El retorno a la fase de Transición en 26 comunas a nivel nacional (diez en la Región Metropolitana) trajo consigo el regreso presencial a clases de algunos establecimientos educacionales, un hecho que, según cifras del Ministerio de Educación, propició que más de 1500 colegios abrieran este jueves en todo el país.
Aunque se trata de un número que incluye también a los establecimientos que empezaron a funcionar desde el mes de marzo, en la práctica, para el Colegio de Profesores, es una realidad que no se condice con la cantidad de niños, niñas y adolescentes que cursan el año de forma presencial.
Así, para el presidente del gremio, Carlos Díaz, “estamos ante una situación que se ha venido repitiendo hace bastante tiempo por un llamado que el ministro (Raúl Figueroa) lidera, suponiendo que las comunidades escolares y, particularmente, los padres, las madres y apoderados van a escucharlo y van a enviar a los niños a la escuela”.
“La respuesta a esto se sigue repitiendo como en el año pasado y ahora en marzo de forma absolutamente mayoritaria: no encontramos estudiantes en los establecimientos. Una cosa es que las escuelas estén abiertas, pero otra muy distinta es que los niños estén ahí educándose”, agregó.
Asimismo, el dirigente criticó el hecho de que algunos medios hayan concentrado la información en el transcurso de la mañana solamente en la apertura de colegios pertenecientes a las comunas más acomodadas de la región, los cuales, evidentemente, sí cuentan con los recursos necesarios para cumplir con la normativa sanitaria vigente.
“Aquí hay una élite de establecimientos de educacionales que probablemente tengan la posibilidad de entregar seguridad para que los estudiantes asistan porque efectivamente tienen todos los implementos y gozan de muchos recursos para poder comprar y tener todo lo que se requiera. Pero es un grupo muy minoritario, no es más del 1 o 2 por ciento de los colegios de Chile. La gran mayoría tienen condiciones paupérrimas como para poder financiar y tener todo lo que señalan los protocolos elaborados por el Ministerio”, puntualizó.
Otra de las variables en las que ha insistido la cartera que dirige Raúl Figueroa para el retorno presencial a clases ha sido el hecho de que, según información del Ministerio de Salud, el 85 por ciento de los profesores y trabajadores de establecimientos educativos ya llevan más de dos semanas con la segunda dosis de vacuna contra el COVID-19, esto hasta el 13 de abril.
Sin embargo, pese a valorar el esfuerzo realizado en esta campaña de vacunación inédita, Díaz recalcó que no es el único requisito para regresar de forma presencial, sobre todo bajo las condiciones que entrega la llamada fase 2.
“Estas mismas autoridades, el año pasado habían normado que de fase 4 hacia arriba se podían abrir las escuelas, y en febrero, de un día para otro, cambian la disposición y ahora dicen que en fase 2 se puede. Eso es ridículo, creemos que obviamente no se puede volver en fase 2 y por eso es que insistimos en que más allá de que estemos vacunados, que por cierto nos parece importante, para el retorno presencial deben darse otros aspectos”, señaló.
Hace solo algunas semanas, el gremio de profesores había hecho pública que desde el inicio del año escolar, existían al menos 180 denuncias de establecimientos que se las estaban ingeniando de forma ilegal para obligar a su personal a asistir presencialmente a clases. Al respecto, Díaz recordó que, si bien las características en la fase 2 son distintas, se mantienen alerta ante situaciones como estas, exigiendo, además, una mayor fiscalización de parte de las autoridades.