En pocos días, Chile vivirá el quinto aniversario del estallido social. Uno de los períodos de manifestaciones ciudadanas más importantes y transversales que se hayan registrado en el último tiempo y que, sin embargo, ha sido renegado por varios sectores políticos.
Aun así, y al margen del posicionamiento de los diversos partidos sobre el 18 de octubre, fueron las organizaciones sociales las que tomaron la posta durante esas convulsionadas semanas. Eso es, precisamente, lo que rescata “Tramas de Persistencias: ficcionalización política y realidades fragmentadas en la contemporaneidad“, exposición inaugurada este martes 1 de octubre en el Museo de Arte Contemporáneo (MAC) del Parque Forestal y que da voz a los diversos grupos ciudadanos que fueron protagonistas de las protestas.
Disidencias en Lucha, Movimiento Internacional de Trabajadores (MIT), Movimiento por el Agua y los Territorios (MAT), Movimiento Salud en Resistencia, Sobrevivientes de Terrorismo de Estado y Víctimas de Trauma Ocular son las organizaciones que se sumaron a esta iniciativa, la que ahonda en sus historias, luchas y propuestas para construir un país justo. Todo, bajo la curaduría del artista Samuel Toro Contreras.
“El curador tuvo la idea fantástica de traer a la actualidad lo que sucedió hace cinco años en Chile con el estallido, lo que nosotros desde el MIT llamamos como una revolución”, comentó María Rivera, abogada y dirigente de dicha organización en conversación con Radio y Diario Universidad de Chile.
“Originalmente, nosotros fuimos los primeros convocados a esto. Nos preguntaron quien más podría ser parte y dijimos que existían varios organismos con mucho que decir, como son los Médicos en Resistencia, la Agrupación de Disidencias en Lucha, Traumas Oculares, incluso el Movimiento por el Agua y el Territorio”, sumó Rivera, quien asistió a la ceremonia inaugural llevada a cabo en el hall del museo.
Así fue como comenzaron a trabajar en un proceso esencialmente colectivo, donde una de las principales inquietudes fue de qué forma adaptar todos estos elementos al espacio del MAC. “Los compañeros hicieron muchas reuniones con el curador buscando el enfoque, los parámetros que el museo exigía. Porque no podemos olvidarnos de que el Museo de Arte Contemporáneo es un organismo institucional. Y nosotros somos muy alternativos”, explicó la abogada.
El resultado quedó impreso en cuatro de sus salas que, dividas por temática, presentan distintas dimensiones en torno al estallido social, considerando la perspectiva política, la medioambiental y la de género y disidencias.
Entrar a la institucionalidad
Para Toro, una parte importante de la exposición está en el gesto de llevar a las organizaciones ciudadanas a un espacio tan institucional como lo es un museo. Entidad que, además, ha estado en el centro de la discusión en torno a las representaciones en el arte.
“Es un problema y una virtud. Un museo o una institución tradicional puede fácilmente cosificar o reedificar un discurso y quitarle la fuerza política. Pero también, asimismo, es muy importante que las organizaciones y algunas bases que no son muy conocidas, se conozcan”, explicó el curador.
También agregó que son “lugares de alto tránsito, la mayoría de la gente viene pensando que va a ver arte o algo meramente estético. Si tu ves los trabajos están bien montados, pero el contenido es directamente de las organizaciones de base“.
Sin embargo, la decisión de realizar ese ejercicio de poner el foco en las expresiones sociales y artísticas que surgen desde la ciudadanía es una de las características que definen el rol público del MAC. “Esta muestra y sus organizaciones nos invitan a seguir extendiendo el rol de nuestro museo como un lugar que convoca leernos y re-leernos colectivamente. Desde un espacio sensible, que es afectado y que afecta sus contextos como a las formas de presentar y representar nuestra contemporaneidad”, valoró al respecto su director, Daniel Cruz.
Gesto que toma aún más relevancia en la víspera del primer medio siglo desde que el museo se instaló en el Parque Forestal: “En esta apertura de tramas, de persistencias, continuamos como MAC conmemorando los 50 años desde que hemos llegado a este edificio. Un hito importante para nosotros. Ustedes recordarán que nuestra sede anterior estaba en el Parque Quinta Normal hace un poquito más de 50 años”, comentó Cruz.
“Estamos felices de compartir con ustedes este hito colectivo que tiene larga data. El MAC tiene su origen en el esfuerzo colectivo de artistas y gestores de la academia y de muchos y muchas quienes, bajo la propuesta de un museo que revise y atienda su contemporaneidad, y específicamente la local desde distintos prismas, busca fortalecer la identidad de un país”, concluyó sobre esta relación, recordando además el trabajo decisivo del artista visual Guillermo Núñez durante su gestión como director del MAC.
Hablar del estallido
Otro punto destacado por las organizaciones que son parte de la exposición es la importancia de no trivializar lo sucedido a partir del 18 de octubre del 2019. “Fue la consolidación de una suma de luchas de varias décadas, la expresión máxima de que el modelo impuesto por la dictadura ya no dio para más”, manifestó Rivera.
“Obviamente, es parte de la historia. No lo pueden negar, por más que algunos quieran decir que eran vándalos, criminales, todos delincuentes. Eso es falso. Lo que tienen que decir y no se atreven es que el modelo se agotó, el sistema capitalista no puede dar salida y, más temprano que tarde, volverá a haber este choque de clases. Porque la lucha de clases, aunque quieran matarla, no ha muerto”, concluyó la dirigente.
Cabe destacar que la exposición “Tramas de Persistencias: ficcionalización política y realidades fragmentadas en la contemporaneidad” estará disponible en el Museo de Arte Contemporáneo hasta el 17 de noviembre, con entrada completamente gratuita.