que elabora la quina y que cuando sucede como en la actualidad que queda incompleta, decide cómo seguir adelante”.

“En segundo lugar el Ejecutivo, que de esa quina, presenta un nombre al Senado, y en tercer lugar, el Senado, que decide si aprueba o no por un quórum muy elevado, que es de dos tercios”, complementó.

De esta manera, enfatizó que “a nosotros nos corresponde hacer nuestra parte. La Corte Suprema va a tener que decidir cuál es la manera en que rellena -digamos- la propuesta al Ejecutivo para la próxima ronda de definiciones”.