La denuncia por violación interpuesta en contra del ex subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, generó un remezón dentro del Gobierno. En especial, luego de que se dieran a conocer una serie de detalles que hoy tienen a la otrora autoridad en medio de una investigación que también considera una posible obstrucción a la justicia.
“Este caso es gravísimo y nos obliga a poder centrarnos en dos cosas que son muy relevantes. Primero, el esclarecimiento de todos los hechos y la determinación de culpables, pero también de todo lo que se hizo mal en el caso Monsalve y que requiere de una investigación profunda sin defensas corporativas que permita tener toda la verdad”, comentó la presidenta del Frente Amplio, Constanza Martínez, en conversación con Radio y Diario Universidad de Chile.
“Y en un segundo lugar -sumó la timonel del partido del Presidente Gabriel Boric-, la protección a las víctimas”. En ese contexto es que valora especialmente el trabajo que ha tenido la ministra de la Mujer, Antonia Orellana, a lo largo del actual período presidencial.
“Ha tenido un rol importante al ejemplificar que este tipo de delitos, los sexuales, son de los más difíciles de denunciar. Porque, de hecho, hay una reacción de la sociedad que hemos visto durante estos días de enjuiciamiento, de revictimización a la denunciante, que hace que tengamos el deber, como política, de hablarle a la ciudadanía y sobre todo a las mujeres que hoy son víctimas de violencia de género y sexual, para que se atrevan a denunciar”, aseguró.
“La ministra ha ido poco a poco explicando, por ejemplo, todas las garantías que se han avanzado en función de la Ley Antonia que se impulsó en este Gobierno, y que tiene que ver con la garantía del sistema de salud. Todas las personas tienen derecho, en caso de ataque sexual, al sistema GES para hacerse los exámenes. Lo mismo con la protección al proceso judicial y la no revictimización en el Servicio de la Mujer en términos de apoyo jurídico”, agregó Martínez.
En esa misma línea, manifestó su apoyo a Orellana en medio de las críticas por una reciente intervención en los medios, donde realizó una analogía entre Monsalve y un portero para enfatizar la importancia del cargo del exsubsecretario. Dichos que han sido catalogados como “clasistas” por parte de la oposición.
“Lo que dijo la ministra no buscaba desmerecer otros delitos, sino decir que, precisamente, no se trata de cualquier hecho porque es un subsecretario que estaba a cargo de las policías. Por lo tanto, el tema de las pruebas y las cámaras no era menor, y como cargaba la responsabilidad de estar a cargo de las policías era de mucho más cuidado el proceso de investigación interna”, explicó Martínez.
Por eso, aseguró que “hubo una tergiversación de lo que quiso decir la ministra. Yo me quedaría con todo el proceso que se ha hecho, de pedagogía y profundización en términos de la perspectiva feminista para poder abordar este caso”.
“Durante estas jornadas también hemos visto una cara de aprovechamiento respecto a este elemento que me parece que ha sido bien bajo. Ayer tuvimos acceso a publicidades que hacían analogías respecto al tema pensando en las elecciones. O sea, un nivel de bajeza en la discusión de un tema que, a mi juicio, es de los más graves, y que requiere un nivel de seriedad para ser abordado que al menos yo he echado de menos”, determinó.
Agenda de seguridad
Otro elemento abordado por la presidenta del Frente Amplio tiene que ver con la afectación que podría producir el caso Monsalve en la agenda de seguridad del Gobierno: “Todos los elementos que han ido surgiendo sin dudas son de una gravedad máxima porque, en el fondo, se traicionó la confianza no solo del Presidente y del Gobierno, sino de todas las personas que veían en su figura a una persona que estaba preocupado de la seguridad. De hecho, este elemento, el de la violencia de género, es un elemento de seguridad”.
“Lo he dicho todas las veces: la seguridad requiere de una perspectiva de género que entienda este tipo de situaciones. Por lo tanto, creo que sí es muy costoso. Pero tenemos que tener la comprensión de que sobre cualquier individualidad, por más importante que sea, las instituciones tienen que primar. Sobre todo en la discusión de seguridad. Soy una convencida de que, como país, todavía estamos a tiempo, a pesar de toda la grave crisis institucional que se viene arrastrando hace tiempo y que tiene a muchos involucrados”, acotó la ex delegada presidencial de la Región Metropolitana.
“El caso audio significó una merma de confianza, por ejemplo, en el sistema judicial, en la Fiscalía, en exministros de Estado involucrados. Y tiene que ver también con la seguridad. Sin embargo, hemos visto instituciones que no se han autodefendido, como sí ocurre en otras partes del mundo. El Gobierno del Presidente Boric ha hecho un esfuerzo para que se sepa toda la verdad, para que se excluya al subsecretario. En el caso de la corte, hubo un cuaderno de remoción a la señora Vivanco. Por lo tanto, en vez de hacer una defensa corporativa, estas cosas salen a la luz”, reflexionó.
Por último, añadió que su convicción es que “tenemos que hacer todo lo posible para que este tipo de crisis no se escondan bajo la alfombra y permitan que reforcemos las capacidades de nuestras instituciones, y que no se hagan simplemente defensas corporativas. Lo hemos visto en otros casos donde se cree que se defiende a la institución cuando uno deja en cero la responsabilidad individual o cierra por arriba los casos. Creo que eso le hace un daño a la política y al país”.