La seguridad pública se ha tomado la agenda en los últimos años y las infancias y adolescencias no han estado ajenas. Esta semana un niño de 11 años murió en medio de una balacera en Peñaflor y un adolescente de 16 años fue herido de bala en Huechuraba.
El defensor de la Niñez, Anuar Quesille, analizó este escenario y aseguró que “los niños, niñas y adolescentes (NNA) se están quedando sin barrios“. “Ya no tienen una cancha donde hacer deporte de manera segura y sin miedo a que los maten”, lamentó.
De acuerdo a cifras del organismo encabezado por Quesille, en 2024 fallecieron 51 niños y niñas por armas de fuego, en 2023 fueron 42 muertes por el mismo motivo y 2022 hubieron 49. Con todo, el defensor de la Niñez aseguró que hay una tendencia al alza respecto a este tipo de homicidios que involucra a NNA desde 2017, lo que es bastante preocupante para la autoridad.
Sobre cómo responder a esta problemática y cómo afecta a la infancia, el defensor aseguró que la Política Nacional de Seguridad Pública tiene buenos puntos y buenas estrategias, pero “se debe aprobar y darle prioridad con sentido de urgencia”.
En ese sentido, sostuvo que hacerse cargo de la crisis de seguridad que enfrenta el país no debe traducirse en “partir desde el mundo adulto y lo que sobre para la niñez”. Por ello, explicó que si bien la política mencionada contiene un enfoque de NNA, las acciones deben partir con ellos.
La graves cifras recién mencionadas habría sido tema de conversación entre la Defensoría y Subsecretaría de la Niñez. Así, Quesille señaló que previo a la evaluación de cómo enfrentar riesgos, el desafío es cuantificar a los NNA, generar medidas para asegurar el derecho a la educación, a la recreación y, como paso posterior, generar política pública.
La autoridad adelantó que la próxima semana la Subsecretaría de la Niñez los citó a una reunión para presentar el plan que abordará los casos de NNA fallecidos por armas de fuego o fallecidos en contexto de violencia letal.
Por otro lado, se refirió al reciente recorte presupuestario afectó a las instituciones dedicadas a las infancias y comentó que están analizando el escenario.
Prohibición de redes sociales a menores de 14 años
Un grupo de diputados y diputadas presentó un proyecto para prohibir el uso de redes sociales a menores de 14 años como una medida para proteger la salud mental y el desarrollo de estas personas.
Al respecto, el Anuar Quesille aseguró que si bien hay una preocupación legítima “hay que tener cuidado con generar medidas que podrían producir un efecto que implica una traba para los derechos de los niños niñas y adolescentes”.
Asimismo, explicó que la Defensoría de la Niñez publicó una nota técnica sobre los riesgos de violencia que enfrentan en el espacio digital los NNA, tanto violencia sexual, como efectos en su desarrollo. “Hemos visto un aumento en la cifra de explotación sexual contra niños y niñas físicamente, pero también en entornos digitales y las cifras de ciberbullying”, advitirtió.
Ante este escenario, añadió que el mundo digital es inevitable, que llegó para quedarse: “El hecho de enfrentar eventualmente a niños y niñas con el mundo digital, después de los 13 años 364 días, puede generar una brecha en la información y en el desarrollo que podría ser un retroceso”.