Hoy se vivió una jornada clave en la Sala de la Cámara de Diputados y Diputadas con la votación de la reforma previsional.
Tras intensas negociaciones de autoridades de gobierno y una tensa discusión entre los parlamentarios, se aprobó la idea de legislar el proyecto. Con lo que el Ejecutivo anotó su primera victoria en el Congreso.
La iniciativa fue respaldada por 84 votos a favor, 64 en contra 3 abstenciones, procediendo así posteriormente a su discusión en particular en el hemiciclo.
Esta reforma previsional ha sido catalogada como uno de los pilares del programa de gobierno del Presidente Gabriel Boric, especialmente tras el rechazo a la reforma tributaria en marzo del año pasado. Por lo mismo, los esfuerzos del Ejecutivo estuvieron enfocados en lograr el visto bueno en esta parte inicial de la tramitación, el cual incluyó diálogos con las fuerzas del centro político.
Tras varias negociaciones entre la ministra del Trabajo, Jeannette Jara y representantes de sector, logró el apoyo en general de la Democracia Cristiana, el Partido de la Gente, Amarillos y Demócratas, pese a que varios anunciaron que votarían en contra de diversos artículos en la revisión en particular.
Se cae el “corazón” de la reforma
Precisamente, fue en esta instancia en que el Ejecutivo vio como puntos claves de la reforma fueron rechazados por la Sala. Este es el caso del artículo 2, que contenía la distribución de la cotización adicional del 6% y que fue materia de extenuantes negociaciones entre el oficialismo y los partidos llamados “no alineados”.
A pesar de que el Gobierno acogió la propuesta de la Democracia Cristiana de destinar tres puntos porcentuales a cuentas individuales y otros tres puntos a solidaridad, esta finalmente no alcanzó el quorum requerido, desestimándose por 76 votos a favor y 75 en contra.
Tensión en la Sala
La discusión fue en tensión creciente, con interpelaciones entre las distintas partes, al punto en que se debió suspender la sesión por unos minutos durante la intervención del diputado de Convergencia Social, Diego Ibáñez, quién criticó a la bancada de Demócratas, generando la molestia de los legisladoras de la colectividad.
Ibáñez llamó a la bancada de Demócratas a “no dejarse iluminar por la senadora Ximena Rincón” y a “no traicionar la palabra empeñada”. Esto en circunstancias en que representantes del sector habían llegado a un acuerdo con la titular del Trabajo para votar a favor de la idea de legislar.
La jefa de la bancada Demócrata, Joanna Pérez, respondió al diputado oficialista, reclamando respeto.
“Hemos querido destrabar esto, pero no merecemos el maltrato de derecha ni de izquierda porque somos un espacio de centro”, expresó, para luego anunciar el congelamiento de sus relaciones con el Gobierno debido a las declaraciones de Ibánez.
Por otra parte, en la derecha mantuvieron su irrestricto rechazo, como ya habían anunciado durante las últimas horas. Incluso, varios de los parlamentarios en sus intervenciones recordaron la postura de ministros del actual gobierno y del mismo Presidente Gabriel Boric en contra de la idea de legislar el proyecto de pensiones presentado durante la administración de Sebastián Piñera.