El presidente de Estados Unidos reconoció a la ciudad como capital de Israel, lo que provocó un nuevo flanco en el conflicto. Xavier Abu Eid, politólogo y miembro del equipo negociador de la Organización para la Liberación Palestina, elucubró sobre lo que se podría empezar a pensar desde ese estado luego de esta decisión y el poco énfasis de las grandes potencias en rechazar el aviso norteamericano.
La Confederación Palestina Latinoaméricana y Caribeña (Coplac) se reunirá en Nicaragua para debatir sobre los caminos para fortalecer la solidaridad latinoamericana y caribeña con la causa palestina.
La reunión ha sido, simplemente, una etapa más en la constatación que Israel seguirá haciendo de las suyas mientras no exista la decisión de sancionar su acción criminal y bloquear sus actividades políticas y económicas. Para que Palestina sea, el sionismo debe desaparecer. Israel bajo los actuales liderazgos, con una sociedad mayoritariamente ciega, sorda y muda frente a la violación de los derechos del pueblo palestino, hacen imposible pensar en un retiro voluntario de la Ribera Occidental, lo que obliga a exigir, mediante todas las formas de lucha, su salida de tierras que no les pertenece.
Se ha dado a conocer que el lobby sionista presente en Rusia presiona al gobierno de Putin para aumentar los lazos, en los más diversos ámbitos, tal vez ello limite la injerencia directa de Israel en actividades bélicas en territorio sirio, libanés e iraquí , pero tal conducta no descarta, que de acuerdo al devenir de los acontecimientos, el sionismo decida participar e involucrase directamente en las batallas lo que traerá como consecuencia la inevitable colisión con el Eje de la Resistencia y por extensión con las fuerzas Rusas.
Los querellantes sostienen que los hechos presentados, como parte de la demanda, son constitutivos de crímenes de guerra y lesa humanidad y de los cuales son responsables los jueces Asher Gronis, Uzi Vogelman y Neal Hendel – nacido en Estados Unidos – Todos ellos dotados de un amplio prontuario de decisiones judiciales desfavorables a la defensa de los derechos del pueblo palestino sometido a la ocupación de las fuerzas sionistas e incluso la población árabe israelí. Jueces que le han dado apariencia de legalidad a hechos, que tanto en el ordenamiento chileno, como en el derecho internacional se califican como crímenes de guerra y lesa humanidad.
Miembros de la comunidad palestina en Chile se querellaron contra tres jueces de la Corte Suprema de Israel, acusando crímenes de lesa humanidad, debido a la decisión de los magistrados de anexar territorios palestinos al estado de Israel.
Se trata de una acción judicial sin precedentes, que busca que Chile se pronuncie frente a hechos de connotación internacional, y que concierne a la tratados en la materia que nuestro país ha suscrito.
A lo que se suma su organismo especializado en temas de educación, ciencia y cultura – UNESCO – y además la Comisión Política Especial de Política y Descolonización – Cuarta Comisión – a través de los representantes de Palestina e irán, han señalado categóricamente que Palestina sufre la violación de sus derechos humanos a manos de Israel.
Son muchos los temores que inundan la política israelí y que irradian a su sociedad, que bajo los oropeles de una riqueza aparente, oculta los costos de una ocupación contra el pueblo palestino.
Recorrer Palestina en general y la Ribera Occidental – West Bank – en lo específico deja en el visitante una impresión de una inquietante normalidad.
Ramallah ha tenido, luego de la segunda Intifada un auge inmobiliario catalizado por la llegada de miles de palestinos desde ciudades y pueblos de la Cisjordania ocupada. Hombres y mujeres, familias sin posibilidades en sus tierras y que vienen a Ramallah a ganar su sustento, estudiar y desarrollar sus actividades cotidianas pues sus aldeas y pueblos han sido usurpados, sus comercios cerrados, su forma de vida alterada.
Publicamos a continuación una carta de protesta enviada al director de nuestro Diario Electrónico por el embajador de Israel en Chile a propósito de una opinión de la diputada Camila Vallejo difundida por este medio.
La violencia y el miedo que genera intencionadamente el Estado de Israel contra el pueblo palestino es pan de cada día. Tan solo la noche del martes 26 de Julio, a tan sólo algunos centenares de metros del hotel donde hospedamos en Ramallah, las fuerzas de ocupación demolieron 11 viviendas palestinas, sin previo aviso y sin mediar provocación alguna.