Una crítica evaluación realizó el senador de la Democracia Cristiana, Iván Flores, sobre las últimas controversias en las que se ha visto envuelto el Gobierno, a propósito de los indultos concedidos por el presidente Gabriel Boric a 12 presos del denominado estallido social y al ex frentista Jorge Maturana. Un hecho que le valió la salida de Chile Vamos de la mesa transversal de seguridad y la presentación de una acusación constitucional contra la ministra de Justicia, Marcela Ríos.

A juicio del legislador fue “inoportuna” la decisión del mandatario de anunciar este beneficio en momentos en que se estaba por llegar a un acuerdo en materia de seguridad con la oposición, por lo que afirmó que esta acción fue “rebalsar el vaso sencillamente”.

Asimismo, consideró que “ha habido un poquito de histeria al interior del Gobierno a través de algunos representantes, dichos en contra del propio Congreso, particularmente el Senado, (que) generan un ambiente muy difícil y esto se ha aprovechado por parte de la derecha para acusar a uno, dos o hasta tres ministros”.

En ese sentido, planteó que “no es un buen escenario desde el punto de vista político, yo creo que va a haber un afán en la derecha por concretar estas acusaciones constitucionales, pero- hay que decirlo, el Gobierno no ha puesto nada de su parte para morigerar estas amenazas que ya se habían hecho saber y se concretan producto de lo que ha estado pasando esta semana particularmente”.

Con todo, destacó que pese al retiro de Chile Vamos de los diálogos en la mesa de seguridad, no se resten del debate en el Parlamento. “Lo que han dicho es se termina la mesa y ahora nos entendemos en el Congreso Nacional, que es donde radica la función legislativa. Lo que estaba ocurriendo era un trámite más bien de búsqueda de un acuerdo previo para que el trámite legislativo sea más expedito y ya con acuerdo firmado, algo como lo que pasó con el acuerdo constitucional”, expresó.

Proceso constituyente: “Sigue siendo una prioridad nacional”

Por otra parte, descartó que este impasse entre el Ejecutivo y la oposición pueda perjudicar el avance de la reforma que habilita un nuevo proceso constituyente, manifestando que, salvo excepciones como el Partido Republicano, “la gran mayoría entendemos que sigue siendo una prioridad nacional, aunque claramente hoy día la seguridad la ha desplazado en términos de interés. Si ya partimos con este proceso, terminémoslo con una buena constitución, tomando lo bueno del proceso fallido anterior y sacando lo que no le gustó a la mayoría de los ciudadanos y se corrige”.

No obstante, fue enfático en señalar que el proceso anterior dio pie “a un ambiente complejo porque al final de cuentas lo que generó fue cierta desafección, escepticismo y también cierto desencanto para quienes impulsamos este proceso. Creo que algunos convencionales no entendieron lo que era una nueva constitución y los límites que también tenían que tener o las preguntas que tenían que hacerse a quienes se estaba beneficiando o afectado”.

Pese a dichas circunstancias, defendió que “hoy día sigue siendo una muy amplia mayoría la gente que queremos una nueva constitución y, en ese escenario, yo creo aquí no hay vuelta atrás. El acuerdo se firmó, costó tres meses lograr alcanzarlo, pero finalmente se suscribió. Ahora tenemos un cronograma y la cosa ya partió”.

En cuanto a los candidatos que sondea la DC para integrar el futuro Comité Experto, el senador Iván Flores reconoció que ha habido dificultades, dada la profunda crisis que atraviesa la colectividad y que ha estado marcada por la renuncia de emblemáticos militantes.

“Ese es un tema que la Democracia Cristiana tiene que enfrentar rápidamente, tiene que definirse dónde va a estar claramente el peso político, en la centroizquierda, en el centro, en la izquierda, dónde. En ese escenario tiene que competir con los que están ocupando esos espacios y eso es lo que también tiene confundida a la militancia, molestos a algunos, esperanzados a otros. Eso es algo que debe hacerse con prontitud”, puntualizó el parlamentario.